Cospedal obliga a funcionarios a asistir a una cumbre sobre el vino en horas de trabajo

La Junta de Castilla-La Mancha obligará a su técnicos relacionados con la actividad vitivinícola a asistir en horas de trabajo a la I Cumbre Internacional del Vino, que se celebrará los días 24 y 25 de octubre en el Palacio de Congresos de Toledo y que será inaugurada por la presidenta autonómica, María Dolores de Cospedal, y el ministro de Agricultura, Miguel Arias Cañete. La oposición ha denunciado que el único fin de esta decisión es que la cumbre "parezca un éxito”.

A través de un correo electrónico, el Director General de Agricultura y Ganadería, José Tirso Yuste, ha remitido a los jefes de servicio y coordinadores provinciales esta instrucción “en nombre de la Presidenta de Castilla-La Mancha, Dña. Mª Dolores Cospedal”.En el correo, el responsable de Agricultura y Ganadería expone que “todos los técnicos del Servicio de Vitivinicultura, del Servicio de Agricultura y del Servicio de Ayudas y Pagos Directos, tanto de Servicios Centrales como de los Servicios Periféricos de Toledo deberán asistir” al ciclo de conferencias “dadas las interesantes ponencias que se impartirán”.

La cumbre también es de asistencia obligatoria para los Jefes de Servicio de Agricultura y Ganadería del resto de provincias castellanomanchegas, acompañados de "los técnicos vitivinícolas que consideren oportunos". Los empleados públicos, además, deben confirmar su asistencia “de manera personal” –con nombre y apellidos– por teléfono o Internet “por la organización y seguridad de la Cumbre”. Mientras se encuentren la cumbre, el "servicio público" que habitualmente desempeñan será estará “mínimamente atendido”, según indica el correo.

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Igualmente, la Junta también invita –aunque en esta ocasión no obligatoriamente– “al resto de funcionarios de estos Servicios que tengan interés, así como todo aquel funcionario del Servicio de Ganadería, del Servicio de Sanidad Animal y del Laboratorio Regional Agroalimentario y Ambiental (LARAGA)”, departamentos que “nada tienen que ver con el mundo del vino”, según ha denunciado el portavoz del PSOE en las Cortes castellanomanchegas, José Luis Martínez Guijarro.

Fuentes de la oposición han indicado a infoLibre que este proceder no es nada habitual y que nunca se había obligado a funcionarios a asistir a este tipo de actos. Estas mismas fuentes aseguran que la Junta solo busca llenar el Palacio de Congresos de Toledo, para lo cual “necesita entre 500 y 1.000 personas”, e interpretan este movimiento del Gobierno de Cospedal como una forma de cubrirse las espaldas ante una baja asistencia que consideran probable. En esta misma línea, Guijarro ha calificado de “inaceptable” que el Gobierno regional “utilice el tiempo de trabajo de los funcionarios públicos que pagamos entre todos los castellano-manchegos para utilizarlos de público en un acto para mayor gloria de su imagen”.

Los socialistas aseguran que “no cabe otra explicación” para la medida adoptada por la Junta que el buscar la autopromoción, y hacen hincapié en “la insistencia de los altos cargos de la consejería para que vengan a Toledo funcionarios que no tienen nada que ver con el vino ni están cerca del lugar donde se va a celebrar este encuentro”. “El director general que remitía la instrucción”, recalcan, se esforzó en “dejar claro que venir a Toledo no costaría dinero ni habría que solicitar dieta, dado que, como dice el propio e-mail, puesto que la organización ofrecerá almuerzo en el propio Palacio de Congresos, no será necesario devengar dieta por manutención”.