Estudiantes en la manifestación de Madrid.
E. H.
Miles de estudiantes han escenificado este miércoles en las calles su rechazo a la reforma educativa del Gobierno del PP y los recortes en Educación. Aunque la de Madrid ha sido la marcha más numerosa, la movilización ha tenido réplicas en las principales ciudades del país. Es la segunda jornada de huelga del alumnado, una convocatoria la que este jueves se unirán docentes y padres.
La subida de las tasas es una de las principales reivindicaciones de los universitarios. Especialmente después de que para este curso la mayoría de las Universidades consolidaran la subida del curso pasado, cuando el precio de los créditos se encareció entre un 20% y un 66%. No obstante, algunas autonomías como Madrid optaron por llevar a cabo este año un nuevo 'tasazo' que, alertan desde el Sindicato de Estudiantes, dejará fuera de las aulas a "miles" de estudiantes. Afectadas por esta subida están estudiantes como Mayte Castellano, estudiante de segundo curso de Logopedia en la Complutense, que este curso ha visto encarecerse su matrícula en un 27%. "Tengo amigos que han tenido que dejar la carrera, profesores que nos han dicho que no les van renovar el contrato... Y a pesar de todo eso veo que aquí hay poca gente. Me indignan los que hoy se han quedado en la cama", se quejaba esta joven en el transcurso de la marcha de Madrid. Aunque Madrid, con un aumento medio del 20%, lidera la subida de los precios en los estudios de grado, no es la única que los ha incrementado. Le siguen otras autonomías como Baleares (5%), Aragón (3,6%), Cantabria (3,3%) y País Vasco (2,4%).
Además, las partidas para becas Erasmus y Séneca, cobertura de libros de texto, alumnos con dificultades, FP, formación del profesorado o Universidad mantienen los recortes que arrastran desde 2012. Lo primero lo sabe bien Cristina Carmona, estudiante de cuarto de Magisterio en Granada. Para este curso, el ministerio eliminó las ayudas para estudiar un curso en otro centro universitario del país. El pasado curso, más de 2.000 estudiantes recibieron 500 euros al mes para poder estudiar fuera de casa. Rocío sabe que este año, como máximo, podrá optar a un máximo de 3.000 euros al combinar las ayudas por renta y residencia. "En casa sólo trabaja mi padre y por eso estoy haciendo entrevistas para conseguir algñun trabajo, pero estoy a la espera de que me llamen", señala. No obstante, esta joven cree que "lo peor" llegará cuando acabe la carrera. "La única salida que veo es marcharme fuera de España. Y tampoco creo que sea fácil, pero aquí no hay nada", se lamenta.
Los universitarios denuncian que el nuevo decreto de becas, que endurece los requisitos académicos para acceder a las ayudas, también dificultará el mantenimiento dentro del sistema de miles de alumnos. El ministro de Educación, en una entrevista en TVE, cifró en unos 10.000 el número de estudiantes con una puntuación académica de entre el 5 y el 5,5 que no accederán a la exención de tasas de acuerdo con los requisitos establecidos en el nuevo reglamento. Y eso que ese cálculo no incluye a los que pueden perderla por no alcanzar el número de aprobados que se requiere para mantenerla.