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Aborto

Los barones del PP calientan la reunión con Rajoy con críticas a la ley del aborto

Mariano Rajoy y la vicepresidenta, Soraya Sáenz de Santamaría, el pasado 27 de diciembre de 2013 en la Moncloa.

Este miércoles 8 de enero Mariano Rajoy ha convocado en la sede nacional del PP al Comité Ejecutivo Nacional del partido. La reunión, que se celebra de forma periódica todos los meses tiene la peculiaridad de ser la primera que congregará a la plana mayor de los conservadores desde que el pasado 20 de diciembre pasara por el Consejo de Ministros el anteproyecto de reforma de la ley del aborto.

Desde ese día, destacados dirigentes conservadores –desde la delegada del Gobierno en Madrid, Cristina Cifuentes, hasta el presidente de la Xunta de Galicia, Alberto Núñez Feijóo– han mostrado sus discrepancias con un texto que termina con la ley de plazos e instaura un sistema de supuestos en el que no figura el del peligro psicológico para la madre.

A la espera de si el presidente del Gobierno decide poner sobre la mesa el tema motu proprio, tres barones conservadores salieron este martes a posicionarse o a insistir en sus posiciones sobre este proyecto que Mariano Rajoy dejó en manos de Alberto Ruiz-Gallardón.

El primero en verter sus apreciaciones fue el presidente de la Generalitat, Alberto Fabra. En un desayuno informativo, el president retó a sus compañeros que en los últimos días han criticado esta reforma a que lo hagan el miércoles delante de Rajoy y en el transcurso del Comité Ejecutivo Nacional del PP. En este sentido, destapó sus sospechas de que quienes en los últimos días han puesto pegas al anteproyecto pretenden "quedar bien con otros que, a lo mejor están apoyando su gobierno" y "no con aquellos que le están votando".

Como trasfondo a las declaraciones de Fabra está el hecho de que pocos dirigentes del PP se atreven a mostrar su opinión sobre temas de actualidad en los órganos oficiales del partido.

Uno de los primeros en darse aludido por las palabras del presidente de la Generalitat Valenciana fue el presidente de Extremadura, José Antonio Monago. Preguntado por estas declaraciones, el extremeño respondió lanzando otra pregunta. "A ver si el más centrado del PP soy yo y los demás están un poco confusos en este tema", señaló.

Además, reiteró su tesis de que en esta materia hay que "intentar que haya un acuerdo y un consenso" debido a que se trata de algo "muy sensible". "Sólo desde el consenso puede tener carácter de durabilidad en el tiempo", precisó en declaraciones recogidas por Europa Press.

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Por su parte, el presidente de Castilla y León, Juan Vicente Herrera, se sumó a los barones con poder regional del PP que como Monago y el gallego Alberto Núñez Feijóo discrepan del texto inicial presentado por Ruiz-Gallardón. 

Herrera abrió un debate que hasta la fecha no se había presentado en el seno del PP. A su juicio, antes de proceder a esta modificación legislativa, el Gobierno debería esperar a que el Tribunal Constitucional se pronuncie sobre la ley de 2010 de José Luis Rodríguez Zapatero.

Además, el presidente castellanomanchego abogó por escuchar opiniones "responsables" y "sensatas" como las expresadas por los alcaldes de Zamora y Valladolid, Rosa Valdeón y Javier León de la Riva, respectivamente, antes de sacar adelante una nueva regulación sobre esta cuestión.

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