Ley del Aborto
Monago lleva su oposición a la reforma del aborto al Parlamento extremeño
La resistencia de determinados sectores del Partido Popular a la reforma de la ley del aborto planteada por Alberto Ruiz-Gallardón inauguró este miércoles la que puede considerarse su segunda fase. Todo, pese a que Mariano Rajoy había demandado a los suyos que lavasen los trapos sucios en casa y no sacasen el debate puertas afuera del partido.
En esta etapa, las declaraciones se han transformado en hechos concretos. El encargado de inaugurarla fue el presidente de la Junta de Extremadura, José Antonio Monago, uno de los barones del PP que más habían mostrado en público su oposición al anteproyecto que pasó por el Consejo de Ministros del pasado 20 de diciembre.
El Grupo Parlamentario Popular en la Asamblea de Extremadura, formación que gobierna en la región gracias a los votos de Izquierda Unida, registró en la mañana de este miércoles en la cámara autonómica una propuesta de pronunciamiento respecto al texto original de Ruiz-Gallardón. La intención de la formación que preside Monago queda clara en el texto de la proposición, al que ha tenido acceso infoLibre. No es otra que la de exigir al Gobierno que no avance en el borrador de la reforma, que ya está en fase de consultas, hasta que exista el consenso.
¿Doble discurso?
Lo que no hizo el PP en la cámara regional extremeña es votar a favor de sendas propuestas de Izquierda Unida y del Partido Socialista que reclamaban la retirada del anteproyecto de la ley del aborto, lo que provocó que a Monago le llovieran las críticas de oportunista, tanto de la oposición como de algunos de sus compañeros de partido. "No puede hacerse todo sobre la base del cálculo electoral dando la espalda al programa electoral con el que tu partido ha logrado la mayoría absoluta en el Congreso de los Diputados", censuraba un dirigente nacional del PP en declaraciones a este diario.
Tras una serie de consideraciones previas, el pronunciamiento que el PP someterá a votación en el Parlamento de Extremadura aboga por "abrir un proceso de diálogo y debate con otras fuerzas políticas que conduzca a una regulación de la Interrupción Voluntaria del Embarazo mucho más consensuada, acorde con la sociedad plural y secularizada de hoy, y en consonancia con las legislaciones de los países de nuestro entorno".
Además, reclama al Ejecutivo "no avanzar en la tramitación del Anteproyecto de Ley de Protección de la Vida del Concebido y los Derechos de la Embarazada en tanto no se haya consumado el diálogo referido en el punto anterior y alcanzado acuerdos de consenso con otras fuerzas políticas".
La iniciativa del PP de Extremadura llega justo un día después de que el Grupo Parlamentario Popular en el Congreso de los Diputados vetara, gracias a su mayoría absoluta, ocho comparecencias de miembros del Gobierno para explicar el anteproyecto de reforma de la ley del aborto. "La contradicción es notoria", valoraba un diputado nacional consultado por este diario.
La misma fuente subraya que cuando Rajoy dijo a sus barones que las puertas del despacho de Ruiz-Gallardón estaban abiertas para que se le trasladasen todas las inquietudes al respecto no se refería a que llevasen este debate a los parlamentos regionales.
La iniciativa de Monago fue vista, pues, una vez más como una brecha en el discurso oficial de la dirección nacional del partido marcado por Mariano Rajoy hace una semana en el Comité Ejecutivo Nacional del PP.
Desde el PP de Extremadura, su portavoz, Francisca Rosa, señaló a infoLibre que la propuesta de su grupo no supone "bajo ningún concepto" un reto al Gobierno.
Además, destacó que su formación no habría presentado la polémica propuesta si el PSOE se hubiese sumado en la noche del martes a una declaración institucional del parlamento regional encaminada a pedir al Ejecutivo central que no lleve a cabo esta reforma de la ley del aborto sin el consenso necesario.
Una expulsión polémica
La votación de la iniciativa del PSOE que pedía la retirada de la reforma de la ley del aborto se votó en tres ocasiones, todas ellas con empate a 32 votos a favor y otros 32 en contra y bajo una enorme tensión.
Los hechos ocurrieron durante la intervención de la vicepresidenta del Gobierno de Extremadura, Cristina Teniente, para responder a una pregunta del PP sobre la gestión de las ayudas y becas de cursos de formación del Servicio Extremeño Público de Empleo (Sexpe), según informa Europa Press.
En un momento en el que Cristina Teniente hablaba de la "insufrible herencia" del PSOE de Extremadura y tachaba de "irresponsable" al Grupo Socialista, el presidente del Parlamento de Extremadura, Fernando Manzano,pidió silencio en dos ocasiones al diputado socialista Antonio Rodríguez Osuna.
Tras la intervención de la vicepresidenta, tomó la palabra el diputado del PP Francisco José Ramírez. Durante su intervención, el presidente de la cámara regional volvió a llamar la atención al diputado socialista, y le reclamó que abandonase el hemiciclo.
Propuesta PP Extremadura sobre ley del aborto [PDF]
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Según sostuvo Manzano en el pleno, la expulsión de Rodríguez Osuna se produjo porque cuando le realizó la advertencia, éste "se ha tocado la cara" como "diciendo que vaya 'jeta' que tiene esta presidencia", lo que supone "una falta de respeto a la presidencia de la cámara".
La ausencia de este diputado provocó que no salga adelante la iniciativa del PSOE que pedía la retirada de la reforma de la ley del aborto.
"Esa iniciativa no podía aprobarse porque, además de pedir la paralización de la ley, pedía que no se tocara la ley de 2010", defienden desde el Grupo Parlamentario Popular en el Parlamento de Extremadura. "Si no hay consenso, nos tememos que pase lo mismo que a la ley de 2010", sostienen las mismas fuentes.
