Los abusos de la banca

El banquero que cobró 16,5 millones por jubilarse y se libró del banquillo

José Luis Méndez

El que fuera director general de Caixa Galicia durante 29 años, José Luis Méndez, fue el banquero gallego que más dinero recibió tras su jubilación a los 65 años de la entidad financiera, con 16,5 millones de euros. Pero sin embargo no se encuentra entre las personas contra las que el magistrado de la Audiencia Nacional Ismael Moreno ha dirigido su investigación, tal y como consta en la información adelantada por infoLibre.

Los acusados de apropiación indebida o estafa son los siguientes: el excopresidente de Novacaixagalicia y expresidente de Caixanova, Julio Fernández Gayoso, y los exdirectivos José Luis Pego Alonso, Gregorio Gorriarán Laza, Oscar Rodríguez Estrada y Francisco Javier García de Paredes Moro. Pero sin embargo no se incluye a José Luis Méndez.

Auto de la denuncia inicial

Según el abogado Pablo Arangüena, que fue el autor de la denuncia inicial presentada en un juzgado de A Coruña contra los responsables del consejo de administración de Caixa Galicia y de Caixanova, pero también contra los dirigentes de la resultante tras la integración de las anteriores: Novacaixagalicia, la Fiscalía optó por acusar solo a los directivos que negociaron la fusión y la posterior percepción de las indemnizaciones, de 19 millones de euros.

Y por este motivo Méndez, que percibió 16,5 millones, quedó fuera, pues había dejado la dirección de Caixa Galicia meses antes de que se las cajas se fusionaron. En total los cuatro imputados y Méndez percibieron 35,5 millones de euros.

Por eso, según la Fiscalía Anticorrupción, Méndez no participó en la modificación de los contratos de alta dirección de los imputados. Según la querella del Ministerio Fiscal, los hechos se inician "a partir del 11 de mayo de 2010" con motivo del acuerdo de fusión entre Caixa Galicia y Caixa Nova y de la petición de un primer apoyo financiero al Gobierno de 1.162 millones de euros.

En esas fechas Méndez ya había comunicado su salida de Caixa Galicia después de haber perdido la batalla por el poder. De hecho, el que hasta ese momento era el director adjunto ejecutivo, Javier García de Paredes, fue el encargado de asumir las tareas de Méndez hasta que la integración se hiciera efectiva, según publicó La Voz de Galicia.

Méndez no estaba ya en la caja

"La clave de que Méndez no esté imputado es que salió de la entidad antes de que los imputados el echaran en contra de su voluntad. Y a raíz de mi denuncia la Fiscalía Anticorrupción presenta su querella, que concreta la identidad de las personas que consideraba implicadas", indica Arangüena.

En este sentido, el letrado interpreta que la Fiscalía detectó que Méndez "no se encontraba entre los beneficiarios de los nuevos contratos de alta dirección", por lo que según el fiscal tampoco pudo ser cooperador necesario, tal y como sí considera el Ministerio Público en relación al exdirigente de Caixanova Julio Fernández Gayoso, que no se benefició de las indemnizaciones, explica el denunciante.

Además de por su retiro, Méndez fue objeto de una querella por parte del letrado José Carlos Piñeiro González que inicialmente se acumuló con la presentada anteriormente por Pablo Arangüena, militante socialista. Pero el magistrado Ismael Moreno, siguiendo el criterio de la Fiscalía Anticorrupción, desestimó investigar al que fuera mandamás de Caixa Galicia durante casi tres décadas.

Y tampoco a sus hijos José Luis y Yago Enrique, que también eran directivos de la caja dirigida por su padre, informa El Faro de Vigo. El decano de la prensa española también publicó que el juez Moreno basó su decisión de desestimar la demanda contra Méndez asegurando que la "mala gestión no es delito".

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8.981 millones de rescate

La entidad resultante de la fusión, Novacaixagalicia (ahora Novagalicia Banco) es la tercer entidad financiera de España que más dinero ha necesitado para evitar la quiebra. Según los datos del Banco de España ha recibido del Estado 8.981 millones.

A mediados de diciembre, el banco venezolano Banesco se quedó con la entidad gallega por 1.003 millones de euros. Además, el banco sudamericano tendrá que abonar otros 600 millones se varios plazos hasta el año 2018.

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