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El final de ETA

El líder del PP en Errenteria sugiere que a Mayor Oreja no le interesaba la paz

Chema Herzog es concejal y portavoz del Partido Popular en Errenteria (Gipuzkoa), aunque su postura sobre muchos de los asuntos que ocupan la agenda política de Euskadi dista bastante de la línea marcada por su partido desde su sede nacional en Génova.

El programa Salvados de la Sexta emitió este domingo Tres días en Errenteria, en el que se analizaba el ambiente político en este municipio –muy afectado históricamente por la violencia– desde que ETA anunciara el cese definitivo de la actividad armada.

Jordi Évole recogió el testimonio del exalcalde de Errenteria, Miguel Buen (PSE-EE PSOE), así como el del actual regidor, Julen Mendoza (Bildu), que se mostraron optimistas respecto a los pasos que se están dando para lograr la normalidad política en el País Vasco. Pero fueron las declaraciones de Herzog las que más destacaron, pues se atrevió incluso a insinuar que a algunos miembros de su partido no les interesa el fin de la violencia.

En concreto, el concejal conservador dijo: "Si tú tienes una empresa de seguridad o intereses en una empresa de seguridad, te interesa que no haya seguridad para vender tu producto". Ante esta afirmación, el presentador catalán le preguntó si estaba insinuando que a Jaime Mayor Oreja (exministro del Interior y portavoz del PP en el Parlamento Europeo) le interesaba que la situación en Euskadi estuviera "excitada". "Pudiera haber sido así", afirmó Herzog, "pero no lo afirmo porque no me quiero ver en una querella". 

Herzog defendió vehementemente a su partido en Euskadi: "El Partido Popular... del País Vasco, –enfatizó– es de chapó del primero al último. Aquí no tenemos nadie una cuenta en Suiza".

Previamente, el político reconoció que desde dentro del País Vasco se percibe una reconciliación que no se ve desde fuera. "Aquí hemos sufrido todos de primera mano y sabemos lo que es eso. En otras partes puede que azucen a las facciones para sacar un rédito político, y además sin salpicarse nada [...] como la guerra está en otro sitio... eso es muy cómodo. Aunque sea a 470 kilómetros", en clara alusión a la distancia que existe a Madrid.

Évole preguntó al concejal si creía que su partido estaba aprovechando la oportunidad del cese de la violencia. "No les puedo dar lecciones. Ellos sabrán lo que tienen que hacer", y puntualizó que no le parece que lo hagan mal, ya que "en el pasado se hizo peor".

Torturas y relación con Bildu

El PP 'esconde' a Mayor Oreja

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¿Ha habido en Errenteria otros tipos de terrorismo que no sean el de ETA? "Mayoritarimente el de ETA, y luego me consta que ha habido torturas", contestó decidido Herzog. "Aquí se ha hecho la bañera, la bolsa, el apaleo, los electrodos... el que lo ha hecho no tiene ni nombre, aunque milite en las Fuerzas de Seguridad del Estado", añadió. "Yo no soy capaz de ponerle la pistola en la cabeza a un tío, pero tampoco podría ser un guardia que le hace la bañera a un preso".

Sobre su relación con el partido mayoritario en el consistorio municipal, Herzog también fue bastante claro: "Bildu no es la izquierda abertzale tradicional. No puedo ver en ellos a la antigua Herri Batasuna o a ETA. Son otras personas y también han hecho un esfuerzo de acercamiento". La línea de actuación para este concejal es clara: "Ceder, conocerles, darles la mano y tratar en lo que sea. Para eso estoy, para poder llevar los asuntos y negociar lo que interese a mi votante y al electorado en general". En este sentido, se muestra convencido de la reconciliación: "Yo tengo fe en eso y hago lo posible porque así sea. Además llevamos camino de eso". 

También se pronunció sobre una de las reclamaciones tradicionales de la izquierda abertzale: el acercamiento de presos vascos a Euskadi. Para Herzog, la dispersión "penaliza más a los familiares que los presos mismos. Esas personas no han cometido delitos", apuntó. En esa línea afirmó ser "partidario de la convicencia y de facilitarla", aunque matizó que no lo es de regalar nada indiscriminadamente. "Son muchos factores... y yo soy el concejal de un pueblo, no el ministro del Interior".

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