El presidente de la Generalitat,
Artur Mas, aseguró este martes que "es imposible explicar honestamente qué pasará" en un escenario político como el actual, cuando se entra en un "
terreno desconocido" es difícil "dar seguridades absolutas" a la población.
Mas hizo estas declaraciones en la apertura del curso 2014-15 del Ateneu Barcelonès, augurando que
la unidad de los partidos políticos que apoyan el 9N se va a mantener: "¿Qué otro camino hay?".
También comparó al Estado con un
"padre autoritario e intransigente" que no acepta que sus hijos,
los catalanes, ya son mayores de edad. El presidente de la Generalita declaraba que, en el contexto político actual, los dirigentes políticos deben acostumbrarse a
"gobernar la incertidumbre".
Pese a ello, Mas aprovechó su intervención para reafirmarse en la ejecución de la hoja de ruta soberanista:
"Depende de nosotros que las cosas sigan fuertes". "Tengo que expresar mi confianza en que esta etapa de prueba la sabremos superar", explicaba Mas, apuntando que "pese a todos los augurios que decían que se rompería, hasta ahora
el consenso político ha prevalecido".
Cronología del proceso
En su intervención, Mas hizo una radiografía del proceso soberanista y de la política catalana en los últimos 15 años. En este sentido, destacó que
las cosas empiezan a cambiar en Catalunya tras la recentralización que, en su opinión, comenzó en el Gobierno español durante la segunda legislatura de Aznar, entre 2000 y 2004. Luego, tuvo lugar la
reforma del Estatut, la negociación del actual sistema de financiación por parte del segundo tripartito presidido por José Montilla, y que el Estado sólo cumplió en su primer año, y el
malestar generado por el recorte del Estatut. También recordó recordó su programa de gobierno cuando llegó a la presidencia de la Generalitat, en 2010, basado en el
pacto fiscal, que rechazó el Ejecutivo de Mariano Rajoy.