El PP deja la elección directa de alcaldes fuera del programa de la Intermunicipal

Salvo cambios de última hora, la denominada elección directa de alcaldes queda fuera del programa oficial de la reunión Intermunicipal que los conservadores celebrarán este fin de semana en Murcia. La cita, a la que asistirá una nutrida representación del poder local del Partido Popular, será clausurada por el propio Mariano Rajoy el domingo. Desde que el pasado verano la formación conservadora lanzara la propuesta de una reforma electoral, a fin de que en los ayuntamientos gobierne la lista más votada, la idea se ha ido desinflando hasta el punto de que algunos sectores la dan por enterrada. No obstante, en público, los dirigentes de la formación se resisten a confirmar que dan marcha atrás y que no estará en vigor para las municipales de mayo, tal y como se dijo en un primer momento. El cierre en banda de la oposición a debatir sobre este asunto a las puertas de unas elecciones pesa mucho.

Según ha podido saber infoLibre, el borrador con las secciones temáticas que se han fijado para las mesas de debate no contempla ningún punto específico destinado a la que fue la iniciativa estrella del partido durante todo el verano. De los tres foros temáticos a debate, ninguno de ellos está basado en la propuesta de una reforma local. Son los siguientes: "Ayuntamientos claves para salir de la crisis", "Ayuntamientos garantía de cohesión" y "Servicios públicos más eficaces".

No pasa inadvertido que fue precisamente la presión de los alcaldes la que llevó a que Mariano Rajoy anunciase en julio su voluntad de legislar para que en los municipios gobierne la lista más votada. Tras el descalabro de las europeas, la dirección nacional del partido convocó reuniones en Madrid a las que acudieron cargos autonómicos y provinciales. Una de las demandas que más pudo escuchar Carlos Floriano, vicesecretario de Organización y Electoral e interlocutor en estos encuentros, fue la necesidad de un cambio en la ley electoral en este sentido. A ello hay que sumar, además, el temor, corroborado por las encuestas, a perder ayuntamientos emblema para el PP como el de Madrid y el de Valencia.A la espera de un gesto definitivo de Rajoy

Así las cosas, fuera del guión oficial de la Intermunicipal esta cuestión, la pelota está en el tejado de los intervinientes, sobre todo del presidente del partido. "Para bien o para mal, este tipo de anuncios solo los puede hacer el jefe", explica un diputado nacional. Un silencio de Rajoy al respecto sería interpretado como la confirmación de que el PP ha decidido aparcar el tema hasta, al menos, después de las municipales y autonómicas de mayo. Menos se espera un pronunciamiento expreso de que está dispuesto a poner en marcha la maquinaria para reformar la ley electoral sin consenso. Primero, porque el tiempo se agota y segundo, porque se desconoce si el coste político de la medida, bautizada por la oposición como "pucherazo", va a ser mayor que sus posibles beneficios para el PP.

Cada día que pasa, en el PP están más convencidos de que la denominada elección directa de alcaldes va a quedar en un anuncio de alto impacto que animó el debate político durante el mes de agosto. Vendida como una forma de evitar los "pactos oscuros" en los despachos, la iniciativa se cayó a principios del curso político del denominado paquete de regeneración democrática. Bastó una reunión entre el PP y el PSOE en el Congreso de los Diputados para que la dirección del Grupo Parlamentario Popular anunciase que esta iniciativa quedaba fuera del citado paquete. Fue la condición que puso el PSOE para seguir negociando sobre iniciativas contra la corrupción. Fue aquel día cuando empezó a estar claro que Rajoy dudaba de dar el paso en solitario. Pero, hasta la fecha, nadie ha admitido en público la renuncia oficial. De hecho, para mantener el debate, se anunció que sería la dirección nacional del partido la que iba a encargarse de negociar al respecto con el resto de formaciones, pero ya fuera del ámbito parlamentario.

Las fuentes consultadas aseguran que fue Rajoy el encargado de sondear a Pedro Sánchez y que la secretaria general, María Dolores de Cospedal, ha mantenido contacto con otras formaciones. La impresión que se han llevado de estos encuentros es buena, dicen. Sostienen que el fondo es compartido. Pero que lo que no encaja son los tiempos, la proximidad de las elecciones. Así las cosas, son pocos en el PP los que creen que esto saldrá adelante para aplicarse en mayo de 2015.

Las bases de la propuesta

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Aunque desde el PP siempre se insiste en que su propuesta no es cerrada, sino un posible punto de partida, se parte del 40% como porcentaje para otorgar a una lista la mayoría absoluta. Una especie de bonus o prima que permitiría a algunas ciudades mantenerse bajo las siglas del PP pese a la esperada caída de votos en las municipales previstas para 2015. Baste un ejemplo: en las elecciones de 2011, el PP cosechó el 49,96% de los votos en el Ayuntamiento de Madrid. Una mayoría absoluta que lo seguiría siendo con la nueva fórmula si lograse el 40% de las papeletas.

En el caso de Valencia, el margen es aún mayor si se tiene en cuenta que en las anteriores municipales Rita Barberá conquistó el 52,54% de los votos. Perdiendo 12 puntos, retendría para el PP este consistorio.

Los borradores que hasta la fecha había manejado el partido contemplaban que la regla del 40% se podía aplicar siempre y cuando la diferencia con la segunda formación más votada fuese de cinco o más puntos. Para el resto de casos, se proponía una segunda ronda.