Cataluña

Una de las protagonistas de ‘Ciutat Morta’: “Me han despedido por participar en el documental”

La polémica generada por la emisión hace unos días en la televisión pública catalana del documental Ciutat Morta no cesa. La obra, que denuncia supuestas pruebas que descargarían de culpa a los cuatro condenados por las lesiones que sufrió en 2006 un guardia urbano que participaba en el desalojo de una fiesta en una casa okupa de Barcelona, ha provocado que desde organizaciones civiles hasta algunos partidos políticos hayan pedido la revisión de la sentencia del conocido como caso 4F. Y también ha acabado con el despido de una de las protagonistas del documental, Silvia Villullas, de su puesto de trabajo.

En el año 2006, un guardia urbano de Barcelona quedó en estado vegetativo tras producirse un altercado al desalojar una fiesta que se celebraba en una casa okupa de Barcelona. El documental narra como, poco después, varias personas fueron detenidas y acusadas de haber agredido al agente, entre ellos Patricia Heras, que fue arrestada en el hospital después de haber sufrido un accidente de bici. En 2011, tras años de esperas, juicios y denuncias de torturas por parte de los acusados, Heras se suicidó en uno de sus permisos penitenciarios.

Ciutat Morta –que consiguió el premio al mejor documental en el Festival de Cine de Málaga– fue emitido hace unos días en la televisión pública catalana. Y las reacciones no han dejado de sucederse desde entonces: varios partidos han pedido la revisión de la sentencia del caso, aunque que la Fiscalía, por el momento, se ha negado. Por su parte, Villullas, abogada y amiga de la fallecida Heras, ha denunciado este martes que la empresa Segur Ibérica la ha echado de su puesto de trabajo por participar en el documental.

La empresa niega la acusación

La afectada, en declaraciones a infoLibre, ha explicado que el despido se produjo el lunes, cuando una responsable de la compañía le comunicó que "según ordenes del director territorial" la empresa había resuelto su relación laboral.  ¿El motivo? según Villullas, que su participación en Ciutat Morta "tenía un cierto compromiso político relacionado con críticas a la policía, y como el director territorial está relacionado con la policía no quería trabajar conmigo". 

Segur Ibérica, no obstante, ha negado esta versión de los hechos y ha asegurado que su relación con la abogada "se limita a una semana de prueba en la sede central de la compañía en Madrid". Villullas admite que aún no ha recibido ningún documento que acredite por escrito su despido de la empresa, y se muestra extrañada dado que afirma que le confirmó sus datos "para que no hubiera confusiones".

En la rueda de prensa también ha intervenido Rodrigo Lanza, uno de los jovenes que fue condenado en su día por los hechos y cumplió su pena. Lanza ha asegurado que "está probado y más que probado" que tanto él como sus compañeros son inocentes, y ha asegurado que su detención y posterior encarcelamiento se debieron a motivos racistas. "Soy consciente de que fueron a por nosotros porque éramos sudamericanos. Es más fácil condenar a tres sudamericanos que a tres catalanes", ha denunciado Lanza, un punto de vista que Villullas comparte.

"Es evidente que cuando preparan todo este montaje policial para sacarse de en medio un problema que se les había venido encima y una negligencia por parte del ayuntamiento, los que entran en prisión sudamericanos, porque normalmente la gente que es extranjera tiene menos recursos, menos redes de apoyo y menos facilidades", denuncia la abogada. En Ciutat Morta, no obstante, se habla de la existencia de un testigo cuya versión podría desmontar la acusación de que los condenados agredieron al guardia urbano, ya que apunta que el guardia fue alcanzado por una maceta lanzada desde el interior del edificio y no por piedras lanzadas por los okupas.

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Un testigo anónimo

La identidad de este testigo, no obstante, no ha trascendido, si bien el abogado de Lanza ha afirmado que se encuentra en contacto con él. Este testigo, relata Villullas, "conoce a la persona que habría tirado la maceta", aunque la amiga de la fallecida Heras guarda silencio sobre la razón por la que no ha aparecido antes y el motivo de su anonimato. Lo único que explica es que "los abogados están diseñando la estrategia jurídica" para intentar que se produzca una revisión de la sentencia, si bien no descarta celebrar algún acto público para hacer presión en este sentido.

Por de pronto, quienes se han pronunciado con claridad han sido los partidos políticos. De esta forma, CiU y el PP han defendido la versión de la Guardia Urbana: el alcalde de Barcelona, el convergente Xavier Trias, ha asegurado que está "a ultranza" con el cuerpo policial, mientras el presidente del grupo municipal del PP en el Ayuntamiento de Barcelona, Alberto Fernández, ha mostrado su "pleno" apoyo a los agentes. Por contra, las CUP, Guanyem, el PSC, ICV-EUiA y ERC han reclamado que la Fiscalía estudie los nuevos indicios.

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