Pacto entre el PP y el PSOE

El PSOE cancela por segunda vez en 15 días unas jornadas contra la ‘ley mordaza’ de Rajoy

Greenpeace participó el sábado en la marcha contra las reformas del Código Penal y la Ley de Seguridad Ciudadana con una réplica de un león de las Cortes amordazado.

Por segunda vez en lo que va del mes de febrero, este lunes, el Partido Socialista ha cancelado unas jornadas parlamentarias concebidas para "visibilizar la soledad del PP" en materia de seguridad ciudadana. Estaba previsto que inicialmente se celebraran el 3 de febrero. Pero, "motivos de agenda", hicieron que se aplazaran al lunes 16. Pero tampoco tuvieron lugar. Fuentes del Grupo Parlamentario Socialista consultadas por este diario no explican los motivos por los que la convocatoria no ha visto la luz. Pero aseguran que se buscará otra fecha y que ahora el encuentro tendrá lugar en el Senado, donde el proyecto de ley del Gobierno sigue su tramitación parlamentaria. "Seguimos pensando lo mismo de la ley y seguimos adelante con las jornadas. Se celebrarán en la fecha que más nos interese políticamente", explica la diputada Ángeles Álvarez a infoLibre. Esta parlamentaria por Madrid ha sido, junto a su compañero Antonio Trevín, la encargada de la coordinación de esta convocatoria que ha sido aplazada dos veces en menos de 15 días.

Al acto, además del resto de fuerzas de la oposición, habían sido invitadas 20 organizaciones entre sindicatos, organizaciones de defensa de los derechos humanos y movimientos sociales. De hecho, la idea inicial de las jornadas partió de la Plataforma No Somos Delito. Desde este colectivo se pusieron en contacto con el principal partido de la oposición para ver la forma en la que se podía vertebrar un acto en sede parlamentaria que visualizara el rechazo a la Ley de Seguridad Ciudadana, conocida como ley mordaza entre sus opositores. Tras unas conversaciones iniciales, la propuesta empezó a tomar forma. El PSOE se encargaría de hablar con el resto de partido de la oposición de cara a lograr la firma del documento que presentó. No Somos Delito, del compromiso de retirada de la ley mordaza por todos los partidos de la oposición. A los socialistas también les correspondían cuestiones logísticas como la reserva de la sala. La plataforma se ocupó, además de definir el contenido de la jornada, de promover la participación de las organizaciones y colectivos. "El jueves 29 cerramos los términos y acordamos lanzar la convocatoria [para el día 3]. La gente empieza a escribirse, reserva billetes [a Madrid]", cuenta Carlos Escaño, portavoz de la plataforma.

"El jueves 29 cerramos los términos y acordamos lanzar la convocatoria ese mismo día [para el día 3]. Los portavoces de las organizaciones, colectivos y partidos se reservaron la fecha, había ya 90 personas inscritas, reserva billetes [a Madrid]", cuenta Carlos Escaño, portavoz de la plataforma. "La actuación del PSOE nos ha indignado mucho por el daño que ha hecho a esta reivindicación. Su actitud ha dañado tanto a la forma como al contenido de las jornadas", lamenta. “Si bien hemos seguido adelante, el acto en el Ateneo fue un éxito y logramos para el 14 de febrero una mayor implicación de los actores sociales con el objeto de parar la ley mordaza”.

Pegado al pacto antiyihadista

La primera de las cancelaciones –la de la convocatoria del 3 de febrero– tuvo lugar el viernes 30 de enero. Por estas fechas, el Gobierno y el principal partido de la oposición estaban cerrando los flecos de lo que sería el pacto antiyihadista. De no haberse planeado una fecha alternativa, estas jornadas, concebidas como una forma de proyectar la soledad de los conservadores después de la aprobación en solitario de la ley de seguridad ciudadana, habrían coincidido con el registro en el Congreso de los Diputados de la iniciativa conjunta PP-PSOE. No obstante, en la formación liderada por Pedro Sánchez desvincularon el aplazamiento de este acto con la firma del citado pacto. En un primer momento, las fuentes parlamentarias socialistas consultadas no esgrimieron ningún motivo concreto. Después se citaron "motivos de agenda". Y se insistió en la nueva fecha: 16 de febrero. Así constaba en una carta, con fecha del 2 de febrero, remitida a los convocados: "Este cambio no implicaba la suspensión del acto, sino únicamente posponer la Jornada Parlamentaria al día 16 de febrero en los mismos términos acordados".

"El viernes 30 nos llaman para decirnos que por cuestiones de agenda del Partido Socialista, las jornadas se trasladan. Les respondimos que teníamos que reunirnos las organizaciones y colectivos parta decidir si manteníamos la fecha desde la que se convocaría a la movilización que tuvo lugar en más de 25 ciudades el 14 de febrero o si posponíamos la jornada. El viernes por la tarde lo ponemos sobre la mesa y, por consenso, se toma la decisión de que las jornadas siguen adelante. Si el PSOE no solicitaba la sala del Congreso, lo haría otro", añade Escaño.

Siguiendo este esquema, el día 2 por la mañana, el Grupo de la Izquierda Plural registró la petición de sala para la celebración de esas jornadas. No tuvo éxito. Por entonces, las fuentes de la Cámara consultadas por infoLibre precisaron que la respuesta fue negativa por un par de cuestiones técnicas. La primera tenía que ver con el hecho de que la solicitud iba dirigida a la Mesa –el órgano de Gobierno del Congreso– y que ésta no se reunía hasta el miércoles de aquella semana. Es decir, que cuando la petición fuese estudiada el miércoles –día 4– la fecha prevista ya habría transcurrido. La segunda tenía que ver con que los servicios de la cámara ya tenían previamente una solicitud de aplazamiento de esas jornadas presentada en "tiempo y forma", para el día 16. "Cuestiones de agenda propia"

Tras esta negativa del Congreso, desde No Somos Delito optaron por el plan B. Cuenta Escaño que, aunque la repercusión del acto no iba a ser tan grande como si se hubiese celebrado en sede parlamentaria, éste tenía que celebrarse. Se había embarcado a mucha gente, incluso de fuera de Madrid, y no estaban dispuestos a que "cuestiones de agenda propia" de los socialistas empañasen todo el trabajo previo. El plan B fue trasladar el formato y los participantes –salvo el PSOE– al Ateneo, muy cerca del Congreso. "Por tanto, damos la jornada por celebrada", dicen desde el movimiento del que partió la idea. "En el PSOE han intentado apropiarse este asunto. Pero tienen que ser conscientes de que estas formas ya no valen al tratarse de un acto conjunto de partidos, organizaciones y movimientos comprometidos en la retirada de la ley mordaza no pueden imponerse las cuestiones de agenda de un solo partido", añade Escaño.

Los convocantes mantienen que antes de trasladar las jornadas al Ateneo comprobaron que la "inmensa mayoría" de los colectivos y formaciones con los que se había contactado inicialmente iban a asistir. Se intentó, incluso, que el PSOE mandase un representante. Se les guardó sitio. Pero no fue nadie en representación, aseguran.

Tal y como estaba previsto en el borrador del orden del día de las jornadas parlamentarias, al final del acto del Ateneo, los partidos asistentes firmaron una carta en la que se comprometían a derogar la Ley de Seguridad Ciudadana en caso de llegar al Gobierno. A día de hoy siguen faltando las firmas del PSOE, CiU y UPyD, según No somos delito.

Escaño mantiene que el PSOE no ha vuelto a ponerse en contacto con la plataforma desde la primera cancelación con las jornadas. Un extremo que confirma la diputada Ángeles Álvarez, que sostiene que con quienes sí han hablado es con las asociaciones con las que habían contactado previamente para el acto del día 3. De las 20 asociaciones organizaciones y colectivos con las que se contaba inicialmente, todas fueron a propuesta de No Somos Delito si bien formalmente diez fueron invitadas por No Somos Delito y diez por partidos políticos asistentes.

La FAPE planta cara a la Ley de Seguridad Ciudadana

"No implica la suspensión"

Álvarez lamenta que "se decidiera que la fecha era más importante que el fondo de la cuestión" y recalca que el PSOE pilotará esas jornadas en contra de la Ley de Seguridad Ciudadana que tendrán lugar en la fecha que más les interese a "efectos políticos". Pero ahora, en el Senado.

En la misiva, remitida el día 2 a los partidos y asociaciones contactadas previamente, además de lamentar los perjuicios que pudiese haber provocado el aplazamiento, se pone de manifiesto "el rechazo frontal a la conocida como ley mordaza. "La entendemos como una norma regresiva y peligrosamente limitativa de derechos fundamentales de los ciudadanos, comprometiéndonos, además, a promover su derogación en la próxima legislatura, si la aritmética parlamentaria así lo permite", añade.

Más sobre este tema
stats