El coordinador federal de IU, Cayo Lara, apuntó este lunes por una solución "integradora" al conflicto abierto con la federación de Madrid que incluya a todos aquellos que
"echaron o se tuvieron que ir" por desacuerdos con la dirección regional que, según recordó, ya
presentó su dimisión la pasada semana.
Cayo Lara apostó así por superar este conflicto después de que la Presidencia Federal aprobara el pasado viernes un documento instando a adoptar una decisión "urgente" que ponga fin a la situación. "Es el mejor ejemplo de lo que nunca debe hacer una organización que se tenga el mínimo aprecio", dijo Lara al inicio de la Presidencia.
Según recordó este lunes en rueda de prensa, el secretario de Organización de IU, Adolfo Barrena, debe presentar el domingo ante el Consejo Político Federal una propuesta que será votada por todos sus miembros. "Espero que después del domingo no se vuelva a hablar más del conflicto de Madrid", reconoció Cayo Lara.
Eso sí, pidió que cualquier decisión que se adopte se haga teniendo en cuenta que la actual dirección ya presentó su dimisión en bloque la pasada semana por los malos resultados electorales obtenidos y convocó una asamblea extraordinaria.
"Tiene que ser una opción de integración donde los que marcharon o echaron tienen que volver y estar en casa. Si hablamos de unidad externa, tenemos que tener unidad interna", sostuvo sin querer desvelar si prefiere la opción de desfederar IUCM o, en cambio, apuesta por una solución intermedia como la creación de una gestora.
En el retro paladar de la memoria política nos regurgita a muchos el ácido resquemor de las viejas estrategias Peceras, en las que la sombra estalinista proyectaba su visión sobre todas las cosas; el partido era el único bien común. Era necesario preservarlo del influjo de los tiempos, mientras su poder omnisciente prefijaba en sus seguidores la seguridad de que cualquier cosa emanada de su seno era la correcta, y nada ni nadie debía cuestionar la veracidad de este principio pilar de su existencia. Hoy, ese rancio sabor se despierta de nuevo ante nosotros al presenciar una estampa tan patética como inútil a la que pretenden llamar convergencia, confluencia, ríos paralelos, la santísima trinidad…¿cómo le llamarán mañana?. La terminología Pecera como su nomenclatura orgánica forman parte de esa liturgia de la nada, del humo en el que han fraguado todos sus errores políticos, su incompetencia y la pereza natural ante el dios partido. Que bonito es ver pasar los días.
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