Ahora Madrid y PSOE exhiben sintonía y no descartan un Gobierno de coalición en el futuro en la capital

Lo que hay por ahora es un "acuerdo de investidura" sobre el programa entre Ahora Madrid y el PSOE para que Manuela Carmena se convierta este sábado en alcaldesa de la capital y acaben así 26 años de Gobiernos de la derecha. Pero la relación entre las dos fuerzas irá "a más" en los próximos meses. Sin que se descarte un Gobierno de coalición para más adelante.

El lenguaje corporal y las palabras de Manuela Carmena y el socialista Antonio Miguel Carmona dejaban entrever que ese puede ser el camino, según se vaya avanzando. Ambos compartieron una concurridísima rueda de prensa en una pequeña sala del centro de Madrid, la primera que compartían tras las elecciones y en las que detallaron el contenido del acuerdo de Ahora Madrid y el PSOE. Pacto que ya estaba cantado desde la noche electoral, pese a todas las maniobras de la candidata de la fuerza más votada, Esperanza Aguirre, de frustrar la llegada de Carmena a la Alcaldía de Madrid.

El acuerdo [consúltalo aquí en PDF] se asienta en seis grandes ejes (un Ayuntamiento "transparente y honesto", una Administración "cercana y abierta", la vivienda "como un derecho", una Corporación "igualitaria", una ciudad "sostenible y equilibrada" y una estructura "profesional y eficaz"), y en una serie de medidas urgentes. Además, se crea una comisión de seguimiento entre Ahora Madrid y el PSM para vigilar el cumplimiento del acuerdo.

Ahuyentar el miedo al 'tamayazo'

La primera traducción de ese pacto es que los nueve concejales socialistas votarán este sábado a favor de la investidura de Carmena. 29 votos en total, la mayoría absoluta que servirá para impedir que Aguirre sea alcaldesa. Y sin que se plantee un tamayazo, como han especulado los medios de la derecha en los últimos días. 

Carmona defendió que además daba cumplimiento a la directriz aprobada en el Comité Federal del PSOE del pasado 30 de mayo de facilitar Gobiernos "de progreso". Pero ese Comité Federal también puso por escrito la "voluntad" de los socialistas de no entrar en los Ejecutivos que no sean dirigidos por miembros de su partido. Una línea clara que se dejó sobre el papel para evitar acusaciones de entreguismo a Podemos antes de las generales. Este viernes, el presidente de la gestora del PSM, Rafael Simancas, reconoció en Antena 3 que se debatió si Carmona debía integrarse en el Gabinete, pero fue el Comité Federal el que decidió que no, informa Europa Press.

Carmona, por tanto, no entrará por ahora en el Ejecutivo de Carmena, pero no lo descartó cuando se le preguntó expresamente si se lo planteaba de cara al futuro, cuando pasen las generales de final de año: "Hemos tomado la siguiente principal decisión: hacer camino al andar. Y en eso hemos coincidido Manuela y yo. Nosotros vamos a velar por un Madrid de progreso, participativo y próspero. Al final del camino, como decía el poeta, el camino mismo".

A lo que sonaban las palabras de uno y otro, igual que el texto presentado, era a, como poco, un acuerdo de legislatura. "Me encanta que podamos desorientaros un poco –bromeó Carmena con la prensa–. Hacemos política nueva y yo comprendo que esto no encaja. Esto es un acuerdo de investidura sobre el programa. Pero preparaos, porque haremos cosas nuevas [...]. Esto es un acuerdo de investidura, pero con vocación de hacer camino, como ha dicho Antonio Miguel". "El acuerdo irá a más porque no puede ir más que a más, porque Madrid hay que cambiarlo completamente. Necesitamos fórmulas de entendimiento, que creo que van a ser fáciles con Manuela Carmena".

Estructura no definitiva

El candidato resaltó la "satisfacción" por el acuerdo en las dos formaciones y se comprometió con la "estabilidad" del Ayuntamiento. En todo momento destacó que había cumplido con lo dispuesto por Ferraz, que tiene "conversaciones casi a diario" con Pedro Sánchez, que es"amigo" y del que ha tenido y tiene el "respaldo absoluto". El secretario general del PSOE le pidió que mirara por el "programa mejor para los ciudadanos de Madrid". "Y eso es lo que hemos hecho, no mirando a noviembre, ni a diciembre ni a enero". O sea, a las generales. También dejó claro que el PSOE "no pacta con Podemos", sino con Ahora Madrid, y que Carmena "no es populista". Ella volvió a repetir que la lista municipal no es "una filial" del partido de Pablo Iglesias.

La próxima alcaldesa tampoco dio por sellado el borrador de organigrama de Gobierno diseñado que se ha conocido en los últimos días. En él, gozarán de peso Rita Maestre, dirigente de Podemos, como nueva portavoz (26 años), y Marta Higueras, vicealcaldesa y delegada de Equidad, Derechos Sociales y Empleo, un área de  nueva creación. Esta fue directora de Justicia del Gobierno vasco de Patxi López (para el que también colaboró la exjueza) y es persona de la máxima confianza de Carmena. La nueva regidora defendió que la estructura que ha pensado es "esencialmente conservadora", hecha para que el Ayuntamiento pueda seguir funcionando una vez tome posesión, pero "no quiere decir que sea la definitiva".

La exjueza también subrayó que quiere "colaborar" con Ciudadanos, que con Begoña Villacís al frente debuta en el Consistorio con 7 ediles. Ya ha comentado que algunas de sus propuestas las ve interesantes. Con Aguirre, en cambio, no ha hablado.

Algo "más importante que un matrimonio"

Durante la rueda de prensa, los dos se esforzaron en mostrar sintonía y en subrayar sus "coincidencias absolutas", porque ambos se han querido centrar durante la negociación en lo que les "une", orillando los aspectos en los que podían discrepar. Por ejemplo, en la bajada del IBI, que el PSM ha propuesto. Ahora Madrid se muestra abierta a revisar a la baja la tributación de los afectados por una imposición "más fuerte". "Es un acuerdo desde el rigor y la seriedad de dos fuerzas de progreso. En el entendimiento personal, no sólo coincidimos en casi todas las letras del apellido, sino intelectualmente y personalmente", añadió el socialista.

Carmona, incluso preguntado por la "luna de miel" entre ambos, explicó que esta la hacen "los que se casan". "Nosotros somos algo más importante, probablemente, que un matrimonio. Nosotros somos amigos". 

Uno de los puntos en el que más interés tenía el PSOE era procurar la "democratización" del Ayuntamiento, de forma que tuviera más poder el pleno y así poder dar "más relevancia" a sus nueve ediles. El acuerdo señala que las decisiones más importantes se debatirán en el pleno, "sin que haya votación posterior", los acuerdos adoptados en la Junta de Gobierno, que por el momento contará con concejales de Ahora Madrid. Carmona celebró que se acabe la "centralización" impulsada por los Gobiernos de Alberto Ruiz-Gallardón y Ana Botella", y Carmena reconoció que la propuesta socialista era "interesante" y por eso la aceptó.

¿A qué cuestiones se refiere? A las decisiones que, corresponden, por ley, a la Junta de Gobierno, y que ahora pasarán por el pleno: el reconocimiento extrajudicial de créditos, los gastos plurianuales que excedan de cuatro ejercicios, la modificación de los estatutos de los organismos públicos, la alteración de la calificación jurídica de los bienes de dominio público, la compra, venta o cesión gratuita de patrimonio público o las modificaciones presupuestarias relevantes.

No se mostrará la papeleta

La sesión de constitución del nuevo Ayuntamiento comenzará este sábado en el Palacio de Cibeles de la capital. Los 20 concejales de Ahora Madrid y los 9 del PSOE –algunos de los cuales estaban en la sala, siguiendo la rueda de prensa– no mostrarán su papeleta porque hay "absoluta confianza" entre los dos socios y para evitar que la votación pueda ser "impugnada". El riesgo de tamayazo "no existe" y, como ironizó Carmona, el tránsfuga Eduardo Tamayo "no va" en sus listas, como sí iba en las de 2003.

Una vez que tome posesión la nueva Corporación, una de las primeras medidas será intentar la paralización de desahucios y preparar raciones de comidas y cenas para todos los niños de 0 y 13 años que lo necesiten, además de completar la estructura. Además, según el documento acordado, se bloqueará la privatización de servicios públicos, se garantizarán los suministros básicos a todos los hogares que no puedan pagarlos, desarrollar un plan urgente para la inserción laboral de jóvenes y parados de larga duración, dejar Madrid limpia en los primeros seis meses o iniciar los estudios para incrementar las escuelas infantiles. Además, los socialistas apoyarán una auditoría de la deuda municipal "con total transparencia". 

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Se preguntó a Carmena por los grandes planeamientos urbanísticos que están a la espera, como la operación Chamartín, la operación Campamento o el traslado del Atlético de Madrid al estadio de La Peineta. La próxima alcaldesa señaló que todo eso se irá viendo, aspecto en el que coincidió con Carmona, que subrayó que se analizarán esos proyectos "no en términos de beneficio privado" y con "transparencia". 

Para Carmena, un modelo de ciudad que le gusta es el de Copenhague, por la apuesta por la eficiencia, el medio ambiente y las nuevas tecnologías. Y respecto a Barcelona, que ahora será gobernada por una candidatura hermana, la de Barcelona en Comú, liderada por Ada Colau, subrayó la necesidad de "romper la fisura de enfrentamiento" y buscar la "fraternidad". "No hay que trabajar de espaldas, sino buscar sinergias". Carmona recordó que la "gran transformación" urbana que experimentó la capital catalana se debió a alcaldes socialistas, pero advirtió, en una réplica tácita a Colau, de que su partido está de acuerdo "con la Constitución, con el cumplimiento de las leyes y las normas", y no con el derecho a decidir.