UGT indaga sobre las 11 prórrogas del contrato adjudicado a una filial del grupo de Florentino Pérez

El sindicato UGT pedirá este martes formalmente a la dirección de Metro de Madrid SA explicaciones sobre las 11 prórrogas que convirtieron lo que en su origen era un contrato de dos años por 1,5 millones de euros en otro de siete años de duración y cinco millones de coste. Como ha publicado infoLibre, ese contrato fue adjudicado en mayo de 2008 a una Unión Temporal de Empresas (UTE) encabezada por Geocisa. Es decir, por una filial de ACS, el gigante de la construcción y la obra pública que preside Florentino Pérez.

Ha sido Teo Piñuela, líder de UGT en Metro de Madrid SA y secretario del comité de empresa, quien ha confirmado a infoLibre que su sindicato presentará hoy un escrito para obtener, primero, confirmación oficial de la noticia avanzada por infoLibre y, luego, explicaciones detalladas sobre lo sucedido.

Con el objeto de garantizar la permanente auscultación y supervisión de las instalaciones del Metro madrileño, el contrato fue adjudicado a esa UTE por uno de los entes públicos de la Comunidad de Madrid cuya extinción decidió el Gobierno de Esperanza Aguirre en 2011: Madrid Infraestructuras del Transporte (Mintra).

En 2012, una vez desaparecida Mintra, la Consejería de Transportes resolvió que Metro de Madrid SA se subrogase en el contrato, es decir, que sustituyese al extinto ente en sus obligaciones y derechos frente a la UTE formada por Geocisa, Europea de Ingeniería y Servicios SA e Ingerop T3 SA.

Para entonces, 21 de mayo de 2012, el contrato ya había sido prorrogado por dos años. Y fue ahí donde arrancó una serie de prórrogas semestrales y trimestrales contra cuyo encadenamiento alertaron los servicios jurídicos del Metro.

Madrid prorrogó 11 veces un solo contrato para trabajos en el Metro que pasó de 1,5 millones a cinco

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Aunque los abogados del suburbano madrileño dieron vía libre a las prórrogas dada la necesidad de que el servicio de auscultación y supervisión fuese prestado sin interrupciones, aconsejaron una y otra vez convocar una nueva licitación para un nuevo contrato: el sistema de prórrogas solapadas –escribieron una y otra vez los letrados- iba en detrimento de los principios de publicidad, igualdad y libre concurrencia que deben regir la contratación pública.

La Comunidad de Madrid no lo hizo hasta diciembre de 2014. Y, de hecho, las prórrogas con Geocisa y las dos empresas que la acompañaban en la UTE se mantuvieron vigentes hasta el pasado 21 de mayo, tres días antes de las elecciones municipales y autonómicas. Los nuevos adjudicatarios vuelven a ser una UTE, esta integrada por Euroconsult SA, Zyp Ingeniería SA y Proes Consultores SA.

Según la Consejería de Transportes de Madrid, la tardanza en la convocatoria de un nuevo concurso –nada menos que cinco años- obedece a que la Dirección General de Infraestructuras carecía de experiencia previa en licitaciones de este tipo, antes resueltas por Mintra.