El exeurodiputado y exmilitante de ICV Raül Romeva liderará la lista unitaria por la independencia

La candidatura de CDC y ERC a las elecciones del 27 de septiembre estará encabezada por Raül Romeva, exmilitante de ICV y exeurodiputado, seguido por Carme Forcadell, expresidenta de la ANC, y Muriel Casals, presidente de Òmium Cultural.

La candidatura estará formada por miembros de la sociedad civil y de los partidos políticos, estos últimos sobre los que CDC y ERC se repartirán al 60% los convergentes y el 40% los republicanos, según confirmaron a Europa Press fuentes próximas a la negociación.

Los partidos han pactado que esta proporción se mantenga también en la composición del Gobierno que formen después si su candidatura de unidad es la que gana las elecciones previstas para el mes de septiembre.

ERC no quería una lista con políticos y Mas rechazaba esta oposición, por lo que el acuerdo se ha fraguado cediendo unos y otros: los republicanos han aceptado políticos en la lista, pero a cambio Mas no la liderará y tendrá que aplicar un plan concreto de independencia pactado entre los dos partidos.

Otra de las claves del acuerdo es que, pese a no liderar la lista, el presidente Mas repetiría como jefe del Ejecutivo catalán, aunque en este caso deberá incluir en su gabinete a miembros de Esquerra Republicana sellando un gobierno de, al menos, dos partidos.

Mas de número cuatro, Oriol de cinco

CDC y ERC han negociado que el presidente de la Generalitat, Artur Mas, vaya de cuatro en la lista de unidad con las entidades soberanistas, mientras que el líder de ERC, Oriol Junqueras, será el número cinco.

Los tres primeros puestos de la candidatura estarán reservados para miembros destacados de la sociedad civil catalana que apoyen el proceso soberanista y sus nombres aun están por definir aunque CDC y ERC ya han hablado del tema, avanzó El Periódico.

Las posiciones de Mas y Junqueras en la lista fueron negociadas por CDC y ERC de forma bilateral, y ahora el resto de partes negociadoras tiene que decidir si lo avalan.

Los número seis y siete de la lista también serían independientes, y a partir del octavo serían miembros de CDC y ERC, el 60% para los convergentes y el 40% para los republicanos.

Los partidos MES y Demòcrates de Catalunya también han participado en las negociaciones y aspiran a formar parte de la lista, por lo que ERC se encargarían de incluir a MES en su 40%, y CDC a Demòcrates en su 60.

Avanzar a la independencia en seis meses

El acuerdo entre CDC y ERC incluye un paquete de medidas para declarar la independencia de Catalunya en un período que iría de los seis a los ochos meses.

"Por primera vez se recoge todo el camino jurídico hacia la independencia", explican la fuentes recogidas por Europa Press, que dicen que el pacto recoge los decretos y los pasos jurídicos para avanzar hacia la secesión pese que el Estado se oponga frontalmente, como esperan ambos partidos.

Se habla de estos entre seis y ocho meses porque es cuando los dos partidos calculan que habrán dado los pasos hacia la independencia suficientes para que la situación con el Tribunal Constitucional y la Agencia Tributaria sea insostenible.

Si ganan las elecciones y tienen mayoría suficiente para legislar, CDC y ERC apuestan por una "ley de transitoriedad jurídica" que supliría el marco legal español: las leyes del Estado seguirían vigentes a medida que se irían cambiando por leyes catalanas.

Con esta ley de transitoriedad se trata, según los negociadores, de dar "fundamento de derecho" a las decisiones que vaya tomando el gobierno catalán y el Parlament pese que a tengan la oposición frontal del Estado y no tengan cabida en la legalidad española.

Principio de acuerdo entre CDC y ERC para una lista con la sociedad civil, Mas y Junqueras

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Ratificaciones internas

Ahora todas las partes implicadas deberán llevar el pacto a sus respectivos órganos internos de dirección y, una vez ratificado, buscarán escenificar el acuerdo dando por empezada la precampaña de las elecciones catalanas del 27-S.

Por ahora Mas no ha convocado las elecciones y tiene como límite para hacerlo a principios de agosto. Una vez convocadas, la campaña empezará el 11 de septiembre, fecha en la que se celebra la Diada y en la que las entidades soberanistas buscan otra movilización masiva por las calles de Barcelona.