El economista Juan Torres se desmarca de Podemos

El economista Juan Torres, uno de los referentes económicos de Podemos, marca distancias con el partido. La formación presentará este miércoles un grupo de expertos económicos reclutados para que les asesoren en la elaboración del programa para las elecciones generales, y en ese colectivo destaca la ausencia de Torres, uno de los autores del documento Un proyecto económico para la gente –que definió las líneas maestras de la política económica de Podemos–, que ha declinado participar en el equipo por discrepancias personales y políticas con la cúpula del partido. Vicenç Navarro, el otro autor del documento, sí formará parte de este consejo.

El Círculo de Bellas Artes de Madrid ha sido el lugar elegido por Podemos para la puesta de largo de su Consejo Internacional de Economía, un grupo en el que habrá economistas renombrados a nivel internacional, como el estadounidense James Galbraith, catedrático de la Universidad de Texas y exasesor del antiguo ministro griego de Finanzas, Yanis Varufakis. El equipo también contará con expertos nacionales, como Nuria Alonso, profesora de Economía Política Aplicada de la Universidad Rey Juan Carlos (URJC).

El trabajo de estos expertos, ha explicado Podemos en un comunicado, "viene a sumarse al que el Área de Economía de Podemos viene haciendo en coordinación con los círculos (en este caso el círculo sectorial de Economía, Energía y Ecología) y con asociaciones y colectivos de la sociedad civil organizada". No se hace referencia en este texto, sin embargo, al primer documento económico que presentó la formación en noviembre del año pasado, un escrito firmado por Navarro y Torres que planteaba, entre otras medidas, garantizar el "derecho al crédito" a través de un sistema de banca pública o realizar una reforma fiscal para reducir la desigualdad.

Y es que Torres, catedrático de Economía Aplicada de la Universidad de Sevilla, explica que ha rechazado entrar en este grupo de expertos porque, desde que prestó su asesoramiento para ese trabajo, sus relaciones con Podemos se han enfriado sensiblemente. "Me pidieron a mitad de verano participar en un equipo que se estaba montando, aunque indirectamente, a través de Vicenç Navarro y posteriormente de otras personas", explica el economista, que señala que rechazó la propuesta porque, a su juicio, el partido no le ha tratado "con el cariño mínimo que se requiere" en una colaboración.

Un documento que "no se entendió bien"

Las quejas de Torres se refieren a la oleada de "insultos" y "descalificaciones" que, a su juicio, se vertió sobre él cuando elaboró el documento económico base para Podemos, unas ofensas que, según sostiene, el partido pasó por alto. "Para mí fue muy significativo que no recibiera ni una muestra de apoyo o de cariño de los dirigentes de Podemos, porque la política es una dimensión de nuestra humanidad, y no entiendo el compromiso social si no tiene una connotación humana y fraternal", explica el experto, que además asegura que "ni antes ni después" de hacer público el estudio pudo mantener "una reunión con los dirigentes" para discutir sobre las medidas.

"Sólo mantuve contacto con ellos a través de WhatsApp, y no tuve la posibilidad de sentarme a discutir de qué manera se aplicaba y se ponía en marcha [el documento] en el desarrollo del programa", abunda Torres. Y es que, a su juicio, "no se entendió bien" lo que planteaba el documento, un problema que ha llevado, en opinión del experto, a que Podemos esté haciendo "planteamientos equívocos, que están resultado incluso lesivos para sus expectativas electorales".

"Pablo Iglesias, en sus declaraciones, pone constantemente el énfasis en las políticas redistributivas, y yo creo que, sin renunciar a ellas, el núcleo central de una política económica alternativa para España no está en la redistribución, sino en la distribución originaria de la renta", abunda Torres, que aboga por que Podemos "lidere una propuesta de acuerdo social" que esté enfocada a "aumentar la masa salarial" beneficiando especialmente a las personas de ingresos más bajos.

"Lo que ocurre en España es que la relación entre salarios y rentas del capital se está deteriorando a favor del capital, y creo que esa es una de las causas fundamentales de la crisis", explica el experto. Y de ahí que el error de Podemos, a su juicio, esté siendo "centrarse demasiado en la política redistributiva y de gasto, donde quizás hay menos capacidad de maniobra". "No vale sólo con proponer aumentar el gasto y, para sostener eso, aumentar los ingresos, sino que lo fundamental es aumentar la masa salarial, y eso no equivale simplemente a proponer un aumento salarial indiscriminado", zanja Torres.

Ayudas para familias sin ingresos y subida del SMI

“Cuanto más libre se deja al capitalismo más daño hace a los seres humanos”

Ver más

En cualquier caso, Podemos ya ha puesto su maquinaria en marcha para cerrar las propuestas económicas que serán incluidas en su programa electoral. Este martes, el secretario general del partido, Pablo Iglesias, anunció que su formación va a proponer un "Plan de Rentas" que contemple una "renta garantizada" de 600 euros para quienes no tienen ingresos y una "renta complementaria" para los trabajadores que tengan sueldos inferiores a los 900 euros. El partido calcula que la implantación de esta medida tendría un coste de 15.158 millones de euros.

Esta renta aumentaría en función del número de personas que compusieran la unidad familiar, y en el caso de que el receptor encontrase un empleo no la perdería de golpe, sino que se le iría retirando gradualmente a medida que aumenten sus ingresos salariales. La renta complementaria para familias con rentas inferiores a los 900 euros mensuales tampoco tendría una cuantía fija, sino que aumentaría en función del número de miembros de la unidad familiar.

De igual forma, Podemos sigue promoviendo una auditoría de la deuda pública y también de la privada, para proceder después a una reestructuración. Iglesias, asimismo, ha prometido una subida progresiva del Salario Mínimo Interprofesional (SMI) hasta situarlo en 800 euros en el año 2018, y plantea una modificación profunda del modelo productivo para enfocarlo hacia la economía verde, la rehabilitación de edificios o la industria tecnológica. Estas medidas se financiarían a través de una reforma fiscal que afectaría fundamentalmente a las rentas altas.