Iglesias rechaza los “frentes antisecesión” y defiende un referéndum

"Estamos en un momento en el que hace falta tender puentes" y no comportarse como un "búnker". Así se expresó este viernes el secretario general de Podemos, Pablo Iglesias, tras su reunión con el presidente del Gobierno, Mariano Rajoy, en el Palacio de la Moncloa, un encuentro en el que defendió la necesidad de convocar un referéndum sobre la independencia de Cataluña y donde aseguró que no le "convencen" los "frentes antisecesión" como el que, a su juicio, conforman PP, PSOE y Ciudadanos.

Iglesias compareció en la sede presidencial tras mantener una reunión de más de una hora con Rajoy, en la que le regaló el libro Juan de Mairena, de Antonio Machado. El líder de Podemos sostuvo que el encuentro había tenido un tono "cordial", pero destacó que ambos no estuvieron de acuerdo "en casi nada". Y es que Iglesias no dudó en calificar de "teatro" algunas de las acciones que se están viviendo en las últimas semanas "en la política española y catalana". "Algunos proponen teatro para la campaña electoral", aseguró en este sentido el líder de Podemos, que también criticó las "componendas" que, a su juicio, el PP está tratando de arreglar con PSOE y Ciudadanos.

Para Iglesias, ahora mismo, existen dos bloques de partidos en España: PP, PSOE, y Ciudadanos, que se han metido en un "búnker" y se niegan a dialogar, y Podemos, que según el secretario general está "dispuesto a dialogar con todo el mundo". "Quien rompe España", a juicio de Iglesias, es "quien destroza los servicios públicos", quien "ha convertido la desigualdad en el principal problema de nuestro país" y quien "alienta o permite la corrupción".

El PP, "una fábrica de independentistas"

En este sentido, Iglesias criticó el "inmovilismo" de Rajoy y de sus "aliados" PSOE y Ciudadanos, "la nueva gran coalición", según el líder de Podemos. "Pensamos que en nuestro país quien ha roto la convivencia son aquellos privilegiados que han convertido la Constitución en papel mojado", denunció, ahondando en la táctica del partido de centrar su discurso en los derechos sociales en lugar de en el debate independentista. El criterio que realmente "divide a los españoles", sostuvo Iglesias, es el que diferencia a "aquellos que se han beneficiado de crisis frente a aquellos que han salido perjudicados".

"El PP es el responsable de la posibilidad de que España se rompa", afirmó gravemente Iglesias, que acusó al partido liderado por Rajoy de ser "una fábrica de independentistas". "Para nosotros, España es plurinacional, un país de países", señaló el líder de Podemos, que explicó que, a su juicio "los mimbres del futuro" se tienen que construir con "la seducción" y "la solidaridad". Eso implica que "los catalanes tienen derecho a expresarse votando", y a juicio de Iglesias la Constitución tiene "mecanismos" para permitir una consulta legal, que tendría que ser "simultánea" a una reforma de la misma.

De hecho, la Constitución y su reforma fue uno de los puntos fundamentales dentro de la intervención de Iglesias, que volvió a proponer sus "cinco garantías" a incluir en la Carta Magna. El líder de Podemos propuso blindar sanidad, educación y vivienda, así como la prohibición de las llamadas "puertas giratorias", la "independencia de los jueces", la reforma de la ley electoral y, especialmente, garantizar el derecho a decidir. "España es más fuerte en su unidad cuando reconoce que es diversa", afirmó Iglesias.

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En esta línea, Iglesias calificó de "porcelana" a la actual Constitución ya que, según él, los partidos tradicionales la han tenido de "adorno" y han incumplido los artículos dedicados a los derechos sociales porque es "frágil". Y por ello, abogó por establecer una Carta Magna "de mimbre", más "flexible" y por ello más resistente.

El líder de Podemos rechazó el proyecto de resolución que han presentado Junts pel Sí y la CUP en el Parlamento de Cataluña para comenzar a dar pasos hacia la independencia, y volvió a su metáfora sobre la Constitución para afirmar que no la puede romper un Parlamento, el catalán, sin competencias para hacerlo. "No pude romper ni un jarrón chino ni un jarrón de mimbre quien no tiene ningúna competencia para hacerlo: la presidenta del Parlament puede hacerse un selfie o proclamar cinco repúblicas, pero no rompe nada", afirmo taxativamente Iglesias.

Pero, sin embargo, Iglesias tampoco aprobó que el Gobierno haya anunciado que recurrirá al Tribunal Constitucional esta resolución si finalmente se aprueba. "Pensamos que los problemas políticos no se solucionan con tribunales", sostuvo Iglesias, que pese a que se mostró favorable a la existencia de esta corte, denunció la instrumentalización que, a su juicio, hacen de él los partidos políticos. "Nosotros somos los primeros que decimos que hay que aplicar la ley, pero eso es una cosa y otra cosa es resolver problemas políticos" a través de la Justicia, zanjó.