Tres juezas que acumulan 34 años de experiencia decidirán si la infanta sigue en el banquillo del ‘caso Urdangarin’

El juicio del año, como se ha denominado la vista oral del caso Nóos, tendrá una sentencia elaborada por tres magistradas de alrededor de 40 años "sobradamente preparadas" y "muy profesionales" que han formado parte de tribunales que han juzgado importantes casos de corrupción.

Tanto Samantha Romero Adán como Rocío Martín ingresaron en 2002 en la carrera judicial, mientras que la tercera integrante del tribunal, Eleonor Moyá Roselló, ejerció la abogacía hasta 2011, año en el que se incorporó a un juzgado de Barcelona. Entre las tres acumulan 34 años de experiencia judicial.

De esta forma, cada una de las tres aporta una visión que enriquece el tribunal, apuntan fuentes que conocen a las tres: "Rocío Martín valora la prueba hasta el límite, Samantha Romero es también una mujer muy minuciosa, y mantiene una presencia de ánimo y mucha tranquilidad, y Leonor Moyá tiene la perspectiva que le da el haber sido abogada hasta el año 2011", aseguran fuentes judiciales a infoLibre, que sostienen que las tres se complementan muy bien, "y eso nos garantiza una sentencia muy trabajada".

Dos alumnas de Yllanes

Tanto Romero como Martín fueron alumnas del magistrado en excedencia Juan Pedro Yllanes, ahora diputado de Podemos por Baleares, y que iba a ser el presidente del tribunal del caso Nóos. Ninguna de las tres está adscrita a alguna asociación de jueces.

La relativa juventud de las magistradas que deberán decidir en los próximos días si la infanta permanece en el banquillo de los acusados del caso que también da nombre su marido, Iñaki Urdangarin, se explica por el hecho de que es una audiencia "atípica", pues en los últimos años, con la acumulación de los casos de corrupción, ha acumulado mucho trabajo, "como se está demostrando ahora con el juicio del caso Nóos".

Mucho trabajo en Baleares

Este es el principal motivo, aseguran las mismas fuentes a este diario, por el que los magistrados de la Audiencia de Baleares llegan a esos cargos de especial relevancia con edades inferiores a lo habitual de otras audiencias, ya que los jueces más antiguos permanecen adscritos a los juzgados de instrucciónjuzgados de instrucción, que son destinos normalmente más cómodos.

Sobre la posible presión que puedan sufrir las tres juezas por el hecho de que tengan de decidir si utilizan la doctrina Botín o la Atutxa con la infanta Cristina de Borbón, fuentes consultadas por este diario sostienen que están "absolutamente capacitadas, ya que tienen experiencia para dar y para regalar, pero sobre todo para poner lo que quieran en una sentencia con fundamento y en derecho, por lo que obligarán al Tribunal Supremo a curarse mucho en salud en una posible sentencia de casación. Será una sentencia enormemente razonada y motivada y sobre todo fundada en derecho".

Samantha Romero Adán

Es la presidenta del tribunal y será la ponente de la sentencia. Ingresó en la carrera judicial en 2002, por oposición. Su primer destino fue el Juzgado de Primera Instancia e Instrucción número 3 de Vilanova i la Geltrú (Barcelona). En 2007 accedió como magistrada a la Audiencia Provincial de Tarragona, y desde abril de 2015 pertenece a la Sección Primera de la Audiencia Provincial de Baleares.

infoLibre ha recabado entre personas con las que ha trabajado el perfil profesional de esta magistrada, a la que definen como "muy minuciosa en su trabajo". Y un ejemplo de esta dedicación se constata en el auto de admisión de prueba, "que fue muy detallado. Realizó un trabajo muy completo en la valoración de la prueba".

Además, aseguran que está "perfectamente capacitada", tal y como se pudo comprobar el primer día del juicio del caso Nóos. Como presidenta del tribunal, es la encargada de dirigir el juicio. Y no le tembló el pulso cuando el abogado Manuel González Peeters, que ejerce la defensa letrada del socio de Urdangarin, Diego Torres, trató de abrumar al tribunal con la presentación de pruebas.

Al ver que González Peeters se extendía en sus peticiones, la magistrada tomó la palabra para recordar al letrado que, en peticiones realizadas hasta ese momento por escrito, no había solicitado al tribunal que valorara la pertinencia de las pruebas. "No habrá ningún problema para que controle el juicio, porque tiene experiencia de sobra para hacerlo", resaltan las fuentes conocedoras del trabajo de la magistrada.

Asimismo, la jueza Romero, que mantiene un perfil de exposición pública "muy bajo", ya que no le gusta la publicidad y las fotos, atesora la experiencia de su presencia de nueve años en la Audiencia Provincial de Tarragona, que al igual que la de Baleares "es muy exigente".

Rocío Martín Hernández

Ingresó en la carrera judicial por oposición en 2002. Su primer destino fue el Juzgado de Primera Instancia e Instrucción número 3 de Carlet (Valencia). Es magistrada de la Sección Primera de la Audiencia Provincial de Baleares desde septiembre de 2010.

La jueza Martín, que es la segunda más antigua en la Audiencia Provincial de Baleares, fue la ponente de uno de los principales casos de corrupción de las islas: el caso Scala, que destapó una trama delictiva en el Govern balear entre los años 2003-2007, y por el que fue condenado a 16 años de cárcel el exconseller de Jaume Matas (PP) Josep Juan Cardona.

Martín fue designada sustituta del juez de Yllanes tras su fichaje por Podemos: "Es una mujer de sobrada experiencia", especifican fuentes conocedoras de su trabajo. Y como prueba de esta solvencia, recuerdan el caso Scalacaso Scala, cuyo fallo fue confirmado de forma íntegra por el Tribunal Supremo.

"Es una sentencia que tiene más de 500 folios, lo que es también una demostración de que Martín apura la valoración de la prueba hasta la extenuación, es una jueza también muy técnica", explican las fuentes, que recuerdan que la condena al conseller de Matas, de 16 años de cárcel, es una de las más elevadas entre la clase política.

Al igual que la presidenta del tribunal, Rocío Martín fue alumna en la escuela de la judicatura de Barcelona del ahora diputado de Podemos Juan Pedro Yllanes, que en conversación con este periódico asegura sentirse orgulloso de que dos alumnas suyas estén realizando "un buen trabajo en la Audiencia Provincial de Baleares".

Los altos tribunales europeos también suspenden en paridad

Ver más

Eleonor Moyá Roselló 

Ingresó en la carrera judicial en 2011 por el turno reservado a juristas con al menos diez años de experiencia. Su primer destino fue el Juzgado de Primera Instancia e Instrucción número 5 de El Prat de Llobregat (Barcelona). Es magistrada de la Audiencia Provincial de Baleares desde diciembre de 2013.

"Es una mujer muy seria y muy concienzuda jurídicamente", explican a infoLibre fuentes de la Audiencia Provincial de Baleares, que sostienen que el hecho de que venga de la abogacía le permite tener una visión "quizás más completa" que el resto de magistradas del tribunal. También, apuntan las mismas fuentes, es capaz de valorar "desde su no muy lejana profesión de abogada las pruebas que se han practicado".