La XII Legislatura

Sánchez rechaza la gran coalición y le dice a Rajoy que pacte con “las derechas”

Ibon Uría

El secretario general del PSOE, Pedro Sánchez, rechazó este martes entrar en el Gobierno de gran coalición que, según afirmó, le ofreció Mariano Rajoy: "No vamos a apoyar aquello que queremos cambiar", argumentó. El líder socialista reiteró que votará "no" a la investidura de Rajoy –como quieren, sostuvo, una "mayoría abrumadora" del Comité Federal y de los militantes y votantes del PSOE–, instó a "las derechas" a pactar y recordó, como parte de ese argumento, la votación de la Mesa del Congreso de los Diputados, en la que hasta 179 diputados respaldaron a los candidatos propuestos por PP y Ciudadanos.

Sánchez compareció ante los medios tras reunirse con Rajoy en el Congreso de los Diputados. Fue el segundo encuentro entre ambos desde las elecciones generales del 26 de junio –los dos líderes ya se vieron el pasado 13 de julio en el marco de la primera ronda de contactos que el dirigente conservador mantuvo con los distintos grupos políticos de cara a explorar sus posibilidades para la investidura– y el primero desde que, el pasado jueves, el también presidente del Gobierno en funciones fuera designado por el jefe del Estado para someterse al debate de investidura.

El número uno socialista afirmó, tras conversar por espacio de unos 55 minutos con el líder del PP, que Rajoy no fue capaz de confirmarle si se presentará a la sesión de investidura. Además, Sánchez le afeó en público que en 35 días después de las elecciones "no haya sumado un escaño más" a los 137 parlamentarios que obtuvo en las urnas el 26J, y subrayó la "urgencia de constituir un Gobierno cuanto antes". En esa línea, exigió a Rajoy "que se ponga a trabajar ya" y que "empiece a negociar con sus aliados potenciales": que mire a la "mayoría conservadora" del Congreso y no al PSOE.

Sánchez arguyó que "la alternativa a que Rajoy haga su trabajo no puede ser" que "el resto" le hagan "su trabajo". "Si nadie quiere pactar con Rajoy, la responsabilidad será de Rajoy. Si Rajoy no encuentra apoyos en la derecha, ¿por qué va a apoyarle la izquierda? Como líder de un partido de izquierdas, le digo a Rajoy y a las fuerzas conservadoras que se pongan de acuerdo, y que la izquierda no va a apoyar a la derecha. Que se pongan de acuerdo como se han puesto de acuerdo para la Mesa del Congreso (...). Lo que decimos a Rajoy es que camine en esa vía del 179 que hizo posible la Mesa el 19 de julio. Lo que tiene que hacer en agosto es hablar con fuerzas de centro-derecha", reiteró Sánchez.

Rechaza la negociación

Fuentes socialistas avanzaron ya este lunes que Sánchez acudía al encuentro de trabajo con Rajoy con una doble decisión tomada: la de mantener el voto contra la investidura del candidato conservador tanto en primera como en segunda vuelta –en línea con lo que acordó el Comité Federal socialista el pasado 9 de julio– y la de no entablar una negociación con el PP en ningún caso. En el PSOE mantienen que el PP debe buscar otros aliados para reunir los apoyos que necesita para sacar adelante la reelección de su líder, comenzando por convencer a Ciudadanos de que pase de la abstención al "sí".

En Ferraz señalaron que Sánchez acudía a la reunión de este martes con el objetivo principal de obtener "respuestas" a los "interrogantes" surgidos tras eludir Rajoy el compromiso expreso de presentarse al debate de investidura –incluso tras haber aceptado la designación de Felipe VI–. La dirección socialista expresó que su jefe de filas plantearía hasta ocho preguntas "directamente" a Rajoy, entre ellas cuestiones relacionadas con si piensa acudir al Congreso a solicitar la confianza de la Cámara, con los plazos que maneja y con el control que permitirá al Gobierno en funciones por parte de la oposición parlamentaria.

Sánchez sostuvo ante los medios tras su reunión con Rajoy que éste no le aclaró "ninguno" de esos extremos. De hecho, se confesó "mucho más preocupado" después de charlar con el líder del PP y de que éste no le resolviera la duda de si se va a presentar al debate de investidura. El socialista argumentó que el candidato conservador tiene la "obligación constitucional" de solicitar la confianza del Congreso y le instó a resolver, "de manera urgente", las "dudas" en torno a en "qué día, qué fecha y a qué hora se va a presentar a la investidura", lo que pondría en marcha la cuenta atrás de dos meses para lograr Gobierno o repetir elecciones.

No aclara su hoja de ruta

Lo que Sánchez siguió sin expresar con claridad es qué hará si Rajoy acude finalmente al Congreso de los Diputados –en el PP, de hecho, asumen que tendrá que ser así, aunque buscan vías "novedosas" para no plantearlo como una investidura al uso, informa Yolanda González– pero fracasa en la votación y no consigue sacar adelante la investidura. ¿Dará un paso al frente, como propugnan algunos de los dirigentes más próximos al secretario general socialista? ¿Se abstendrá a última hora, como defienden el expresidente del Gobierno Felipe González y han sugerido otros barones? Por ahora no hay respuesta.

Sánchez sostuvo este martes que su partido es "la segunda fuerza", pero reivindicó que "también" es "la primera fuerza de los españoles que se movilizaron el 26J para cambiar las políticas" del PP. Si finalmente hay Gobierno conservador, añadió, el PSOE ofrecerá "grandes acuerdos" en materias como pensiones, educación y la reforma constitucional, y hará una oposición "dura" en los asuntos donde conservadores y socialistas confrontan ideológicamente pero también "leal" en asuntos de Estado. "Útil y responsable", resumió.

¿Y si Rajoy no lo logra?, se le preguntó entonces. El secretario general socialista no respondió con claridad: dijo que el rey ha encomendado a Rajoy intentar la investidura, y que el PSOE ha fijado posición respecto a "ese escenario". Cuestionado sobre si ha hablado con el líder de Unidos Podemos y secretario general del partido morado, Pablo Iglesias, replicó que han conversado para cuestiones como la formación de la Mesa del Congreso. "En última instancia", admitió, cualquier eventual decisión tendría que pasar por el Comité Federal, pues el PSOE es "transparente" y toma sus decisiones "de forma colegiada".

El número uno del PSOE ya dejó dudas el pasado jueves, en la rueda de prensa que ofreció tras su reunión con el rey. Entonces se limitó a decir que el PP "tiene opciones" de gobernar sin la abstención socialista y, preguntado por su hoja de ruta, replicó que "es el tiempo de Rajoy" y que "los tiempos en democracia son fundamentales". En esa misma línea, tras su primera reunión con el líder del PP a mediados de julio, proclamó que haría "todo lo posible para que haya Gobierno" y que el PSOE estaría "en la solución". "La democracia tiene sus tiempos y hay que respetarlos", insistió ante los medios en aquella comparecencia.

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