El empresario Francisco Javier López Madrid, yerno del propietario de la constructora OHL Juan Miguel Villar Mir, ha finalizado su declaración, que se ha desarrollado en la última sesión de los acusados del juicio por las tarjetas
black recordando que
su grupo familiar ha invertido 20 millones de euros en Bankia: "Y los mantuvimos porque nos dijeron que los mantuviéramos y lo hemos perdido todo".
López Madrid, que ha asegurado que el secretario general de Bankia le explicó que la utilización de la tarjeta era un sistema instaurado desde hace años, explicó que
el límite era de 24.000 euros: "Soy la misma persona que decidió invertir y perdió los 20 millones, que se supone que me quise aprovechar de un sistema para obtener 30.000 euros", se ha lamentado este empresario.
El yerno de Villar Mir ha explicado que durante un tiempo guardó los justificantes de los gastos de su tarjeta y que incluso los llegó a remitir al banco. No obstante, López Madrid ha relatado que no contrastó si este dinero estaba reflejado en sus certificados de haberes: "Me llegaban las certificaciones de Caja Madrid y las enviaba a mi asesor fiscal.
No conté si estaban incluidas, ni las dietas del consejo".
Vamos que Villar Mir "pierde" 20 millones así, en plan filántropo, por el bien de Bankia. Y nosotros, desde aquí, vamos y creemos a pies juntillas al golfo López Madrid, el compañero de cine de nuestro rey, el implicado en un caso de acoso a una mujer que está en los tribunales, el mismo sujeto que se fundió 30.000 de nuestros euros "porque él lo vale", y a quién, pronto o tarde, veremos desfilar por los tribunales en la causa Gürtel y otras que dirimen la financiación ilegal del PP. ¡Angelito! Del cielo. ¡Felipe! ¡Cuida con quién te juntas!
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