El PP sortea el veto de los grupos e impone a Fernández Díaz en una comisión donde no se vota al presidente

La dirección del Grupo Parlamentario Popular decidió a última hora de este miércoles ubicar al exministro del Interior reprobado en la presidencia de la Comisión de Peticiones. Lo hicieron mediante el registro de un escrito en la Cámara baja en el que se informa de que Jorge Fernández Díaz sustituye en esas funciones a Pilar Rojo.

Fuentes parlamentarias consultadas por infoLibre precisan que para esta comisión no habrá ningún tipo de vetos dado que las presidencia la ostenta el partido más votado sin necesidad de someterlo al criterio de los grupos parlamentarios. Es lo mismo que ocurre con la de estatuto de diputado, que la lidera el parlamentario del Partido Popular Leopoldo Barreda. Esto no ha sido óbice para que PSOE y Podemos criticaran la decisión.  

Horas antes, la Comisión de Exteriores del Congreso de los Diputados había decido aplazar la votación del exministro del Interior como presidente, después de que el PP constatase que se había quedado sin apoyos para sacar adelante el nombramiento. Después intentaría colarlo de presidente en la comisión Mixta de Relaciones con el Tribunal de Cuentas, también sin éxito.

El portavoz parlamentario del partido de Rajoy, Rafael Hernando, admitió al final de la mañana que habían abierto "un periodo de reflexión" sobre la candidatura, pero que el exministro seguía siendo "la primera opción". Todo, pese a estar reprobado por la Cámara y pese a que está pendiente una comisión de investigación sobre su gestión en el ministerio.

La base de su reprobación fue una información, adelantada por Público, con audios como prueba documental, según la cual se reunió con el director de la Oficina Antifraude de Cataluña (OAC), Daniel de Alfonso, para buscar casos de corrupción que afectasen a líderes independentistas.

Ahora, el PP tendrá que buscar candidatos para la Comisión de Exteriores y la Mixta de Relaciones con el Tribunal de Cuentas, el plan B. También tendrá Rajoy que buscar acomodo para su amiga Pilar Rojo.

El Partido Popular ya ha empezado a probar las dificultades de una legislatura en minoría. Si el martes la oposición en pleno tumbó la lomce Mariano Rajoy, este miércoles el Grupo Parlamentario Popular se veía obligado a solicitar el aplazamiento de la Comisión de Exteriores en el Congreso de los Diputados al constatar que la candidatura de Jorge Fernández Díaz, exministro del Interior y reprobado por la Cámara baja, corría peligro. Una maniobra de última hora de los socialistas amagando con presentar un candidato alternativo disparó todas las alarmas en las filas conservadoras. Ahora, con el nuevo destino de Jorge Fernández Díaz, los conservadores respiran algo más aliviados.

Antecedentes

Hace una semana, la dirección del Grupo Parlamentario Popular informó de que dos de los tres ministros que salieron de su gabinete –Jorge Fernández Díaz, ex de Interior, y José Manuel García-Margallo, ex de Exteriores–, ya tenían una competencia extra que les aleja de ser diputados rasos. El primero, reprobado por la Cámara baja, iba a ser propuesto para presidir la Comisión de Exteriores; el segundo, la Mixta de Seguridad Nacional.

Este pretendido encaje implicaba que Jesús Posada, expresidente del Congreso de los Diputados, dejase la presidencia de la Comisión de Exteriores y pasara a la de Constitucional, que quedaba vacante después de que Juan Ignacio Zoido asumiese la cartera de Interior.

La presidencia de una comisión supone un ingreso extra mensual de 1.431,31 euros, según el régimen de retribuciones de sus señorías. Esta cantidad se suma a la asignación constitucional mensual de 2.813,87 euros más las ayudas que les corresponden por la circunscripción por la que fueron elegidos. Dado que Margallo y Fernández Díaz pertenecen a una provincia distinta a Madrid, ambos tienen derecho a la indemnización más alta de la horquilla: 1.823,86 euros mensuales. Todos estos conceptos los reciben en 14 pagas. Y, en el caso de las ayudas, libres de impuestos. En total, la percepción mensual de cada una de ellos supera los 6.000 euros.