La izquierda se muestra dividida ante la iniciativa de impulsar la Ley de Memoria

El PP ha acusado este martes al PSOE de romper un acuerdo para no utilizar la memoria histórica con intereses partidistas y de buscar sólo "un titular" con su iniciativa para instar al Gobierno aplicar y ampliar la Ley de Memoria Histórica que plantea, entre otras cosas, que se cree una Comisión de la Verdad, se estudie la posible anulación de las condenas políticas del franquismo y que se saquen los restos de Francisco Franco del Valle de los Caídos, informó Europa Press. La iniciativa irá a votación el próximo jueves.

Este texto ya fue aprobado por la Comisión Constitucional el pasado 8 de marzo, con el único voto en contra del PP y la abstención de UPN, y volverá a votarse el martes en el Pleno del Congreso. Sin embargo, su aprobación no está garantizada y dependerá de cómo finalice la negociación sobre las enmiendas registradas por los grupos.

Ciudadanos, que votó a favor en comisión, ha avanzado que sólo la volverá a apoyar si no se introducen cambios en el texto original, mientras que Unidos Podemos, que también votó sí en marzo, tiene previsto abstenerse si no se aceptan sus enmiendas, según han avanzado desde este grupo parlamentario.

El PP quiere votar por puntos

Por su parte, el PDeCAT, Bildu y el PNV han adelantado su apoyo crítico al texto y el PP va a solicitar que se vote punto a punto porque sólo respalda algunos. Esto puede condicionar la decisión del PSOE ya que si acepta enmiendas, el texto no podrá votarse troceado.

En su defensa de la iniciativa, el portavoz del PSOE en la Comisión Constitucional, Gregorio Cámara ha destacado que la Ley de Memoria Histórica de 2007 fue un "hito" y sirvió para "cerrar heridas" y ha denunciado la "incomprensión" que, a su juicio, ha tenido la derecha política hacia este asunto tanto desde la oposición como desde el Gobierno.

En concreto, ha acusado al PP de haber suspendido de su aplicación de "manera abrupta" y de haberla dejado "vacía" de presupuesto a partir de 2013 con el "burdo razonamiento" de que no se financiaba por la crisis económica.

Tras esta crítica, ha subrayado que el Ejecutivo tiene el "deber democrático" de cambiar de actitud porque "la memoria histórica es la memoria de todos porque las heridas se curan con más verdad". "Sean empáticos con las exigencias de la dignidad de todas las víctimas y sus familiares", les ha pedido, antes de proclamar: "Memoria para la dignidad, la verdad, la justicia y la concordia".

El Gobierno sí cumple

Por su parte, la diputada del PP catalán Alicia Sánchez Camacho ha acusado al PSOE de haber roto el compromiso que, en su opinión, se adquirió en 2002 de no hacer un "uso partidista" de lo que ocurrió este tema y ha reivindicado el pacto constitucional. "A mi tío le fusiló un pelotón de fusilamiento y jamás lo he dicho porque en la Transición conseguimos que nunca volviera a ocurrir", ha argumentado.

Además, ha ofrecido datos para sustentar su afirmación de que el Gobierno sí está cumpliendo la Ley de Memoria Histórica en materia de símbolos, reconocimiento a las víctimas y digitalización de archivos, ha asegurado que decir lo contrario es una "indignidad" y ha señalado al PSOE por querer "buscar un titular", pero no el consenso que exigen estos temas.

"No sé si quieren volver al pasado o mirar constantemente a Podemos", ha dicho a los socialistas avisándoles de que España "les necesita" y recomendándole que no trabajen para que "triunfen los que defienden tiranías como Venezuela y reniegan de la Transición o incluso del papel del comunismo de Carrillo en la Transición".

Desde el PP reclaman que la proposición no de ley de vote punto por punto porque están de acuerdo con alguna propuesta como la creación de un censo de infraestructuras construidas por condenados a trabajos forzados. También apoyan que se honre a las víctimas anualmente, pero no el 11 de noviembre como plantea el PSOE, sino el 23 de agosto cuando se rinde homenaje, según ha explicado Sánchez Camacho, a las víctimas de los regímenes estalinistas y nazis.

Monumento al cinismo

Otro de lo más críticos con el texto del PSOE ha sido el independentista catalán Joan Tardà, quien lo ha definido como un "monumento al cinismo" y la "hipocresía". "Ahora resulta que les interesa el Valle de los Caídos", ha exclamado, recalcando a los socialistas que en 2007 rechazaron todas las enmiendas de la oposición al respecto.

También les ha echado en cara que planteen ahora una Comisión de la Verdad cuando no "han renegado de la ley de punto final ley de punto final", como se ha referido a la Ley de Amnistía, y que se hayan negado a retirar títulos nobiliarios a los "implicados directamente en el genocidio".

"ERC nunca va a legitimar el modelo de impunidad español", ha advertido, reclamando que se exija al Gobierno que en seis meses apruebe una nueva ley que "repare de verdad a las víctimas" y homologue a España a "otras sociedades que padecieron el fascismo y sí han sido capaces de metabolizar su pasado".

Anular las sentencias políticas

Jordi Xuclà, portavoz adjunto del PDeCAT, ha defendido una enmienda para que se haga una reforma legislativa y sea el Congreso el que declare la nulidad de todas las sentencias políticas del franquismo, un asunto en el que también ha incidido Bildu que, a través de su portavoz, Marian Beitialarrangoitia ha anunciado su "apoyo crítico" a la tramitación.

También Xavier Domènech, de En Comú, ha hecho hincapié en la necesidad de anular esas sentencias porque no hacerlo argumentando que se generaría inseguridad jurídica implica "equiparar un Estado fascista con un Estado de Derecho" y un "insulto a las víctimas". Tras recordar que con el franquismo hubo "1.000 fusilados en tiempo de paz" ha recalcado que sólo se recuperará la memoria y habrá justicia y reparación si se deja claro que la dictadura eliminó "lo mejor de la historia" de España y su futuro.

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En nombre de Compromís, Marta Sorlí, se ha lamentado de tener que tratar de este asunto 40 años después de la muerte de la dictador y ha explicado que es así porque en la Transición se dejó "campar a sus anchas a los verdugos mientras se silenció a las víctimas". "Si Franco levantara la cabeza estaría bien orgulloso de ustedes", ha espetado a los 'populares' antes de avisar a sus señorías de que si apoyan el texto votarán "con la democracia", pero si lo rechazan lo harán "con el franquismo".

El diputado del PNV, Joseba Agirretxea ha reprochado al PP su negativa a "ser justos" escondiéndose, ha dicho, "en un limbo que permite que no se reconozca la verdad y se honre a quienes lucharon por la democracia". "Esto no es la guerra del abuelito", ha sentenciado, reivindicando la memoria de su propio abuelo condenado a muerte que, como todos los represaliados "se merece esto y mucho más".

De su lado, el secretario general de Ciudadanos, José Manuel Villegas, ha remarcado que "una gran nación tiene que tratar con dignidad a sus muertos" y se ha mostrado de acuerdo con la mayor parte del texto del PSOE. Eso sí, sólo ha garantizado su apoyo si se vota en sus propios términos, es decir, sin aceptar enmiendas. Para Villegas, la reparación a las víctimas debería ser el "objetivo común del sistema democrático" y no un asunto de "controversia" y, por eso ha reclamado se busquen "los más amplios consensos".