Accidente de tren en Santiago

Bruselas reclama a Fomento que repita la investigación sobre el accidente de Angrois pero esta vez de forma “independiente”

Una grúa retira uno de los vagones del Alvia accidentado a la entrada de Santiago de Compostela.

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El departamento de la Comisión Europea responsable del transporte dentro de la Unión ha enviado una carta a la comisión de investigación de accidentes ferroviarios (CIAF) en la que le invita a reabrir la investigación que hizo por el siniestro del tren Alvia ocurrido en el barrio compostelano de Angrois hace ahora ya casi cuatro años, el 24 de julio de 2013.

En concreto, la Dirección General de Movilidad y Transporte (DG Move) invita a reabrir la investigación “y llevarla a cabo con total independencia” a la CIAF, órgano colegiado especializado adscrito a la Subsecretaría de Fomento con competencia para la investigación técnica de los accidentes e incidentes ferroviarios.

Hasta fecha el Gobierno de Mariano Rajoy ha rechazado todas las demandas ha rechazadode las víctimas, la oposición y la Agencia ferroviaria Europea para que repita la investigación y que ésta sea llevada a cabo por expertos independientes.

La nueva petición ha sido dada a conocer por la comisaria de Transportes, la eslovena Violeta Bulc, en una comunicación por escrito enviada al presidente de la plataforma de víctimas fechada este lunes 3 de julio. En el escrito, al que ha tenido acceso Europa Press, la representantes de Bruselas se muestra “totalmente a favor” de que se investiguen los accidentes de una forma “independiente” con el fin “de que no se vuelvan a producir”.

Además, Bulc ha dado a conocer a la asociación de afectados la intención de la Comisión Europea de pedir a la Agencia Ferroviaria Europea un nuevo informe sobre la situación de la aplicación de la normativa de la UE sobre seguridad e interoperabilidad en España. Esta medida la presenta como “paralela y distinta” a las impulsadas hasta ahora.

Y es que la Agencia Ferroviaria Europea (ERA, por sus siglas en inglés) ya emitió un duro informe crítico con la investigación realizada por la CIAF sobre el accidente de Angrois. Ahora, el juez que instruye la causa por el siniestro de la curva de A Grandeira le ha pedido también que dictamine sobre el análisis de riesgo, y su incidencia en este caso.

La titular de Transporte de la Comisión da respuesta a la plataforma a las preguntas que las víctimas trasladaron en una reunión celebrada el pasado 6 de marzo en Madrid, coincidiendo con la participación de Violeta Bulc en un encuentro ciudadano junto al ministro de Fomento, Íñigo de la Serna.

Ya ese día, la comisaria mostró su coincidencia con las conclusiones de la ERA al respecto del informe de la CIAF. “En mi última visita a Madrid, insistí en la necesidad de una investigación independiente”, recuerda en la carta a los afectados.

En esta línea, subraya que la Comisión “comparte las principales conclusiones alcanzadas por la Agencia Ferroviaria de la Unión Europea en su dictamen acerca del informe de investigación del accidente de Santiago”.

Bulc incide así en “la importancia del dictamen” de la ERA acerca del análisis “de los puntos fuertes y débiles” del estudio de la CIAF, que únicamente responsabilizó del siniestro al exceso de velocidad y, por tanto, al maquinista.

Evaluación de riesgos “deficiente”

Junto al conductor, en estos momentos, el juzgado también investiga al exjefe de seguridad en la circulación de Adif,investiga al que la Audiencia, que acaba de ratificar esta situación, atribuye una evaluación de la peligrosidad “deficiente”.

Con todo, Bulc recuerda que ni la CE ni la ERA “pueden sustituir a los Estados miembro en las competencias y responsabilidades que les atribuye la legislación de la UE”, una de las cuales es la investigación de los accidentes ferroviarios “graves”.

Por otra parte, entre las respuestas a las cuestiones planteadas hace cuatro meses, Violeta Bulc reitera que el procedimiento de infracción abierto a España en 2013 se archivó en mayo de 2016 al considerar “suficientes” las medidas con las que "se reforzó" la independencia, los recursos y las competencias de la CIAF.

“Ello no significa que la Comisión no pueda abrir un nuevo procedimiento de infracción basado en otras deficiencias o en incumplimientos de la legislación de la UE” apunta.

Y es precisamente en este punto en el que revela la voluntad de solicitar a la ERA un informe sobre la aplicación de la normativa comunitaria sobre seguridad e interoperabilidad en España.

A este respecto, hace semanas ya que la portavoz del BNG en Bruselas, Ana Miranda, ha anunciado que presentará una demanda contra el Estado español por incumplimiento de la normativa de seguridad en lo que se refiere al análisis de riesgo.

Todavía sobre este ámbito, también hace ya meses, en concreto en septiembre pasado, trascendió que Adif encargó el certificado europeo de interoperabilidad, clave para permitir la circulación segura e ininterrumpida de trenes y del que carece la línea Ourense-Santiago desde su inauguración, en diciembre de 2011.

La comisaria explica que la legislación de la UE “no exigía que la línea Ourense-Santiago estuviera equipada con ERTMS”, el sistema de control de velocidades más avanzado, al formar parte de la red básica de la red transeuropea de transportes, “pero no de los nueve corredores de esta última”.

De acuerdo con sus indicaciones, “solo será obligatorio equipar esta línea con ERTMS en 2030”, si bien Adif dispuso este sistema en la totalidad del trayecto en su proyecto inicial y lo suprimió únicamente de los últimos kilómetros en una modificación del proyecto destinada a facilitar la circulación de trenes a lo largo de toda la línea.

Fuentes del Ministerio de Fomento de la época aseguran que la citada modificación nunca tuvo por objeto adelantar la inauguración, que desde el primer momento estaba prevista para finales de 2011.

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De hecho, los magistrados de la Audiencia han señalado a una carencia en cuanto a la evaluación del riesgo después de la modificación del proyecto y la eliminación del ERTMS a la llegada a la estación santiaguesa, donde la curva obligaba a reducir la velocidad de unos 200 a unos 80 kilómetros por hora.

En enero de este año, la comisión de peticiones de la Eurocámara reclamó que se lleve a cabo una investigación "independiente"reclamó  con celeridad sobre el accidente ferroviario del Alvia en Angrois, que dejó 80 muertos y 140 heridos el 24 de julio de 2013 en Santiago de Compostela.

Ya en febrero, esta comisión de peticiones del Parlamento Europeo escribió a la comisaria de Transportes para solicitar que se realizase una investigación “exhaustiva e independiente” del accidente del tren.

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