El PP ve tras el interrogatorio la "estrategia" del PSOE para "desgastar" al Gobierno y Rajoy tacha de "políticas" las preguntas

El Partido Popular se repartió este miércoles muy bien los papeles a la hora de reaccionar a la comparecencia de Mariano Rajoy en calidad de testigo ante la Audiencia Nacional en el marco del caso Gürtel. Al protagonista principal, al compareciente, se le reservó el mensaje de máxima colaboración de la Justicia. Mariano Rajoy llegó a declararse "contento" de haber cumplido "con su obligación" y exhibió el compromiso de seguir colaborando fielmente con la Justicia española. El mensaje más duro, de crítica política a lo ocurrido en el tribunal, quedó reservado para los vicesecretarios.

En una conversación informal con los periodistas al término del acto sobre violencia de género en el que Rajoy había valorado su comparecencia, el coordinador general, Fernando Martínez-Maillo, y el vicesrcretario de Comunicación, Pablo Casado, se quejaron del papel que habían desempeñado en el juicio las acusaciones populares, sobre todo ADADE, la asociación que pidió que el jefe del Ejecutivo compareciera como testigo. 

Martínez-Maillo destacó que las tres acusaciones tienen vinculación con el PSOE. Además de ADADE, hicieron preguntas a Rajoy el abogado del PSPV-PSOE, Virgilio Latorre, y el del PSM, Wilfredo Jurado. De las preguntas que formularon, el PP sacó la conclusión de que hicieron más "labor de oposición" que de preguntar a un testigo.

En definitiva, el PP vio "tres acusaciones para usar a la Justicia buscando desgastar" al partido del Gobierno, la "estrategia" de un partido, el PSOE, para debilitar al PP porque ellos no ganan elecciones. Poco antes, el líder socialista, Pedro Sánchez, había salido a pedir a Rajoy que presentase su dimisión ante el rey. El enfado en las filas conservadoras era mayúsculo.

En este sentido, Martínez-Maillo consideró que PSOE y Podemos están en una "competición de radicalidad". Una competición "entre el rojo del PSOE y el morado de Podemos".

En un sentido similar, Pablo Casado consideró que lo ocurrido este miércoles en la Audiencia forma parte de la precampaña de Pedro Sánchez.

¿Comparte Rajoy la sensación trasladada por sus compañeros en la cúpula del PP? Sí. Según Martínez-Maillo, el propio presidente le había conentando que el grueso de las preguntas a las que se había sometido habían sido "políticas".

Los vicesecretarios destacaron la colaboración de Rajoy con la Justicia. Pero, al mismo tiempo, consideraron que lo ocurrido en la mañana de este miércoles en la Audiencia no había sido "útil" para el proceso judicial. Al proceso no le ha servido "de nada".

En los días previos a esta comparecencia el PP había abonado el terreno para que no esperasen grandes novedades. El propio Martínez-Maillo ya había advertido de que su jefe de filas podía aportar "poco o nada" porque se investigaban asuntos, la financiación de dos campañas electorales en los municipios madrileños de Pozuelo y Majadahonda, que excedían de las competencias de Rajoy.

Precisamente a la circunstancia de que él, ni como número dos del partido, ni como vicesecretario, ni como presidente puede controlar la financiación de las campañas de los más de 8.000 ayuntamientos se refirió Rajoy en varias ocasiones.

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El PP ve una seria contradicción entre lo que exigen los partidos de la oposición a Rajoy y lo que después predican con sus acciones. Así, Martínez-Maillo recordó que en la Comisión de Financiación sobre los partidos que se está celebrando en el Senado, los tesoreros de los diferentes partidos desvincularon a sus líderes del control de la contabilidad.

Respecto a esta comisión, el PP sostuvo que Sánchez tendrá que aclarar, primero en el Parlamento y no se descarta que sea en sede judicial, la condonación de una deuda de 50 millones de euros al Partido Socialista, extremo que habría admitido el tesorero de los socialistas en el Senado.