Rajoy evita responder al PSOE sobre la fractura en el Gobierno por la aplicación del 155

El presidente del Gobierno, Mariano Rajoy, evitó este miércoles en la sesión de control al Gobierno en el Congreso de los Diputados responder a una pregunta de la portavoz socialista sobre "las discrepancias entre la vicepresidenta y los ministros" a la hora de pronunciarse sobre la aplicación del artículo 155 de la Constitución.

Lejos de entrar en el tema, Rajoy se limitó a recordar a Margarita Robles que le había preguntado por una serie de cuestiones que no figuraban en el orden del día. En efecto, la pregunta registrada era la siguiente: "¿Cuáles son las prioridades de su acción de Gobierno?", pero la socialista optó por aprovechar su turno para interesarse también por las divisiones en el Gobierno sobre el alcance del 155, la reforma de la Constitución y los Presupuestos Generales del Estado.

Robles se refería al endurecimiento, en público, del mensaje del Gobierno respecto a los efectos que podría tener la aplicación del artículo 155 de la Constitución fijando la posición de su grupo: "Si Puigdemont acepta la legalidad y en ese marco convoca elecciones, no cabe ni política ni jurídicamente la aplicación del 155".

Si hace una semana desde la Moncloa se trasladó la idea de que Carles Puigdemont tenía la oportunidad de frenar el 155 convocando autonómicas, desde el martes, el Ejecutivo y el PP insisten en que eso no basta por sí solo y que han de darse otro tipo de condiciones. 

En la Moncloa niegan que haya habido un endurecimiento del discurso a la hora de responder sobre cuál sería la reacción del Gobierno si Puigdemont convoca elecciones. Pero el martes, un día antes de esta sesión de control, el Gobierno y PP salieron de forma unánime a repetir el mismo argumento: el artículo 155 de la Constitución seguirá su curso este viernes tras el pleno del Senado si el president, además de convocar elecciones en el marco de la Ley Electoral General (Loreg), no deja clara su firme intención de "regresar a la legalidad".

"Ponga orden en su Gobierno en lo que va a hacer en Cataluña", le exigió la portavoz socialista.

Minutos después, el presidente del Gobierno aprovecharía una respuesta al líder de Ciudadanos, Albert Rivera, para lanzar un dardo al PSOE. Ocurrió cuando recordó que su intención era que en Cataluña se celebren elecciones cuanto antes y que creía que también lo querían así los socialistas. "Por lo menos antes", dijo.

"A mí me gustaría, y a usted también, y al PSOE también, por lo menos antes, que se celebrasen a la mayor celeridad posible y con todas las garantías", además de "con arreglo a legalidad vigente y a la Ley Orgánica del Régimen Electoral General", manifestó.

Por su parte, Rivera, también partidario de que una convocatoria electoral no baste sólo para frenar el 155 se declaró preocupado por posibles fisuras en el bloque PP-PSOE-Cs: "Me preocupa que en el Partido Socialista no quieran lo mismo".

La sesión de control al Gobierno en el Congreso de este miércoles dejó claro que hay fisuras en la alianza de Rajoy con el PSOE. 

Las fuentes conservadoras interpretan las advertencias del PSOE en clave interna, apuntando a las divisiones que han surgido en el seno del PSC después de que el pasado sábado se conociera el acuerdo del Consejo de Ministros relativo a la aplicación del artículo 155.