PORTADA DE MAÑANA
Ver
El tribunal que vigila los contratos de Madrid avisa del "incremento sustancial" de los pagos fuera de control

moción de censura

Sánchez pasa el trámite del Comité Federal sin concretar su programa de Gobierno

Reunión del Comité Federal del PSOE, este lunes en Ferraz.

Fernando Varela

Si alguien esperaba que Pedro Sánchez aprovechase su discurso ante el Comité Federal del PSOE para explicar su programa de gobierno para ganar la moción de censura del jueves o para emplazar al resto de la oposición a tomar partido entre Mariano Rajoy y él mismo debió sentirse muy decepcionado. 

El secretario general socialista se limitó a repetir los motivos que ya citó el viernes cuando explicó la presentación de la moción de censura y pidió el aval del máximo órgano del PSOE entre congresos —en el que están presentes los dirigentes más distanciados con él— sin explicar cuándo va a convocar las elecciones anticipadas que ha prometido si llega a la Presidencia ni el contenido de la agenda social que se propone hacer realidad el tiempo que quede de legislatura.

Los 260 dirigentes socialistas que acudieron a Ferraz —el 81% de los que tienen derecho a hacerlo, una cifra muy elevada para lo que suele ser habitual, lo que da idea del interés suscitado or la reunión— pudieron escuchar por boca de l propio Sánchez una idea en la que todos coinciden: la decisión de Mariano Rajoy de no asumir responsabilidades tras la sentencia de la Gürtel no dejó al PSOE otra posibilidad que recurrir a una moción de censura, un mecanismo constitucional previsto para hacer frente a situaciones de excepcional gravedad.

Los más grave, subrayó Sánchez, es que más allá del contenido inculpatorio de la sentencia de la Gürtel es que queda n muchas más por venir. “Es la primera de otras muchas” en las ya “se intuye el grado de responsabilidad del PP”. Entre ellas siete piezas separadas derivadas del cas Gürtel, los papeles de Bárcenas, la caja B del PP, la visita del Papa a València, los casos Púnica, Lezo y Brugal o el juicio por la destrucción de los discos duros del que fuera tesorero del Partido Popular.

“Por eso”, enfatizó Sánchez, “los 350 diputados en el Congreso tiene que responder una pregunta muy simple: si después de la sentencia Mariano Rajoy puede seguir siendo presidente del Gobierno”. Los socialistas ya han dejado claro que esa posibilidad les parece inaceptable, subrayó. A los que piensen igual, el PSOE  les tenderá “la mano para construir un acuerdo nacional por la regeneración democrática, abrir una nueva etapa con ruta de clara” y convocar elecciones.

Como ya hiciera el viernes en la Ejecutiva, Sánchez pidió a los suyos que eviten la crispación que está buscando el PP y no respondan a sus provocaciones. “Ni crispación ni superioridad moral”, repitió, ni ante los medios de comunicación ni ante los ciudadanos.

“Esta moción no es más que una respuesta constitucional a una emergencia institucional que no ha creado el PSOE” y que ni siquiera formaba parte de la hoja de ruta de la Ejecutiva.“Pero la realidad es la que es. Si se ha presentado”, insistió, “es porque Mariano Rajoy no ha asumido su responsabilidad de dimitir como presidente”.

El PSOE avala la estrategia de Sánchez pero su moción de censura no suma nuevos apoyos

El PSOE avala la estrategia de Sánchez pero su moción de censura no suma nuevos apoyos

Por eso es importante, recordó, “llamar a la responsabilidad de los 350 diputados, para que sean conscientes de que lo que está en juego es la confianza de la ciudadanos en la politica”.

Hasta 22 miembros del Comité Federal han pedido la palabra. La primera, la presidenta andaluza, Susana Díaz, que evitó cualquier crítica a la decisión de presentar la moción de censura. Y que, tras una brevísima alocución, según fuentes del comité, en la que coincidió en la gravedad de la situación política del país, abandonó la renión sin escuchar a los demás dirigentes.

Entre los que han pedido la plabra están Miquel  Iceta, Ximo Puig, Francina Armengol y Abel Caballero.

Más sobre este tema
stats