XIX Congreso Nacional del PP

Santamaría se presenta como "la candidata de las bases": "No estaría en esta tribuna si no fuera la más votada"

Soraya Sáenz de Santamaría en su discurso como candidata a la presidencia del PP.

Soraya Sáenz de Santamaría se subió pasadas las 9.30 de la mañana de este sábado al escenario principal del hotel Auditorium de Madrid para hacer su discurso como candidata a la presidencia del PP. Exhibió orgullo PP y se presentó como una militante más. Una política que siempre ha estado donde su partido la ha necesitado.

Ganadora de la primera ronda de las votaciones por 1.500 votos respecto a Pablo Casado arrancó erigiéndose en la "candidata de las bases". Y como la mejor opción para ganar a Pedro Sánchez en las próximas elecciones generales.

"No estaría en esta tribuna si no fuera la más votada. Estaría en tu lista, Pablo, si me lo hubieras pedido", dijo dirigiéndose directamente a su rival. Desde el minuto después a a la primera fase de ese proceso para la elección del nuevo líder del PP, Santamaría ha intentado, sin éxito, que Casado se sumara a su candidatura.

"Soy Soraya, la del PP", proclamó al tiempo que presumió de haber hecho "una campaña en positivo". Sus enemigos, dijo, no están en PP. Son la izquierda, los independentistas y los populistas. Si gana, mantuvo, en el PP no sobrará nadie, "sólo los corruptos".A su juicio, el único motivo por el que la formación que quiere liderar ha perdido votos es por estos escándalos. Por culpa de personas que tienen nombres y apellidos.

Ella no puede dijo, borrar el pasado. Pero se comprometió a que esos comportamientos queden erradicados en el futuro.

El PP, lamentó, no es el partido más aquejado por la corrupción. "No tenemos más corrupción que otros partidos. Pero nos ha pesado más", sostuvo censurando que algunos vean más la paja en el ojo ajeno que la viga en el propio.

La exvicepresidenta del Gobierno sostuvo que siempre había estado donde se le ha reclamado y no se olvidó de citar a Mariano Rajoy, el hombre que la convirtió en la mujer con más poder de la democracia. Ha estado, dijo, "donde pensaba que podía ser útil". "Y juntos podemos ser más útiles para España", añadió.

Un abanico con la bandera de España

Contrario a lo que opina su rival, Santamaría sostuvo que el PP nunca se ha olvidado de sus principios y valores. Y, portando un abanico con la bandera de España destacó que cada una de las varillas de ese abanico son los principios del partido.

La exvicepresidenta del Gobierno dio el salto para concurrir a esta batalla cuando el presidente de la Xunta de Galicia, Alberto Núñez Feijóo sorprendió a todos dando un paso atrás y señalando que su prioridad eran los gallegos. Y habiendo hecho una campaña más plana que el resto de los candidatos logró colarse en la final con una ventaja de 1.500 votos respecto a Casado.

Representa una candidatura más continuista que la de de Casado. De hecho, ella se ha presentado con el aval de la gestión. Con su experiencia en los Gobiernos de Mariano Rajoy como principal reclamo. Y con el principal objetivo de llegar a la Moncloa, de arrebatar la presidencia a Pedro Sánchez.

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La exvicepresidenta dijo estar orgullosa de haber estado en el Gobierno que sacó a España de la crisis y que frenó a los independentistas. Y recordó que el president Torra se había querellado contra ella.

Ella, defienden sus fieles, es la mejor ubicada en las encuestas para llegar a la Moncloa. Con el plus de ser mujer. Ha llegado la hora, ha defendido en campaña, de que el PP esté en manos de una mujer. Y también de que España tenga a la primera mujer presidenta del Gobierno.

Los compromisarios dirán en su votación de esta mañana qué PP quieren: el del regreso a la vuelta de los principios y valores tradicionales o el del continuismo.

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