El Gobierno acerca a los dos primeros presos de ETA a cárceles vascas

Los presos de ETA Olga Sanz Martín y Javier Moreno Ramajo han sido trasladados desde el centro penitenciario de Villabona (Asturias) al de Basauri (Bizkaia), tras haberlo solicitado a instituciones penitenciarias ambos reclusos, arrepentidos y desvinculados del colectivo de presos de la banda, EPPK, según han informado a Europa Press fuentes oficiales.

Sanz Martín y Moreno Ramajo, exmiembros del 'comando Bizkaia', son pareja y se encontraban en tercer grado penitenciario, "cumpliendo todos los requisitos que establece la Ley". De hecho, llegaron a pedir perdón. Instituciones Penitenciarias ha accedido a trasladarles al centro penitenciario de Basauri, tal como han solicitado, y cumplirán en esta prisión la última parte de su condena en régimen de semilibertad, de forma que acudirán a prisión para dormir.

Estos dos presos fueron detenidos en 1998 en el barrio bilbaíno de Zorroza y condenados en el año 2002 por la Audiencia Nacional a 71 años de cárcel ella y a 74 años él, junto a otros 14 miembros y colaboradores del 'comando Bizkaia', el grupo que había planificado el asesinato del exconsejero del Interior del Gobierno Vasco Juan María Atutxa o del entonces presidente del PP en el País Vasco Carlos Iturgaiz.

Olga Sanz escribió el pasado mes de marzo una carta muy similar a la de otros arrepentidos en la que pedía perdón por el daño que había causado, lo asumió y pidió "disculpas". "Lo lamento sinceramente", aseguró. Además, se puso a disposición de la Justicia a fin de "facilitar información para esclarecer algún delito si fuera necesario", si tuviera información, y se comprometió a hacer frente a su responsabilidad civil.

Esta carta le permitió disfrutar de permisos y, más adelante, obtuvo el tercer grado. Su pareja estaba, además, trabajando en el economato de la prisión asturiana, uno de los puestos a los que han accedido otros reclusos de ETA arrepentidos como Valentín Lasarte o Iñaki Rekarte, en la actualidad excarcelados.

Condenas

La Audiencia Nacional condenó a Sanz por estragos terroristas a 33 años, por asesinato a 15, por colaboración con banda armada a nueve, por depósito de armas a ocho y a otros seis por falsificación de documento oficial y robo.

En el mismo juicio, en el que fueron juzgados por pertenencia a ETA y por la comisión de los atentados atribuidos al 'comando Bizkaia' desde el año 1997, fue condenada su pareja Javier Moreno Ramajo a 74 años.

El "rédito" político del PNV

La vicesecretaria de Comunicación del Partido Popular, Marta González Vázquez, ha criticado este miércoles el traslado de los presos porque considera que es una concesión del PSOE al PNV por su apoyo en la moción de censura. Así lo ha expresado en una entrevista en RNE recogida por Europa Press en la que ha evaluado el acercamiento de estos reclusos a cárceles vascas advirtiendo de que se puede tratar "del primer paso" de, en su opinión, "los réditos que el PNV extrae de su apoyo a la moción de censura" contra Mariano Rajoy y que ahora "empieza a cobrarse con esta nueva política penitenciaria".

Algunos miembros del Ejecutivo como el ministro del Interior, Fernando Grande Marlaska, y el delegado del Gobierno en el País Vasco, Jesús Loza, han asegurado que el traslado de ambos reclusos, que se encontraban en tercer grado penitenciario, "se ha cumplido escrupulosamente" y que la nueva política penitenciaria "estará ajustada a la ley".

"Hacer que se cumpla la ley"

La diputada de EH Bildu en el Parlamento vasco Jasone Agirre ha afirmado que "el Gobierno tiene simplemente que cumplir la ley" porque es "su obligación", para que los presos cumplan condena en cárceles cercanas a su domicilio y, en este sentido, ha apuntado que el acercamiento de presos es "una cuestión de derechos humanos" y que "ninguna ley dice nada" sobre "el tema del perdón", que es "una cuestión personal". En este sentido, ha indicado que el presidente, Pedro Sánchez, "ha dicho que se van a dar pasos en ese sentido", pero se está a la espera de ver "cuáles son, más allá de las palabras".

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Asimismo, la parlamentaria de EH Bildu se ha referido a las críticas por los homenajes a presos de ETA y ha precisado que "son recibimientos". "Demostrar cariño nunca puede ser delito, y eso no es un homenaje, ni enaltecimiento", ha manifestado.

"Es lo que se debería haber estado haciendo desde hace años y no se ha cumplido", ha manifestado la parlamentaria de EH Bildu en relación al acercamiento, a lo que ha apuntado que "nunca se ha pedido ningún beneficio penitencio", sino que "la misma ley que te condena y te impone una pena dice que tienes que estar en una cárcel cercana a tu casa". Según ha indicado, "eso es lo que se ha hecho ahora".

A su entender, por hacer cumplir la ley, desde el Gobierno no se es "valiente", sino "honesto". "Luego él verá sus luchas internas", ha añadido Jasone Agirre, que ha censurado que "hay otros sectores que llevan años utilizando esto, como está haciendo ahora mismo Pablo Casado para tapar sus vergüenzas".