Sanidad

El gasto sanitario entre comunidades varía hasta en 500 euros al año por habitante

Una profesional sanitaria prepara un quirófano.

Las "excesivas" diferencias en la atención sanitaria que reciben los residentes en España según la autonomía donde residen están poniendo en peligro la "necesaria cohesión y equidad" y hacen "casi imposible" que se den las mismas prestaciones con igual nivel de calidad en los diferentes territorios. Esta es una de las principales conclusiones del informe Los servicios sanitarios de las comunidades autónomas [consultar, aquí], publicado este lunes por la Federación de Asociaciones en Defensa de la Sanidad Pública (FADSP), una entidad independiente que agrupa a profesionales y usuarios. 

El colectivo otorga una puntuación a las autonomías a partir de un baremo que cuenta con 31 indicadores que evalúan, con los últimos datos oficiales disponibles, el gasto per cápita; la proporción entre el número de camas y personal sanitario por población; la política sobre medicamentos (gasto en recetas y en fármacos que se usan en hospitales); las listas de espera para operarse o para acudir al especialista; o el grado de satisfacción con la atención recibida expresado por los ciudadanos; entre otros.

Pues bien, teniendo en cuenta estos índices, son los servicios sanitarios de Canarias (53 puntos), la Comunitat Valenciana (63) y Cataluña (65) los que el informe califica de "peores". Las tres autonomías repiten en el furgón de cola por segundo año consecutivo. Además, las dos primeras no han logrado escapar de estas posiciones en las últimas nueve ediciones del informe.

A continuación, con sistemas "deficientes" se sitúan Murcia (66), Cantabria (66), Andalucía (68), Galicia (71) y Baleares (72); y entre los "regulares" se encuentran Asturias (78), Castilla-La Mancha (77), Extremadura (77), La Rioja (76) y la Comunidad de Madrid (73). En contraposición, las comunidades con "mejores" servicios sanitarios son el País Vasco (94), Navarra (83), Aragón (80) y Castilla y León (80), que se mantienen en los primeros puestos desde hace cinco años, aunque con cambios en las posiciones relativas.

En las diferencias territoriales a las que alude el informe inciden cuestiones como que el gasto sanitario entre comunidades varíe en más de 500 euros al año por habitante. El País Vasco lidera la lista con una inversión per cápita de 1.693 euros, un 45% más que Andalucía, que sigue siendo la autonomía con menor presupuesto, con 1.166 euros. Acompañan a Andalucía en la parte baja de la tabla Cataluña (1.192 euros), la Comunidad de Madrid (1.214 euros), Murcia (1.239 euros) y Canarias (1.268 euros).  Liderando la lista, además del País Vasco, están Asturias (1.655 euros), Navarra (1.633 euros), Extremadura (1.488 euros) y Castilla y León (1.473,02 euros).

Consecuencias 

El informe muestra que el déficit de inversión por habitante repercute, por ejemplo, en indicadores como el número de camas hospitalarias por cada 1.000 habitantes, en el que Andalucía mantiene el registro más bajo: 2,62. Para esta comunidad, el documento arroja también las cifras más negativas respecto a los recursos humanos de los hospitales. Por ejemplo, en Andalucía hay 1,54 médicos por cada 1.000 habitantes en los establecimientos de atención especializada, mientras que en Navarra hay 2,33 o en Asturias 2,25. Algo similar ocurre con los enfermeros de los hospitales: la ratio es de 2,6 por cada 1.000 habitantes en Andalucía y en Aragón, el registro más alto, es de 4,37. 

Sin embargo, otros datos que ofrece el informe de la FADSP sí muestran, al menos para el caso de Andalucía, que está llevando a cabo políticas que contribuyen a mejorar la eficiencia de su sistema sanitario. Es el caso de la subasta de fármacos que puso en marcha en 2012 y que ha contribuido a que sea la comunidad con menor gasto farmacéutico hospitalario per cápita: 110,89 euros. Una cifra muy alejada, por ejemplo, de los 177,49 que gasta Asturias, que es la que registra mayores desembolsos en este concepto. 

Asimismo, Andalucía es la segunda autonomía, sólo por detrás de Baleares, que registra costes de alta hospitalaria menores: 3.854 euros. En Canarias, autonomía que no destaca por tener un gran presupuesto per cápita, esta cifra alcanza los 5.879 euros, un 53% más. 

Por el contrario, la buena posición del País Vasco se explica, entre otros índices, por sus buenos resultados en la gestión de las listas de espera. Los vascos esperan, de media, cincuenta días para ser operados, una cifra muy alejada de los 177 días que aguardan los canarios para entrar en quirófano o de los 163 que esperan los castellano-manchegos. Del País Vasco también destaca el gran porcentaje de medicamentos genéricos suministrados, lo que ayuda a generar un ahorro que, según los expertos, permite una mejor utilización de los fondos públicos destinados a recursos sanitarios. En esa comunidad, el 44% de los medicamentos prescritos son genéricos. En Murcia, sin embargo, este porcentaje apenas llega al 30%. 

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Privatizaciones  

Por otro lado, la FADSP penaliza en su baremo a los sistemas sanitarios autonómicos que tienen más servicios privatizados. Eso hace que Cataluña, de largo la autonomía que más parte de su presupuesto sanitario dedica a acuerdos con empresas privadas, –un 25,1%, según los últimos datos– retroceda tanto en los últimos años. Otras autonomías que han reducido sus puntuaciones por su apoyo a la colaboración público-privada son La Rioja, Castilla y León o la Comunitat Valenciana. 

El colectivo de profesionales y usuarios critica las privatizaciones porque, a su juicio, la gestión privada supone un sobrecoste de entre siete y nueve veces "sin mejorar la calidad de la atención sanitaria" y reduce "los presupuestos ya de por sí escasos" de los centros públicos de gestión tradicional. La Comunidad de Madrid, por su parte, es la segunda comunidad que más parte de su presupuesto sanitario dedica a llevar a cabo a acuerdos con empresas a través de conciertos o de otro tipo de fórmulas. En 2017 fue un 12,4% de su presupuesto.

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