El TS se niega a tener en cuenta el “contexto político” para liberar a los presos del 'procés', que sí consideró relevante en febrero para tenerlos en prisión

La Sala de lo Penal del Tribunal Supremo rechazó este miércoles la enésima petición de libertad provisional presentada por las defensas de los nueve procesados en la causa del procés que, casi un año después, continúan están en prisión provisional (Josep Rull, Jordi Turull, Raül Romeva, Oriol Junqueras, Jordi Sànchez, Carme Forcadell, Joaquim Forn, Dolors Bassa y Jordi Cuixart) y que los afectados habían planteado basándose en el impacto que la situación de prisión está teniendo en el entorno familiar y personal de cada uno de ellos.

La resolución de la sala, de la que ha sido ponente el magistrado Manuel Marchena, tampoco admite la alegación de la exconsellera de Trabajo Dolors Bassa en la que negaba la existencia de riesgo de fuga basándose en que ha abandonado la política y en el clima político actual, proclive al diálogo entre el Gobierno central y el de la Generalitat, para pedir su puesta en libertad a la espera del juicio. La Sala no ha aceptado la petición con el argumento de que “ni las medidas cautelares vigentes respondieron, en el momento de su adopción, a un determinado clima político, ni su permanencia puede hacerse ahora depender de un contexto político diferente”.

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Sin embargo, el pasado mes de febrero el juez instructor de la causa contra el procés, Pablo Llarena, sí justificó el “riesgo de reiteración delictiva del exconseller de Interior, Joaquim Forn, basándose precisamente en el “contexto político”. Según el magistrado, entonces existía riesgo de que Forn se fugase porque la ideología del entonces investigado “coexiste con un contexto político en el que no hay certeza de que haya desaparecido la intención de alcanzar la independencia de Cataluña”, existiendo todavía sectores que defienden explícitamente que debe conseguirse de manera inmediata. Y señalaba expresamente y a modo de prueba la actitud de Carles Puigdemont, entonces todavía aspirante a la Presidencia de la Generalitat.

Llarena decidió ignorar la solicitud de Forn de salir en libertad provisional a pesar de que había renunciado, el 23 de enero, a su acta de diputado en el Parlament. El instructor subrayaba entonces el “contexto político” para tomar su decisión, un criterio que aplicó en muchas de las resoluciones en las que ha ido rechazando las peticiones de los imputados. El juez apoyó entonces su negativa en “la incerteza que existe de que la voluntad política mayoritaria sea respetar el orden legal para lograr la aspiración de independencia que aun hoy comparte el investigado”.