PORTADA MAÑANA
Ver
El fundador de una sociedad panameña del novio de Ayuso gestiona los chequeos médicos de la Comunidad

26M | 'Superdomingo' electoral

Gabilondo, diana de todas las críticas en el debate electoral mientras PP, Cs y Vox pugnan por el liderazgo de su bloque

Los candidatos a la Presidencia de la Comunidad de Madrid (i-d) Isabel Díaz Ayuso (PP), Rocío Monasterio (Vox), Ignacio Aguado (Ciudadanos), Isabel Serra (Podemos), y Ángel Gabilondo (PSOE).

infoLibre

El candidato del PSOE a la Comunidad de Madrid, Ángel Gabilondo, ha sido este domingo el centro de todas las críticas de sus rivales, que le han llegado a acusar de que "no baja al barrio", que escucharle hablar de economía es como oír a "Herodes hablar de fomentar la natalidad" o de no tener propuestas "pese a las buenas palabras"; mientras que PP, Cs y Vox han pugnado por el liderazgo de su bloque de centro-derecha.

En el primer debate electoral entre candidatos a la Comunidad, organizado por Telemadrid, el que más ha arremetido contra Gabilondo de todos los aspirantes ha sido el de Ciudadanos, Ignacio Aguado, que se ha postulado como el único voto útil para "frenar" al presidente del Gobierno en funciones, Pedro Sánchez, y a los "populistas".

Le ha llegado a lanzar que escucharle hablar de economía "es como oír hablar a Herodes de fomentar la natalidad", al tiempo que le ha reprochado haber sido ministro en el Gobierno de José Luis Rodríguez Zapatero, "responsable de la ruina" que dejó a todos los españoles.

Así le ha acusado de tener preparado como Sánchez "un sablazo fiscal", después de "haber enseñado la patita con recuperar el impuesto de sucesiones y donaciones". "Si gobierna agárrense la cartera, bastante tenemos como para aguantar cuatros años más de impuestos y subidas fiscales de la mano de Gabilondo y su socio Podemos 1 y Podemos 2", le ha dicho a los madrileños mirando a cámara.

Asimismo, Aguado le ha llamado "experto" en hablar de pobreza pero le ha reprochado que "cuando hay que bajar al barrio y dar al botón es cuando se borra". "Cuatro años ha votado no a los presupuestos, la gratuidad de las escuelas infantiles. Una política estéril que si no hubiera sido por nosotros hubiera impedido que consiguiéramos avances en esta legislatura", le ha afeado.

De hecho, el candidato del partido naranja le ha llegado a negar de nuevo un posible pacto tras las elecciones, antes de que contestase Gabilondo a los moderadores si se planteaba aceptar apoyos de Ciudadanos: "Eso no va a pasar, le pueden hacer otra pregunta".

También ha remarcado durante todo el debate que de ganar Gabilondo, tiene que gobernar con Podemos, advirtiendo que su candidata, Isa Serra, estuvo pintando bancos. Para ilustrarlo, ha enseñado una imagen de este momento y la ha sacado en varias ocasiones, diciendo que esa era la consejera que iba a tener para Educación y Civismo. Ha habido un momento que hasta le ha puesto la cartulina con la foto a Gabilondo en su mesa.

Las críticas de la derecha

Por su parte, la candidata del PP, Isabel Díaz Ayuso, ha aprovechado para insistir en que la izquierda es "el reparto equitativo de la miseria", ha acusado al socialista de "no saber cuántos habitantes tiene la autonomía" y de "no tener una propuesta pese a las buenas palabras.

Asimismo, le ha lanzado a la candidata de Unidos Podemos, Isa Serra, que "quemando cajeros automáticos" no se soluciona "absolutamente nada" y sólo se ha salido del guión cuando ésta le ha preguntado que "cuáles eran los favorcillos" que le pidió al cabecilla de la trama Gürtel, a lo que ha respondido que si esa pregunta se la hace desde Galapagar, en referencia al lugar donde vive el líder de Podemos, Pablo Iglesias.

La candidata de Vox, Rocío Monasterio, ha alertado de que la izquierda quiere entrar en los colegios para adoctrinar a los niños, "a darle doctrinas anticientíficas, a imponerles la ideología de género", que el socialismo garantiza la miseria, que deriva en pobreza "para todos" y "en eso sí son expertos en penalizar el ahorro de los españoles".

Gabilondo tampoco se ha librado de las palabras de la candidata de Podemos, Isa Serra, con la que más posibilidades tiene de entenderse ante posibles pactos tras los comicios --además de Íñigo Errejón, por Más Madrid, que no ha estado presente en el debate por decisión de la Junta Electoral--. Ésta ha apostado por un gobierno nítidamente de izquierdas si dan los números tras las elecciones, por lo que ha pedido a Gabilondo, que no ha excluido hablar con nadie, que aclare si gobernaría con Ciudadanos.

"Es evidente que en España podemos hacer un gobierno de izquierdas para avanzar y votantes socialistas han dicho que con Rivera no. Es hora de echar a las derechas y hacer un gobierno de izquierdas", le ha lanzado.

Pullas entre el PP, CS y Vox

Pero, las críticas el bloque de PP, Ciudadanos y Vox no se han quedado ahí sino que las tres formaciones han aprovechado para lanzarse diversas pullas entre sí, conscientes del trasvase de votos que podría darse entre los tres en los comicios.

Díaz Ayuso acusó a Ciudadanos de ser como el baile de la "Yenka": a veces derecha, a veces izquierda; Monasterio se reivindicó como la "alternativa limpia no vulnerable por la corrupción", que además no es "veleta", mientras que Aguado aseguró que es el único que puede "frenar" 24 años de gobiernos populares.

José Luis Ayllón, director del gabinete de la Presidencia con Rajoy, se incorpora a LLYC

José Luis Ayllón, director del gabinete de la Presidencia con Rajoy, se incorpora a LLYC

Este último también lanzó una crítica directa contra Vox al espetarle a Monasterio que la formación naranja había eliminado "muchos chiringuitos", incluidos los del presidente de su partido, Santiago Abascal.

Pese a estas y otras palabras los tres partidos acabaron tendiéndose la mano, conscientes de que se necesitarían mutuamente si los resultados electorales les dan la mayoría parlamentaria en la Asamblea de Madrid. "Ánimo, podemos ganar, no somos adversarios", ha lanzado Aguado a Ayuso, quien ha respondido que lo que tiene claro es que los adversarios son las izquierdas.

El candidato socialista ha llegado a pedir "mesura" para no convertir el debate "en una interpelación personal" y "no acabar abordando los intereses de los ciudadanos". Además, se ha planteado qué es lo que pensarán los madrileños al verles a todos los políticos hablando de "repartos de vicepresidencias" cuando no se conoce el resultado de las elecciones.

Más sobre este tema
stats