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Andalucía

PP y Cs ponen los números y Vox las banderas: así son los primeros presupuestos de las tres derechas

El portavoz de Vox, Alejandro Hernández, saluda a Juan Marín (Cs) y Juanma Moreno (PP) en el Parlamento de Andalucía. Los tres grupos aprobarán este jueves en el Parlamento los presupuestos de 2019.

El primer presupuesto de las tres derechas se debatirá este miércoles en el Parlamento de Andalucía. No hay margen para sobresaltos. La ley saldrá adelante tras un acuerdo en el que Vox ha cosechado más victorias simbólicas que numéricas, más logros cualitativos que cuantitativos. El partido de Santiago Abascal, que una vez caído en desgracia Francisco Serrano tiene en el parlamentario Alejandro Hernández su hombre fuerte en Andalucía, ha metido cuña en las cuentas de 2019 en temas como inmigración y exaltación patriótica y ha obtenido compromisos para las de 2020 en estas áreas y también en políticas de género, todo ello en un documento con el logo de los tres partidos en el membrete. Ahí residen sus victorias, que le permitieron retirar el órdago de su enmienda a la totalidad. A cambio de esas cesiones, celebradas por la formación ultraderechista, PP y Cs han mantenido desde el Gobierno el control de los grandes números del presupuesto, que Vox –coincidente grosso modo con el Gobierno andaluz en sanidad, educación y fiscalidad– no ha intentado cambiar. Le valía con conquistas de corte mediático para marcar perfil y reivindicarse.

Tras pasar por el filtro de las enmiendas parciales de Vox, el proyecto de ley impulsado por el Gobierno de PP y Cs llega al pleno convertido en un dictamen similar en los grandes dígitos a como era en origen. Los cambios forzados por la ultraderecha superan por poco los 2,1 millones de euros, una minucia (0,005%) en un presupuesto de 36.495,5 millones. Los partidos que lideran en Andalucía el presidente Juanma Moreno (PP) y el vicepresidente Juan Marín (Cs) han tenido que aceptar una rebaja con respecto a lo previsto del dinero dedicado para inmigración en el presupuesto de 2019 y la creación de un teléfono contra la "violencia intrafamiliar" para las cuentas de 2020, cuya negociación en detalle aún está pendiente. Y todo ello además de diversos compromisos de difícil plasmación técnica como ayudas para niños de origen andaluz con problemas por la "inmersión lingüística". Pero el consejero de Hacienda, Juan Bravo (PP), no ha tenido que tocar el esqueleto de las cuentas. Ni una sola partida se ha movido de consejería, destacan desde Hacienda.

El Gobierno andaluz de PP y Cs aprobó el proyecto de ley el 31 de mayo, tras las elecciones municipales, autonómicas y europeas. El gabinete de Moreno y Marín había evitado que la negociación se desarrollase durante la campaña, lo que hubiera evidenciado el acuerdo estructural con Vox, que desmonta el discurso del Ejecutivo que juega a la geometría variable y alcanza acuerdos con todos. Esto es sólo cierto en lo institucional. Es verdad que PP y Cs han alcanzado un acuerdo con todos en la renovación de los órganos de extracción parlamentaria como la Radio Televisión Andaluza (Canal Sur), pero los pactos políticos están siendo de PP, Cs y Vox: reparto de la mesa, investidura, decreto ley de bajada de impuestos y presupuestos. Cuando toca definirse, a la hora de la verdad, hay dos bloques.

El presupuesto de 2019 asciende a 36.495,5 millones, con un crecimiento del 5% y más fondos que en 2018 dedicados a sanidad, educación y políticas sociales. El consejero Bravo afirma que la mejoría económica que provocarán las rebajas fiscales incrementará los ingresos, lo que permite que sean las cuentas "más sociales" de la historia. Una vez Vox tuvo las cuentas en sus manos, justo en los prolegómenos de una negociación global con PP y Cs que afectaba también a Madrid y Murcia, el partido de Abascal anunció una enmienda a la totalidad. Vox recordó entonces a PP y Cs que sus 12 escaños son imprescindibles para la mayoría absoluta y puso condiciones encima de la mesa. Finalmente, hubo acuerdo. Vox arrancó la firma a PP y Cs, retiró su enmienda a la totalidad y se abrió a negociar enmiendas parciales. El camino para los primeros presupuestos de PP, Cs y Vox estaba expedito.

El texto resultante, que se debate este miércoles, incorpora 44 enmiendas aprobadas, según la información facilitada por la Consejería de Hacienda a este periódico: 16 de Vox, 14 conjuntas de PP y Cs, 12 de Adelante Andalucía y 2 del PSOE. De todas las enmiendas, 15 tienen incidencia económica directa. Es decir, han supuesto cambios económicos, por un montante total de algo más de 4,6 millones de euros, si bien sin alterar las cifras globales de ingresos y gastos. Vox es el partido que más dinero mueve con sus enmiendas, 2,1 millones. Tanto desde los partidos como desde Hacienda recuerdan que aún hay margen para la incorporación de cambios, pero no habrá nada que afecte al meollo del acuerdo que garantiza que el primer presupuesto con el apoyo de la ultraderecha de la historia del Estado de las autonomías salga adelante. Serán 59 votos a favor –26 del PP, 21 de Cs y 12 de Vox– y 50 en contra –33 del PSOE y 17 de Adelante Andalucía–.

Estos son 10 de los términos que han permitido el acuerdo con Vox. Unos términos que fijan el precio que PP y Cs han pagado para lograr el apoyo de la ultraderecha a las cuentas de 2019 y 2020, allanando a priori el camino para una legislatura plácida. Un precio más político que económico, más simbólico que numérico.

1. Menos dinero para integración de inmigrantes

En cumplimiento del acuerdo entre el Gobierno andaluz (PP-Cs) y Vox, firmado el 13 de junio, el presupuesto final para 2019 quita 600.000 euros del programa 31J, "para la promoción e inserción de personas inmigrantes", y se lo adjudica la construcción de infraestructuras judiciales. Una victoria simbólica de Vox.

2. Auditorías a cargo de consultoras privadas

Es la modificación más cuantiosa: 1,5 millones de gestión del patrimonio pasan a auditorías de la Junta realizadas por empresas externas y a asistencia jurídica para reordenar el sector público. Eso ya está recogido en el presupuesto de 2019. Además, el compromiso de PP, Cs y Vox es que en 2020 haya 18,5 millones para estos fines. Vox materializa así su énfasis en la necesidad de recortar la "administración paralela", una tarea en la que el Gobierno de PP y Cs se ha puesto el listón tan alto que de momento no ha sido capaz de acercarse.

Se trata de la modificación de mayor cuantía de todas las aprobadas, por delante del millón de euros asignado al plan contra la seca a raíz de una enmienda de Adelante Andalucía y de los 500.000 para las canalizaciones de una presa en Granada a impulso del PSOE.

Vox, que se considera azote de subvenciones, ha querido que el compromiso establezca que las auditorías deben ser externas. Es decir, contratadas a empresas privadas, en vez de realizadas con los propios medios de la Administración andaluza.

3. El descubrimiento de América en el colegio

Vox, un partido que nutre su discurso ultranacionalista de las gestas premodernas de los reinos peninsulares, ha logrado que el presupuesto de 2019 incorpore una disposición adicional con el programa "1492: Un nuevo mundo", que se desarrollará en todos los colegios de Andalucía para dar a conocer "el descubrimiento de América y otras gestas posteriores, como la circunnavegación de la Tierra". Eso sí, no se le asigna partida económica.

Vox se opone a la ley andaluza de memoria por incluir la memoria democrática en el currículo escolar, entre otros motivos. El desinterés por el valor pedagógico de enseñar lo ocurrido entre 1936 y 1978 contrasta con el interés por incidir, en clave de gran gesta nacional, en lo ocurrido en el siglo XV.

4. Andalucía por la marca España

El presupuesto, por exigencia de Vox, incluye una modificación de los estatutos de la agencia de promoción exterior, Extenda, para su colaboración con la Secretaría de Estado España Global, responsable de la imagen del país en el extranjero. Se trata de subrayar que toda acción exterior –aunque sea, como en este caso, de ámbito comercial– debe estar sujeta al Estado central. Una vez más, es un logro antes que nada simbólico, sin coste en las cuentas.

5. Subvenciones bajo sospecha

El Gobierno andaluz ha dado por buena la tesis de que las subvenciones en Andalucía se daban al margen de los cauces legales. Atendiendo al compromiso alcanzado con Vox, el presupuesto que tendrán que aplicar PP y Cs establece la elaboración de un plan estratégico de subvenciones en cada una de las consejerías. Vox ha puesto en el punto de mira las subvenciones que reciben asociaciones feministas y memorialistas.

Vox también ha logrado imponer a PP y Cs el compromiso de una extraña limitación a las subvenciones a asociaciones memorialistas. El acuerdo firmado por el Gobierno andaluz con el partido de Alejandro Hernández establece que "la normativa reguladora de las subvenciones [a estas entidades] no podrá prever que más de un 20% venga a financiar gastos estructurales de la asociación", dando a entender –sin decirlo– que ahora es así. El dinero se dedicará "estrictamente" a fosas e identificación. Se pone así en duda, en un documento firmado por dos consejeros del Gobierno andaluz –Economía y Hacienda–, la honestidad de estas asociaciones, pero sin lanzar acusación concreta de ningún tipo. Este punto no está en el presupuesto de 2019. Es un compromiso aún no concretado, pero que ha servido para convencer a Vox de apoyar los presupuestos.

6. Fin a la nomenclatura de género

El acuerdo PP-Cs-Vox que da luz verde al presupuesto de 2019 establece compromisos para este año, pero también para el próximo. Será entonces, en 2020, cuando la documentación de los presupuestos "sustituirá el concepto de 'transversalidad de género' por el de 'principio de igualdad de trato y de oportunidades entre mujeres y hombres'. Pura batalla semántica.

7. Teléfono de "violencia intrafamiliar"

Tampoco está en el presupuesto de 2019, pero estará –si PP y Cs cumplen su compromiso con Vox– en el de 2020: un teléfono de atención a las "víctimas de la violencia intrafamiliar". Ni un detalle se ha dado sobre el mismo desde la firma del acuerdo, hace más de un mes. Lo importante otra vez son las palabras: "Violencia intrafamiliar" convive ya con "violencia de género", sintagma que Vox rechaza por considerarlo una invención "ideológica" del "supremacismo" feminista. El partido de Abascal tendrá que estar pendiente de la concreción real de este acuerdo. En el acuerdo de investidura PP y Vox acordaron la creación de una "Consejería de Familia" que finalmente ha sido una "Consejería de Salud y Familias". La diferencia ahora es que en el documento están las firmas de Vox, PP... y Cs.

8. Convenio con la Policía

Cuando el partido de Alejandro Hernández presiona para la expulsión de 52.000 inmigrantes –dato sin base fáctica–, PP y Cs suelen replicar que no tienen competencias para ello. No obstante, Vox ha logrado que el Gobierno se comprometa a incluir en los presupuestos de 2020 dotaciones sin determinar para la creación de un órgano de coordinación con la Policía y la Guardia Civil. infoLibre preguntó este martes al consejero de Presidencia, Elías Bendodo (PP), por el grado de avance de este compromiso –así como del recogido en el punto 9–, sin respuesta. "Ustedes están empeñados en Vox, Vox, Vox", contestó. Después aclaró que los acuerdos con Vox "se cumplirán", sin dar detalle.

9. Contra la inmersión lingüística

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El acuerdo PP-Cs-Vox recoge que el Gobierno andaluz debe cambiar las normas para dar subvenciones a "comunidades andaluzas" en el exterior para financiar programas contra "los problemas" que originan los "procesos de inmersión lingüística". No hay referencia a Cataluña, pero es obvio que el compromiso obedece a Cataluña. El presupuesto de 2020 dedicará al menos 100.000 euros más a los andaluces en el exterior.

10. Apoyo a las embarazadas

Los presupuestos de 2020 incorporarán, por exigencia de Vox, un servicio de "asesoramiento a las mujeres embarazadas que se encuentren con dificultades económicas y de cualquier otra índole para llevar adelante su embarazo". Se hará "mediante el concierto social o concurso público (asegurando la concurrencia y objetividad) que permita seleccionar una o varias asociaciones sin fines de lucro, con el objetivo de proceder a la atención de dichas mujeres, ofreciendo la totalidad de las alternativas disponibles a la mujer embarazada, de forma respetuosa con su decisión final", señala el acuerdo de PP, Cs y Vox.

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