La legislatura, bloqueada

Las doce provincias que pueden dar una nueva oportunidad a la derecha por el 'baile' del último escaño

Santiago Abascal (Vox), Albert Rivera (Cs) y Pablo Casado (PP).

En 12 de las 20 provincias españolas en las que el último escaño en disputa en las elecciones generales del 28 de abril se decidió por un escaso margen fue la derecha la que estuvo a punto de arrebatar otros tantos diputados a la izquierda. Son las circunscripciones de Huelva, Málaga, Albacete, Cantabria, Cuenca, Jaén, Madrid. Baleares, Zaragoza, Araba, Barcelona y Murcia.

Nadie puede estar seguro de cómo van a votar los electores el 10 de noviembre si la repetición de las elecciones se hiciera inevitable en estas próximas horas, pero lo ocurrido en las circunscripciones con resultados más apretados demuestra la fragilidad de la victoria del bloque de la izquierda.

Haber obtenido 12 escaños más (siete para Vox, cuatro para Ciudadanos —dos de los cuales hubiesen sido a costa del PP— y tres para la formación de Pablo Casado) a costa de la izquierda habría redibujado el Congreso de los Diputados: el bloque de la derecha tendría 163 escaños (incluyendo a Navarra Suma y Coalición Canaria) y superaría al de la izquierda (PSOE y Unidas Podemos). Las derechas, por tanto, tampoco sumarían mayoría absoluta (situada en 176) en ese hipotético escenario, pero quedarían por delante del bloque progresista.

Es verdad que la perspectiva de una repetición electoral afecta a todas las circunscripciones y al conjunto de las fuerzas políticas. Pero si, como indican las encuestas, no se prevén grandes variaciones —la mayoría de los encuestados asegura que volverá a depositar la misma papeleta—, la mirada de los estrategas de los partidos se dirige, en primer lugar, a las 20 provincias españolas en las que el 28 de abril el último escaño se decidió por la mínima.

Con apenas un pequeño empujón de votos en las provincias de Huelva, Málaga, Albacete, Cantabria, Cuenca, Jaén y Madrid, la ultraderecha de Vox habría conseguido el 28 de abril siete diputados más. Su líder, Santiago Abascal, encabezaría un grupo parlamentario de 31 diputados en vez de los 24 que tiene en la actualidad (casi un 30% más). Y, de paso, habría restado dos escaños a Unidas Podemos —en Huelva y Málaga— y cinco al PSOE —Albacete, Cantabria, Cuenca, Jaén y Madrid—.

Ciudadanos también se quedó a las puertas de redondear su resultado del 28 de abril. Estuvo cerca de lograr cuatro escaños más —Baleares, Zaragoza, Alicante y las Palmas—, pero en su caso a costa del PSOE (2) y del PP (2). De hecho, con esa variación hubiese estado ya muy cerca del sorpasso al partido de Pablo Casado.

El PP, a su vez, se situó muy cerca de sumar un escaño más en tres circunscripciones: Araba, Barcelona y Murcia a costa de EH Bildu, En Comú Podem y el PSOE, respectivamente.

Márgenes muy pequeños

Lo estrecho del resultado para la izquierda el 28 de abril se entiende mejor si se tiene en cuenta que aquel día el PSOE sumó nueve de sus 123 escaños por un margen my pequeño de votos y sólo se quedó a las puertas de sumar diputados adicionales en las provincias de Salamanca y Palencia, en un caso a costa de PP y en el otro de Ciudadanos. Con un poco menos de fortuna (y de movilización de su electorado), los socialistas no habrían pasado de 114 escaños y la formación de mayorías en el Congreso se le habría complicado todavía más.

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Un riesgo que, según  muchos analistas, puede multiplicarse el 10 de noviembre, especialmente si la izquierda no se moviliza —frustrada por las negociaciones de la investidura— y la derecha maniobra para optimizar resultados en las provincias en las que le conviene unir fuerzas.

La mecánica de distribución de escaños a través de la Ley d'Hondt dejó también al PNV muy cerca de sumar su sexto escaño en Biskaia —en perjuicio de Unidas Podemos— y a EH Bildu a punto de lograr su quinto diputado gracias a Navarra —a costa del PSOE—.

También Unidas Podemos se quedó a un puñado de votos de arrebatar al PP el último escaño por Toledo. Lo mismo que En Comú Podem en Girona, en este caso a costa de Esquerra Republicana. 

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