Coronavirus

¿Aprobado general? ¿Habrá Selectividad? Claves para entender los cambios en el curso escolar

Un niño estudia desde casa con ayuda de su madre.

A media tarde del miércoles, los medios de comunicación preparaban las alertas. En los titulares, brillaba una idea: aprobado general. Era el resultado de la Conferencia Sectorial celebrada entre el Ministerio de Educación y Formación Profesional y las comunidades autónomas. Los padres y madres trataban de descifrar qué pasaría con los 8,2 millones de alumnos de enseñanza no universitaria que, con la irrupción del coronavirus, han visto su formación lastrada, aunque no interrumpida. A las 18:45 horas de este miércoles, la ministra Isabel Celaá aclaró los términos del acuerdo entre comunidades y administración central. Aquí las principales claves:

¿Se ha consensuado un aprobado general?

Tanto Isabel Celaá como el secretario de Estado de Educación, Alejandro Tiana, han insistido en su rechazo al aprobado general como fórmula. Una herramienta que resta valor a aquello que "el estudiante haga o deje de hacer", de manera que se trata de una "medida que no es ni pedagógicamente justa ni eficaz", ha dicho el secretario. En los mismos términos se ha expresado la ministra: el aprobado general "sería una medida injusta" y además "hay alumnos que se esfuerzan porque quieren desarrollar destrezas en el ámbito cognitivo".

Por contra, ha explicado la ministra, la intención de la administración educativa pasa por "adaptar la evaluación, promoción y titulación" con el "objetivo prioritario" de que los estudiantes "no pierdan el curso y puedan avanzar". En ese sentido, se mantiene la evaluación continua, pero se "acentuará su carácter diagnóstico y formativo en todos los ciclos y enseñanzas". Que los alumnos puedan superar el curso será "la norma general", de manera que la repetición se conjugará únicamente como excepción.

¿Hay posibilidades de repetir curso?

Este extremo, el de la repetición de curso, ha sido otra de las claves perfiladas por el Ministerio de Educación. Lo cierto es que la ministra ha mantenido firme su apuesta por evitar la repetición, una asignatura pendiente del sistema educativo español. "La repetición será una medida muy excepcional, que deberá estar sólidamente argumentada y con un plan preciso", ha detallado la ministra. Ha insistido asimismo en que el tercer trimestre tendrá un "valor de diagnóstico y formativo", pero "nada impide que pueda haber una actividad de evaluación" que permita a aquel alumno con peores notas encauzar su trayectoria y obtener buenos resultados.

El secretario, en añadido, ha recordado que "la práctica de la repetición" está "muy arraigada" en el país, pese a ser "muy rara" fuera de las fronteras estatales. "La mayoría de los países del entorno" se apartan de este instrumento porque "hay otras maneras de recuperar" conocimientos que no pasan por la repetición. Además, ha resaltado, la propia legislación educativa así lo recoge, de manera que "el principio de la recuperación ya lo tenemos, los profesores lo conocen y saben cómo trabajar con él".

¿Qué pasa con la titulación?

Si bien la recuperación se entreteje como opción viable para los alumnos de enseñanzas no universitarias, ¿qué ocurre con aquellos que aspiren a un título? El estudiantado de 4º de la ESO, 2º de Bachillerato o Formación Profesional busca respuestas ajustadas a sus particularidades y la ministra ha resumido su estrategia en una frase: "La titulación deberá ser la práctica habitual". Todo ello, ha añadido la socialista, "pudiendo organizar recuperaciones extraordinarias".

En todo caso, matizan las autoridades educativas, la decisión final respecto a la promoción y titulación la tomará el claustro de profesores en su conjunto. Ahí también se ha detenido Alejandro Tiana: "Las personas que mejor conocen cuál es el desarrollo de cada joven son sus docentes, los profesores que cada día han trabajado con ellos. Ellos tienen que tener la confianza de la comunidad educativa, de los padres y de las administraciones educativas para saber que lo que están haciendo es serio, capacitado y responsable".

¿Cuál será el contenido del tercer trimestre?

El tercer trimestre que echa a andar en medio del estado de alarma "se aprovechará para la recuperación, el repaso y el refuerzo con actividades globalizadoras e interdisciplinares y debidamente tutorizadas". Este último trimestre, por tanto, quedará marcado por la flexibilización del currículo y las programaciones didácticas. "Hay que centrarse en los aprendizajes y competencias imprescindibles, cuidando de no sobrecargar al alumnado con tareas excesivas", ha trazado la ministra.

En el caso de que se mantenga la formación a distancia, en añadido, "se movilizarán los recursos y medios de apoyo necesarios para que el profesorado desarrolle su labor en las mejores condiciones posibles".

¿Qué ocurre con las familias sin recursos?

Es otra de las grandes cuestiones en las que ha querido centrarse la responsable del Ministerio de Educación. "Las administraciones y centros educativos harán un especial esfuerzo por identificar al alumnado que no está conectado y prepararán planes específicos de recuperación del vínculo escolar y de refuerzo que les ayuden a reincorporarse a la actividad educativa tan pronto como sea posible", se compromete el departamento.

En ese sentido, Celaá ha garantizado un "esfuerzo por atender a estudiantes con dificultad en el acceso y uso de dispositivos digitales". Todas las comunidades, ha dicho, junto a la administración central, son "perfectamente conscientes" de la desigualdad en el acceso a contenidos digitales, debido a "la brecha digital o brecha social", por lo que asumen la responsabilidad de reforzar todas las herramientas posibles para que nadie se quede atrás.

¿cuándo y cómo será la selectividad?

En cuanto a la EvAU, tal y como se acordó en la anterior conferencia sectorial celebrada a finales de marzo, la prueba de acceso a la universidad "se celebrará entre el 22 de junio y el 10 de julio en convocatoria ordinaria y antes del 10 de septiembre en convocatoria extraordinaria", siempre que la evolución de la pandemia así lo permita. Estará marcada además por una "opcionalidad más abierta", con mayores alternativas en su modalidad para que los alumnos tengan margen de elección. Esta decisión no implica, han insistido los responsables educativos, que se estructure como "una prueba más fácil".

¿en qué mes finalizará el curso?

El Ministerio de Educación ha resuelto, junto a las comunidades, conservar por tanto la actividad educativa del tercer trimestre manteniendo el fin del curso escolar en junio. "El curso no se prolongará más allá del mes de junio" y durante los meses de verano "las administraciones organizarán o apoyarán la realización de actividades de refuerzo voluntarias".

En julio, ha dicho Celaá, "si las normas sanitarias lo permiten", la intención de la administración será acometer un "gran movimiento de apertura" que promueva "posibilidades de ocio y trabajo en materias de conocimiento para los alumnos, especialmente los de mayor vulnerabilidad". Estas actividades, sobre las que no se ha dado mayor detalle, cabalgarán entre el conocimiento y el ocio, especialmente las prácticas deportivas.

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¿Cómo afectará esto al curso 2020-2021?

El próximo curso, ha subrayado Isabel Celaá, se preparará en conjunto con las administraciones, los centros y el profesorado, a través de "planes de recuperación y adaptación del currículo para permitir el avance de todo el alumnado".

Es decir, el curso 2020-2021 servirá también para "reforzar las materias que no han podido ser trabajadas" como consecuencia de la pandemia. Este objetivo, de hecho, servirá para revisar un currículo "extraordinariamente enciclopédico" y trabajar en "contenidos, aprendizajes y competencias esenciales", en este caso aquellas que "no han podido ser cubiertas adecuadamente al final del curso 2019-2020".

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