A las ocho y media de la mañana ya ha desayunado y da vueltas por la casa con una camisa blanca y una americana gris puestas. Está un poco nervioso. La pequeña de sus tres hijos se ha ido hace un rato a ver al rey. Su nieta sigue dormida.
Suso Díaz no quería viajar a Madrid por miedo al coronavirus, pero en el fondo se alegra. El trayecto desde Oleiros (A Coruña) lo hace en coche junto a un compañero de Comisiones Obreras, el sindicato del que fue durante años máximo dirigente en Galicia. Lleva a mano el justificante que le acredita como invitado a un acto oficial. En total, casi seis horas de autovía para cumplir con la petición expresa de la nueva vicepresidenta tercera del Gobierno de España: estar cerca de su padre el día de la toma de posesión para poder darle las gracias en persona.
Yolanda Díaz está nerviosa. Se le nota en el tono de voz y en que lee cada palabra de su discurso, algo poco habitual en ella. “Me ha gustado que se haya dirigido a mí en galego porque soy hijo de campesinos y el galego lo aprendí en el campo”, dice el padre.
Cuando se refiere a él, la hija levanta la mirada y lo busca. Y se traga las lágrimas igual que unos minutos antes, cuando el ya exvicepresidente le entrega su nueva cartera. Ella la coge con una mano, pero con la otra le agarra de la manga de la americana como pidiéndole un abrazo.
En su intervención, la vicepresidenta tercera le muestra especial gratitud a su “querido Pablo Iglesias”, el hombre que la ha señalado como sucesora en el Consejo de Ministros y, aunque ella no quiera ni escucharlo, también como candidata. Desde este momento, será ella quien lidere una de las dos partes del Gobierno de coalición que gestiona la mayor crisis social y económica del siglo, quien departirá cara a cara con el presidente los asuntos más relevantes y quien construirá, seguramente escoltada de cerca por otros compañeros, el futuro de un espacio político marcado en los últimos años por el hiperliderazgo de Pablo Iglesias.
La también ministra de Trabajo no hace demasiada mención a ese poder recién adquirido. El foco lo pone en las que hasta ahora han sido sus competencias, las que se resistió a perder aunque ello le costase los rangos que fueran necesarios en el orden de las vicepresidencias. Ahora, ante la batalla política de la reforma laboral que tendrá que librar en breve en el seno del Gobierno, lanza un aviso: “Nada se construye sobre la desigualdad y la precariedad. No estaríamos aquí si no fuese por las personas trabajadoras de este país. A ellos nos debemos, a ellos me debo”.
Cuando al histórico sindicalista gallego le preguntan si se ha emocionado escuchando a su hija contesta que “sí, un poquito, pero sin pasarnos”. Según quienes lo tenían cerca, disimula. “Bah, se hace el duro”, sostienen. Pero él se esfuerza en normalizar todo lo que le está pasando a la nueva vicepresidenta. “Claro que estoy orgulloso de ella, pero igual que de los otros dos hijos. Y estoy orgulloso porque son buenas personas, no por los cargos que tengan. Si Yolanda deja la política mañana, también seguiré estando orgulloso de ella”.
En realidad, ese empeño en quitarle hierro parece una manera de intentar protegerla. Y por eso le gusta que Pablo Iglesias siga ejerciendo el liderazgo político del partido. Quizás así, quiere pensar, ataquen menos a su hija y le hagan menos daño.
Pregunta clave: ¿cuál es la virtud que hace que la ministra de Trabajo haya conseguido poner de acuerdo ocho veces a patronal y sindicatos en un momento de polarización extrema? “Ten en cuenta que yo llegué a firmar varios acuerdos con Fraga, siendo yo un sindicalista que había estado en la cárcel durante la dictadura de la que él fue ministro. Así que le viene de familia”, relata el exdirigente de CC.OO.
Suso Díaz echa de menos a Carmela y a Yolanda y no esconde que le encantaría que volvieran a Galicia, aunque sabe que es algo cada vez más difícil. Puede que por eso le aconsejara en su día no venir a Madrid y centrarse en la política gallega. También cuenta que la llama poco “por no dar la tabarra”. De hecho, la mañana en que se enteró de que iba a tener una hija vicepresidenta tan solo le mandó un mensaje, muy breve, que decía: “Noraboa, vice!”
Cuando acaba el acto de toma de posesión se pone en marcha para volver a Oleiros. Apenas tiene un momento para despedirse de su hija que, poco antes, desde el atril, ha citado a Saramago: “Somos la memoria que tenemos y la responsabilidad que asumimos”. Casi todos los que la conocen tienen claro que, a estas alturas, es muy probable que la hija de Suso haya asumido ya más responsabilidades de las que ella misma es todavía consciente.
Todo nuestro apoyo a Yolanda Díaz. Esperamos de ella, firmeza y dureza contra los que se dedican a insultar y mentir. NO TE DEJES AMEDRENTAR, por estos cavernicolas, ignorantes y chulos. Ojala y te veamos con respuestas contundentes y hablando en el Congreso de las cosas importantes que nos interesan a los ciudadanos. Gracias por estar ahí.
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Enhorabuena Jose Enrique Monrosi, has transmitido no el acto, sino algo mas difícil de escribir que es la emoción que se respiraba en el acto y las emociones del entorno familiar de la Vicepresidenta. No ha hecho falta ver un video, lo has trasmitido letra a letra.
Así como no vas a ser del Betis!!
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NORABOA VICE QUE LA INTELIGENCIA LA FUERZA TE HAGAN DEFENDER A LOS MAS DEBILES Y DEBES DE SABER QUE TIENES MUCHA GENTE QUE ESTEMOS DONDE ESTEMOS LUCHAREMOS POR LA JUSTICIA Y POR LA VERDAD SALUD PARA TI Y TODOS TUS SERES QUERIDOS Y FUERZA PARA RESISTIR TODO LO QUE TE ESPERA
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Estoy hasta los cojones del "hiperliderazgo" de unos, de uno más concretamente, y en cambio, de cómo se soslaya la influencia de los demás Secretarios Generales y Presidentes de otros partidos del arco parlamentario, actuales y pasados, donde, no parece que había ni tan siquiera "liderazgo", ya no HIPER....
No sé, pero que no se confíe Pablo Iglesias, si piensa que con éste movimiento de renuncia a la Vice-Presidencia va a dejar de ser la presa preferida de éste tipo de periodistas de "investigación", NO, seguirán pisando, insultando y menospreciando hasta que desaparezca de la faz de la Tierra.
Es el precio por atreverse a denunciar lo que muchos o casi todos denunciamos.
En cuanto a Yolanda Diaz, que se prepare, todo lo que ahora puedan ser halagos y caricias, pronto se tornarán en insultos y descalificaciones, para eso está la banda de sinvergüenzas que dicen ser periodistas, pero que yo defino como "periomierdas".
Pronto aparecerá por éste medio María LLapart, Cristina Pardo y alguno/a más, y si no, tiempo al tiempo.
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Ocultar 7 RespuestasNo es nuevo, siempre que hay periodo electoral la tendencia clara es un empujoncito y otro y otro más al PSOE... de ahí el desprecio por el resto de izquierdas a la izquierda de chichinabo
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Ocultar 6 RespuestasEternamente Yolanda
No todos los carnés del viejo Partido Comunista están en el Rastro perdidos entre otros cachivaches, porque la nueva vicepresidenta conserva uno. Del PC, igual que de los sacramentos, podemos afirmar que imprime carácter aunque se forme parte de un cajón de sastre como Unidas Podemos. Yolanda Díaz es oriunda de Astano, y Pablo Iglesias, de la Complutense. Una se cría en medio de sindicalistas, y el otro con abstrusos teóricos de la revolución pendiente. Son muy distintos. Para sobrevivir ella se va adosando a sucesivos movimientos, como el nacionalismo de Beiras, el populismo de Iglesias y quizá en el futuro el sanchismo de Sánchez. Sus antiguos sherpas van quedando atrás, pero ella prosigue la escalada sin perder su perenne sonrisa. Ahora, con un estilo muy monárquico, el rey del populismo se convierte en emérito, abdica y cede el trono a alguien que procede de la vieja política. Difícil saber si Yolanda será o no la enterradora del experimento morado. No hay duda, sin embargo, de que sobrevivirá. ¿Al lado de quién?
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Ocultar 5 RespuestasA ver, Rumplestiltskin, que habrá que hacer para librarla de tu maldición.
Por lo menos procura ser preciso, yolanda nunca trabajó en Astano, en cuanto a la crianza tanto ella como Pablo fueron a la universidad y los ambientes en los que se criaron, el padre de Pablo es más parecido a ti y Suso más sindicalista.
No te parece que tu gran experiencia deberías usarla para algo más serio y productivo, a lo mejor una crítica oportuna, hasta le sea de gran ayuda en su momento, pero los vaticinios, no hablan más que de miserias (propias).
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Decir que, alguien que ha llegado a Ministra de Trabajo, se ha curtido en el sindicalismo es una garantía y además lo ha demostrado con creces al poner de acuerdo a representantes de los trabajadores y a los empresarios en un tiempo en el que, el PP, por su declaro antipatriotismo español en Europa ha perdido la confianza del empresariado al intentar vetar el dinero para el rescate de la Economía.
Decir que Iglesias se ha curtido entre los intelectuales de la Complutense, es otro elogio, no viene de Harvaravaca, ni del Pilar o de la URJC, sino de la cuna, junto a la de Salamanca, de sapiencia histórica española.
Cuando una persona llega a una cierta altura cultural, siempre es porque se ha apoyado en otras personas, otros maestros a los que dejan atrás, esa es la verdadera evolución, así se consigue el progreso.
Su comentario rezuma mala intención e incomprensión por lo que consiguen los demás con su esfuerzo.
¡Cuídese!
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Aquí, en España, los que más han practicado el populismo ni siquiera lo esconden. Está en su propio nombre: Partido Popular.
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Los dos, Yolanda y Pablo, reclaman una sociedad más justa, sin las desigualdades actuales y el previsible incremento, gracias entre otros, a los que se dedican a menospreciar a quienes luchan por las personas, siempre sembrando la duda y la descalificación.
Si veo algún carnet del PCE por ahí, quién sabe, quizás lo compre, lo que no haré será comprar uno que ponga "socialista y obrero", y se ría de ellos a la cara.
Con o sin carnet, hay dos grupos de personas, los que están satisfechos con el estado actual de nuestra sociedad, con los abusos del poder económico, con una Justicia politizada, con mucho sinvergüenza aprovechándose de los más débiles, y los que que creemos que otra sociedad es posible, más igualitaria, más solidaria y más humana, y fíjese que ni menciono a la República, porque eso sería secundario si tuviéramos lo otro.
Desgraciadamente no tenemos ni lo uno ni lo otro, así que siga buscando en el Rastro....
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Su odio emponzoñado contra Yolanda Díaz delata su misoginia y una envidia de sus exitos enfermiza, le ha acusado usted machaconamente de todo lo peor que se puede difamar contra una luchadora brillante, gran trabajadora, constante en sus objetivos que, mire usté, son los de millones de ciudadanos de este país. Siga escupiendo sus nauseabundas bilis, que solo le harán caso quienes comulguen con sus escupitajos.
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Mucho tendría que cambiar la mentalidad de muchos trabajadores para que Yolanda Díaz fuera Presidenta, hay mucho seguidismo y pasta y la mentalidad que voy a decir.
De todas formas es un acontecimiento que se debe celebrar y mi voto no le va a faltar.
Ya estarán las cloacas y sus periodistas dirigidos por Inda a ver qué sacan o qué palos poner.
Suerte y gracias por tu trabajo Ministra
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www.infolibre.es ISSN 2445-1592
Para mi la mejor de todo el gabinete. Sabe conciliar, argumentar y trabajar. De ahí sus buenas relaciones parlamentarias con todo el mundo. hasta con los del Pp, que ya hay que tener valor.
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