Homofobia

Vox relaciona el último ataque con la inmigración mientras Ayuso y Almeida evitan culpar a los discursos de odio

El alcalde de Madrid, José Luis Martínez-Almeida, y el secretario general de Vox, Javier Ortega Smith, el pasado mes de junio en Madrid.

Vox ha relacionado este lunes la última agresión homófoba en Madrid con la inmigración ilegal. Tanto el líder del partido ultraderechista, Santiago Abascal, como el secretario general del partido, Javier Ortega Smith, han condenado este martes la "brutal agresión homófoba" sufrida por un joven en Madrid . Luego han venido los "peros". Abascal, por ejemplo, ha enmarcado el suceso en una "oleada de violencia e inseguridad" que "se ha adueñado" de las calles de España y que denuncia que en parte es silenciada para no hablar del origen de sus agresores. "Me llena de rabia la brutal agresión homófoba que ayer sufrió un joven en el portal de su casa en Madrid", ha asegurado en una serie de comentarios publicados en su cuenta personal de Twitter. Para a acontinuación añadir: "Palizas a la salida de discotecas, peleas entre bandas, asaltos en el Metro, robos brutales, navajazos o violaciones grupales silenciadas". Sucesos que, según Abascal, silencia el "consenso progre" y sus "lacayos mediáticos".

Javier Ortega Smith ha sostenido que "donde esa inmigración ilegal es mayor, se está produciendo violencia por provinientes del Magreb contra mujeres, a quienes obligan a ir a cinco o diez pasos por detrás. Nosotros denunciamos esa violencia", ha declarado en una entrevista en La mañana de la 1. Tras insistirle en si en Vox entienden el ataque en Malasaña como violencia homófoba, el edil ha contestado: "Perfecto, pues lo es y evidentemente hay que denunciarlo, como hay que denunciar que rompieran a una chica los dientes en el Metro hace unos días, a las manadas de jóvenes que agreden a chicas o que peguen una paliza a un chico por quitarle un móvil", ha defendido.

El alcalde de Madrid y portavoz nacional del PP, José Luis Martínez-Almeida, ha tratado de ser tajante sobre este asunto en una entrevista en la Cadena Ser: "Madrid debe ser una ciudad libre de violencia homófoba, machista", y ha expresado el compromiso "firme e inequívoco" del equipo de Gobierno para su erradicación. Sin embargo ha evitado relacionar el suceso con los discursos de odio de Vox. El regidor considera "excesivo" indicar que Vox "puede estar detrás" de agresiones al colectivo LGTBI debido a sus "mensajes", para después aseverar que en la ciudad de Madrid "no caben este tipo de delitos" y ha deseado que los Cuerpos de Seguridad "atrapen pronto a estos indeseables".

Por su parte, la presidenta de la Comunidad de Madrid, Isabel Díaz Ayuso, ha condenado "radicalmente" la "gravísima" agresión homófoba, pero sin señalar el componente de odio: "Claro que lo condeno. Condeno todos los ataques a cualquier persona por el motivo que sea pero, además, en este caso es gravísimo por el trato que se le ha dado", ha manifestado, en declaraciones a los periodistas a la entrada del acto de apertura del curso universitario en la Universidad Carlos III de Madrid.

El Gobierno condena la agresión y la pasividad del PP ante los discursos de odio

PSOE y Unidas Podemos han condenado sin paliativos la agresión y han llamado la atención al PP por su permisividad con los mensajes discriminatorios sembrados por Vox.

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La secretaria general de Unidas Podemos, Ione Belarra, ha acusado los conservadores de "quitar hierro" a los "discursos de odio de la ultraderecha". Tras las dos brutales agresiones LGTBIfóbicas en solo 24h el PP decide quitarle hierro a los discursos de odio que la ultraderecha lanza a diario", ha escrito Belarra en su perfil de Twitter. La ministra de Igualdad, Irene Montero, se ha manifestado en la misma línea: "Excesivo blanqueamiento. Excesiva LGTBIfobia", ha publicado en la red social.

La vicesecretaria general del PSOE, Adriana Lastra, ha cargado contra las declaraciones de Ortega Smith. La dirigente socialista ha defendido que en las agresiones a personas LGTBI "el problema no es el origen, es la homofobia" y ha recordado a la formación de Santiago Abascal que en el caso del asesinato de Samuel fue un inmigrante en situación irregular quien trató de defenderle mientras que los detenidos "son todos españoles".

El portavoz adjunto del grupo socialista en el Congreso, Felipe Sicilia, se ha sumado a las críticas y ha acusado a Vox de "apuntar" con sus discursos de odio hacia colectivos vulnerables como los migrantes para responsabilizarles de las agresiones homófobas como la ocurrida en el barrio madrileño de Malasaña. "La extrema derecha apunta a quién hay quien mirar y algunos pasan de la mirada a los hechos que suponen agresiones como la que sufrió este chaval (en Malasaña) e incluso la muerte como la de Samuel hace unos meses", ha indicado el dirigente socialista.

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