De series

'El cuento de la criada', algo más que ciencia ficción para Pepa Bueno

La presentadora de 'Hoy por Hoy' en la Cadena Ser, Pepa Bueno.

Pepa Bueno (Badajoz, 1964) es periodista, una de las voces más reconocibles de nuestra radio. Desde 2012 ha conducido el programa más escuchado de las mañanas, Hoy por Hoy, en la Cadena Ser, y a partir de septiembre dirigirá el vespertino Hora 25. Bueno participa en De series, dentro de la revista Verano libre, en la que de lunes a viernes a lo largo de agosto preguntamos a políticos, politólogos y periodistas sobre las producciones que más y que menos les han gustado. Su serie favorita de la temporada es Chernobyl, pero El cuento de la criada atrapó su atención mucho antes incluso de que existiera en televisión.  

El cuento de la criada construye una de las historias más importantes de los últimos años. También lo cree así Pepa Bueno, que tiene a su primera temporada —acaban de emitir la tercera— como uno de sus productos televisivos favoritos. La serie, producida por Hulu y ahora en HBO, y protagonizada por Elisabeth Moss —a quien ya vimos en otras producciones como Mad Men o en Top of the lake—, sigue cosechando éxitos. La novela de Margaret Atwood ya causó más de un escalofrío cuando se publicó hace más de 30 años, en 1985. Así le pasó a la periodista: “Había leído el libro de Margaret Atwood en su día, siendo muy jovencita, y me pareció ciencia ficción, algo imposible”.

Ahí juega su papel la ficción: en trazar las posibilidades de lo real. Y esta serie, que puede funcionar como una suerte de revulsivo —aunque trabaje en el plano de la distopía—, explica muchos de los problemas de nuestro tiempo, donde las mujeres forman fila como protagonistas indiscutibles. Y no sólo las mujeres, sino también la cruz de los autoritarismos, que muchos años después vuelven a tocar las puertas de la opinión pública. No cabe duda, para Pepa Bueno El cuento de la criada es un must: “Al ver la serie en 2017, sólo tres décadas después, comprobé dolorosamente que la historia original estaba llena de señales y metáforas que anticipaban el tiempo presente. Y me pareció un aldabonazo”.

Y en otro mundo horrible: Chernobyl, sin dudauno de los campanazos televisivos del año. Aún es pronto para anticipar qué huella de recuerdo dejará dentro de un tiempo, pero desde luego su camino no ha sido el de la indiferencia. Para la periodista, el accidente de Chernobyl es “uno de los horrores del siglo XX menos contados”, más allá de documentales o célebres libros como el de la premio Nobel de Literatura Svetlana Alexiévich. Pero hacer una serie sobre un accidente nuclear no tiene por qué garantizarte el éxito. Ahí intervienen otros colores y, a la vista de los resultados y de la crítica, la miniserie coproducida entre HBO y la británica Skylos tiene todos, también para Pepa Bueno, que valora más que positivamente la producción: “Se aborda con un hiperrealismo, una sobriedad y una calidad artística que te dejan sin respiración”.

Chernobyl no abusa de una banda sonora, no distrae, no ahonda en las cuitas personales de cada uno de los protagonistas para rascar en la empatía del espectador. Simplemente se sirve de sus personajes para contar una historia, que, al contrario que en narrativa, no rebusca ni araña el suelo para explicar lo posible, sino lo real. Porque, a fin de cuentas, Chernobyl es un drama histórico, pero hace olvidar los privilegios de la ficción. Además, su visión no es frenética, sino pausada, digerida, algo que consigue en tan sólo seis capítulos: “Al contrario de la mayoría de las series que veo en modo atracón de fin de semana, en esta tenía que espaciar el visionado de los capítulos, porque uno solo me dejaba una impresión tan desasosegante que necesitaba tiempo para empezar el siguiente”.

Juan Marín se queda con 'House', una de las pocas series con las que resiste al sueño

Juan Marín se queda con 'House', una de las pocas series con las que resiste al sueño

Por último, hay dos series que no han conseguido iluminar lo suficiente la pantalla de la periodista, pero por distintas razones. Por un lado, Westworld, que nace entre los brazos de HBO como otra superproducción y que tiene visos de ocupar poco a poco el vacío que deja la ya terminada Juego de Tronos —Westworld es uno de los productos más caros de la productora, con 10 milones de dólares de coste por capítulo. A Pepa Bueno le aburrió “enseguida”, como confiesa. Esta serie sobre un futuro también un tanto distópico se sirve de la tecnología para presentar algunos dilemas morales, como las incógnitas que presentará —y ya presenta— la robótica. Westworld, con muchísimos recursos, un elenco envidiable —Ed Harris y Anthony Hopkins, sin ir más lejos—, entrevera tramas complicadas, personajes que se confunden, se duplican, pero el resultado, para muchos, es más que satisfactorio —el año pasado fue la segunda serie más nominada en los Emmy, sólo por detrás de la saga de George R. R. Martin—. Por ahora sólo tiene dos temporadas, y todo pinta a que crecerá todavía mucho más, de hecho ya se está rodando la tercera.

También, la periodista tiene, no abandonada, sino sólo pendiente, a medio ver, The Crown, otra superproducción que esta vez apadrina Netflix y que es además la más cara de la plataforma. Esta serie narra la vida de la reina Isabel II de Inglaterra y las relaciones entre el 10 de Downing Street y el Palacio de Buckingham. No aburrió a Pepa Bueno, pero otras series se le atravesaron. Aun así, ella reconoce que le cuesta abandonar una serie: “Veo las muy recomendadas por gente de cuyo criterio me fío, el tiempo es escaso y voy a tiro hecho”. 

 

Más sobre este tema
stats