De los 167 escaños de enero a los 188 de los Presupuestos: Sánchez consolida sus apoyos a la espera de que Cs salga de 'la foto de Colón'

"Realizada la votación, la Presidencia informa de que el resultado ha sido el siguiente: votos emitidos, 350; a favor, 167; en contra, 165; abstenciones, 18. Al haberse alcanzado el voto favorable de la mayoría simple de los miembros de la Cámara, declara otorgada la confianza al candidato don Pedro Sánchez Pérez-Castejón, lo que comunicará a su majestad el rey a los efectos de su nombramiento como presidente del Gobierno". El diario de sesiones del Congreso de los Diputados del 7 de enero de 2019 refleja así cómo el líder de los socialistas se pone al frente del primer ejecutivo de coalición de la democracia española.

Esta misma semana, casi un año después, la Cámara Baja registraba otro marcador histórico para PSOE y Unidas Podemos, el de la aprobación de sus primeros Presupuestos, los que ponen fin a dos prórrogas de los del conservador Cristóbal Montoro. Once partidos –PSOE, Unidas Podemos, ERC, PNV, EH Bildu, PDeCAT, Compromís, Más País, Teruel Existe, Nueva Canarias y el Partido Regionalista de Cantabria–, que suman 189 escaños, decidieron estar en el bloque del 'sí' y permitieron que las cuentas públicas inicien su viaje al Senado. Son 13 escaños más que los 176 en los que está ubicada la mayoría absoluta. Si bien estas once formaciones suman 189 escaños, la votación que más se repitió fue la de 188 escaños. No existe una votación de conjunto del proyecto de Presupuestos donde se manifieste el sentido del voto definitivo de cada grupo parlamentarios.

Comparando los 167 escaños a favor –hubo 18 abstenciones– con los 189 de los grupos que se mostraron a favor de los Presupuestos, en menos de un año, el Gobierno de coalición ha logrado reforzar sus apoyos en 22 parlamentarios. Sin descartar acuerdos con Inés Arrimadas (Ciudadanos, 10 escaños), en La Moncloa pretenden hacer de la mayoría de las cuentas públicas un bloque sólido para esta XIV Legislatura. 

"Horas y horas de negociaciones"

"Hemos pasado de estar a punto de perder en las dos últimas prórrogas del estado de alarma de la primera ola a superar una moción de censura sólo respaldada por la extrema derecha", resume un dirigente socialista la trayectoria parlamentaria de Sánchez como presidente del Gobierno. 

En La Moncloa estos días se intenta poner en valor todo "el trabajo", las "horas y horas de negociaciones" que han mantenido miembros del Gobierno y de los grupos parlamentarios socialista y de Unidas Podemos para lograr esa amplia mayoría. E insisten en que pese a que desde la derecha se reste valor a lo ocurrido este jueves en el Congreso, "ha costado".

"En plena primera ola del covid-19, cuando se sucedían los estados de alarma, [Pablo] Casado (Partido Popular) se cansaba de decir que a Sánchez le quedaba poco en el Gobierno, que tenía los días contados. Ahora, hasta el PP ha asumido que vamos a agotar legislatura", considera una diputada de la bancada socialista.

Casado asume que la legislatura será larga

Cuando el jefe de los conservadores y su equipo más próximo abonaban la tesis de que la crisis económica ligada al covid-19 iba a llevarse por delante al Gobierno de coalición porque Sánchez e Iglesias iban a discrepar sobre la forma en la que hacerla frente y el uso que dar a los fondos europeos para la recuperación, al Gobierno le estaba costando realmente sacar adelante las prórrogas del estado de alarma. La última ampliación de esta herramienta excepcional durante la primera ola tuvo lugar el 3 de junio y salió adelante con 177 votos a favor, igual que la quinta. En ambas, el Partido Popular se decantó por el 'no' en debates que los conservadores se tomaron como una especie de moción de censura a Sánchez. En la cuarta, que salió adelante con 178 votos a favor, el PP se abstuvo. Fue a partir de esta cuando en el Gobierno empezaron a encenderse las alarmas y el temor a empezar a perder votaciones. Hasta ese momento, el apoyo más reducido que habían recibido en el Gobierno fueron los 269 'síes' de la tercera prórroga –en la primera fueron 321 votos y 270 en la segunda–.

La prórroga del estado de alarma del 3 de junio supuso un punto de inflexión. Desde ese momento, con la excepción del real decreto de los ayuntamientos, el Gobierno de coalición ha salido de los grandes debates con amplio apoyo parlamentario. La moción de censura que le planteó Vox sólo contó con los votos a favor de los 52 diputados de la extrema derecha. Fue derrotada, pues, con 298 votos en contra.

Pese a las críticas por la amplitud del plazo de la prórroga del estado de alarma en vigor, hasta el 9 de mayo, el Ejecutivo logró 194 votos a favor de la medida. El PP se abstuvo, lo que dio pie a que desde el Gobierno se cuestionara el supuesto giro al centro que Casado habría intentado plantando cara a Santiago Abascal en la moción de censura.

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Sobre el papel de Ciudadanos, en el Gobierno intentan combinar estos días dos mensajes: el de que vuelve a la foto de Colón, por haberse desmarcado del 'sí' a los Presupuestos. Y, más en privado, el de que Sánchez en absoluto tira la toalla de ampliar esos 189 escaños de los Presupuestos en lo que resta de legislatura. Inés Arrimadas, pues, podrá llegar a acuerdos con el Ejecutivo en los próximos meses y en lo que resta de legislatura y "apartarse de la foto de Colón", un camino que emprendió en los primeros meses del estado de alarma. 

En el Ejecutivo llevan una semana insistiendo en que el presidente no ha escogido entre las exigencias de Ciudadanos y las de Esquerra Republicana de Catalunya y las de EH Bildu, sino que su elección ha sido "Presupuestos", partiendo de la base de que son necesarios.

Este mismo viernes, desde Comillas, reivindicó la mayoría de 188 diputados de once formaciones distintas que apoyaron la aprobación en el Congreso de los Presupuestos y apostilló que lo inexplicable es que haya habido formaciones que no hayan respaldado unas cuentas que son, a su juicio, "necesarias como el aire que respiramos".