El futuro del PSOE

La batalla del PSOE: celebrar el congreso en abril o retrasarlo hasta el verano si hay nuevas elecciones

El PSOE decidirá la fecha de su próximo Congreso en un Comité Federal a finales de enero

Ibon Uría

El PSOE tiene aún pendiente fijar la fecha de su próximo Congreso Federal y el asunto sigue provocando tensiones internas. En el partido se da por hecho que la dirección convocará para finales de enero el Comité Federal que decidirá los plazos del congreso, o lo que es lo mismo: el cónclave en el que Pedro Sánchez aspira a revalidar su liderazgo. Y sobre la mesa hay dos grandes opciones: la primera, que esa cita tenga lugar a finales de marzo o a principios de abril. La segunda, si se repitieran las generales, es retrasarlo hasta el verano. Esta última posibilidad podría dificultar la irrupción de una candidatura rival comandada por Susana Díaz.

La polémica en torno a la celebración del congreso dura ya varias semanas. Horas después del 20-D, cuando los socialistas cayeron hasta los 90 escaños, Sánchez se lanzó y comunicó que quería repetir como líder. Los más próximos al secretario general sostuvieron que con ese movimiento ganaba tiempo tras "salvar los muebles" en las urnas. Los críticos, que con su anuncio puso el foco sobre un debate que "no tocaba", pues el tema principal era entonces la gobernabilidad. Sea como fuere, el enfrentamiento entre el equipo de Sánchez –partidario de alargar los plazos– y los barones críticos –que pedían el congreso "cuando toca"–, fue en aumento.

Esta situación se evidenció en el Comité Federal celebrado el 28 de diciembre. Fue entonces cuando representantes de varias de las federaciones con mayor peso interno –Andalucía, Asturias, Castilla-La Mancha– reclamaron en público y en privado no postergar el congreso. Extremadura también expresó sus "dudas" con respecto a los planes de la dirección. Sin embargo, la resolución política aprobada al final de la reunión se limitó a poner condiciones a un hipotético pacto con Podemos, sin pronunciarse sobre el calendario del partido. La dirección federal lo tomó como una pequeña victoria y la crisis interna entró en una tregua navideña.

Los críticos, a la expectativa

Los roces, en cualquier caso, no se han disipado. Fuentes de los críticos con la actual dirección del PSOE consultadas por infoLibre subrayan que "a finales de enero se tiene que aclarar la fecha" del Congreso Federal. El proceso para fijar el calendario es el siguiente: la ejecutiva de Sánchez convocará un Comité Federal. Ese órgano, a su vez, aprobará la fecha del Congreso, que se celebrará 60 días después. El último de ellos tuvo lugar entre el 3 y el 5 de febrero de 2012 y los estatutos del partido establecen que se organiza como máximo cada cuatro años, así que el cónclave tendrá lugar ya fuera de plazo.

Los cálculos más extendidos apuntan a que el Comité se convocará probablemente para el último fin de semana de enero. Si se suman los dos meses de rigor, el congreso podría ser el primer fin de semana de abril. Varias federaciones expresaron este jueves su deseo de no retrasar la convocatoria: "Estamos abiertos al diálogo, pero los procesos internos no se pueden obviar", señalaron fuentes de los socialistas valencianos próximas a Ximo Puig. "Es evidente que hay que hacer el Congreso", se apuntó desde Extremadura. "No conviene cebar el debate, pero la semana que viene deberían ir aclarándose las cosas", se subrayó desde Castilla-La Mancha.

A la espera de que el equipo de Sánchez mueva ficha y convoque el Comité –es decir, el primer paso para poner fecha al congreso–, los dirigentes preguntados por este diario sostienen que está aparcada la otra vía prevista en los estatutos del PSOE para forzar la convocatoria del congreso: recoger las firmas de un tercio de los aproximadamente 250 miembros del Comité Federal. Aseguran que no se ha iniciado ese proceso, que obligaría a la dirección a celebrar el cónclave.

La clave es la gobernabilidad

Los críticos, además, no creen que la más que probable repetición de elecciones en Cataluña sea motivo suficiente como para retrasar la convocatoria del Congreso Federal. Fundamentalmente porque la fecha que suena como más probable para esos comicios autonómicos es la del 6 de marzo, por lo que no interferiría en exceso con los tiempos de un congreso que se celebrase a principios de abril. Agregan, en esa misma línea, que en las próximas semanas quedará claro cuáles son las verdaderas opciones de formar un Gobierno que tiene Pedro Sánchez. Y que en función de si logra una mayoría o hay nuevas elecciones, habrá que decidir el calendario interno del partido.

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Mientras tanto, Ferraz mantiene como primer objetivo llevar a Sánchez a la Moncloa. El propio secretario general, este jueves de visita en Portugal, subrayó que rechaza la gran coalición con el PP y que si Rajoy fracasa en su intento de lograr la investidura está dispuesto a tender la mano a "todas las fuerzas progresistas", tanto "a izquierda" como "a derecha", para gobernar. Tras reunirse con el primer ministro luso, António Costa, Sánchez apostó por "una gran coalición para un Gobierno con fuerzas progresistas" y opinó que "las fuerzas del cambio tienen que entenderse para poder gobernar" porque, cuando lo hacen, "se multiplican los beneficios para todos los ciudadanos".

El equipo más próximo al secretario general considera que el debate sobre la fecha del congreso "se ha enfriado algo", lo cual es de "sentido común", en palabras de un dirigente próximo a Sánchez, ya que la "cuestión principal es la gobernabilidad" y el calendario orgánico debe ser "compatible" con esa cuestión, un diagnóstico compartido con las federaciones críticas. Estas últimas son las que subrayan que la dirección federal baraja aplazar el congreso a después de unas hipotéticas nuevas elecciones generales.

Esa opción permitiría a Sánchez conservar la Secretaría General hasta pasar la nueva cita con las urnas y facilitaría su deseo de repetir como candidato a la Moncloa. Para la denominación del candidato habría que celebrar primarias, pero varios cargos del partido señalan a este diario que hay más posibilidades de que Susana Díaz se decidiera a dar el paso en un Congreso Federal del partido que en unas primarias a la Moncloa.

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