La situación en el PP

El PP andaluz no logra ponerse de acuerdo sobre su candidato

Un sector del PP andaluz presiona a Rajoy para que anuncie su candidato a la Junta

La semana pasada, Mariano Rajoy frenó en seco el debate sobre la candidatura a la Junta de Andalucía. Un debate, que venía semanas siendo agitado por dirigentes de la formación regional. Fuentes conservadoras mantienen que uno de los principales motivos del golpe en la mesa dado por Rajoy responde a la inexistencia de un cabeza de lista de consenso.

El presidente del Gobierno y del PP, Mariano Rajoy, llegó a su Comité Ejecutivo del pasado lunes con varias cuestiones que inquietaban a los suyos. La primera, los últimos avances judiciales del caso de los papeles de Bárcenas que apuntan a que el partido pagó en negro parte de las obras de la sede nacional del PP; la segunda, dar respuesta a la inquietud desatada tras las numerosas excarcelaciones de etarras en cumplimiento del fallo de la doctrina Parot y, la tercera, fijar una posición sobre el candidato a la Junta Andalucía una vez que el actual líder regional del partido, José Ignacio Zoido, ha anunciado que no será cabeza de lista.

Rajoy dejó que la primera de las preguntas la respondiera la secretaria general, que señaló que todos los gastos del partido en esas obras están perfectamente reflejados en la contabilidad oficial y que está en poder del juez. A la tercera respondió el ministro de Justicia, Alberto Ruiz-Gallardón, poniendo el énfasis en que no cabe insumisión a lo que dicta el tribunal de Estrasburgo. La segunda respuesta se la reservó para sí mismo. El presidente del PP llevaba semanas escuchando a determinados dirigentes del PP andaluz y leyendo en los periódicos que la decisión sobre el rival de la socialista Susana Díaz iba a ser inminente. De hecho, más de un miembro del Comité Ejecutivo Nacional estaba convencido de que ese día iba a haber anuncio de candidatura o de convocatoria de congreso para la designación de un nuevo líder. Unas sospechas que Rajoy frenó en seco en el momento en el que pidió "calma" al propio Zoido y recordó lo que María Dolores de Cospedal llevaba semanas repitiendo en rueda de prensa.

Fuentes conocedoras del contenido de esta reunión señalan que su jefe de filas mantuvo que el partido tiene sus tiempos y que ese debate "no toca ahora". ¿Qué pasó para que el presidente dejara la decisión en el aire mientras la dirección del PP andaluz hablaba de que el momento ya había llegado?

Los dirigentes del partido consultados por infoLibre coinciden en que el principal motivo para que Rajoy no haya decidido impulsar ya el relevo en Andalucía está en la falta de consenso respecto al candidato. En las últimas semanas se habían celebrado reuniones y cruzado llamadas entre la dirección regional y la nacional –Cospedal habría sido la interlocutora–. Y todo apuntaba a que tanto Génova como Andalucía compartían que de todos los nombres que se estaban escuchando el que más consenso generaba era el de José Luis Sanz. El problema, señalan las mismas fuentes, es que al líder del PP le llegaron mensajes de que el consenso no era tan grande y no todas las provincias compartían que Sanz, ahora secretario general de los conservadores andaluces, era el cabeza de lista idóneo.

Sanz cuenta con el respaldo de Zoido y del expresidente del PP andaluz, Javier Arenas. Pero hay quien sostiene que la secretaria general del PP es más partidaria del alcalde de Córdoba, José Antonio Nieto, aunque no se opone frontalmente a Sanz. Este último, a su vez, es respaldado por Sevilla y Jaén. Pero no por el resto de provincias.

En este contexto, la decisión de Rajoy fue la de enfriar el debate antes de generar una crisis interna en esta comunidad en la que no logran tocar poder. Con ello consigue, de paso, ganar tiempo para explorar la posibilidad de mandar a alguno de sus ministros andaluces como candidatos a la Junta

Aguantar cuatro meses en la oposición

Zoido deja la presidencia del PP andaluz

Zoido deja la presidencia del PP andaluz

No obstante, la estrategia del presidente de los conservadores ha provocado el efecto contrario: los partidarios de todos los candidatos que sonaron en su día y que dieron un paso atrás al considerar que el juego estaba sólo entre Nieto y Sanz se ven ahora con posibilidades de pelear por el puesto.

En los últimos meses también se han escuchado los nombres del ministro Miguel Arias Cañete, el secretario de Estado de Asuntos Sociales e Igualdad, Juan Manuel Moreno, la delegada del Gobierno en Andalucía, Carmen Crespo, o la titular de Empleo, Fátima Báñez.

El candidato, según las fuentes consultadas, debería reunir un requisito importante: ser capaz de aguantar cuatro años en la oposición sin abandonar. Andalucía es una plaza difícil para los de Mariano Rajoy. Esta dificultad se ha acrecentado después de que la andaluza Susana Díaz tomase las riendas de los socialistas. 

Más sobre este tema
stats