La sacerdotisa de la electrónica y los puntos cardinales de la emoción

La música fue la primera forma de comunicación entre los humanos. Un hueso golpeando en un tronco hueco, una piedra golpeando sobre otra piedra. Desde ese momento en todo lo que el hombre ha hecho existe la música.

El ritmo está presente en nuestros días. El ritmo que se compone en la cafetería con la máquina del primer café de cada mañana. El ritmo del rodar del metro de estación en estación, planos de sonidos y ruidos que se superponen creando un relieve desigual, en el mapa sonoro de la vida de la gente.

Desde el principio de los tiempos hasta hoy en día, el fuego y la música en el centro de un mundo que se abre al universo desde una caverna al compás del ritmo que marcan las sacerdotisas y chamanes de cada época.

Eme DJ es una de esas sacerdotisas. Referencia desde hace daños en el mundo de la electrónica española. Imprescindible para los carteles de todos los festivales en los veranos de años, todo cambió cuando hizo público la razón de aquello que desde fuera se percibía como la excentricidad de la artista.

Eme DJ es un campo de batallas, en realidad Eme DJ es un ejército en un campo de batalla. La que se disputa en su emocionalidad entre la fuerza incontrolable de la sacerdotisa que hace bailar alrededor de la hoguera de sus mezclas a miles de personas y la sensibilidad extrema de Marta Fierro, la niña gallega que aún habita en su mirada escurridiza, escurridiza y hermosa, hermosa y limpia.

Eme DJ hizo público su problema de ansiedad. Eso dijo con las palabras, aunque contradiciendo a Derrida, cuando sentenció que no hay nada fuera del texto, todo lo que se dice está soportado por una realidad que sustentan como un arbotante el edificio que el mundo ve cuando nos mira. Sus palabras estaban soportadas por el valor de una mujer que se hace fuerte, reconociéndose vulnerable. Que se libera al señalar sus prisiones. Que vence el miedo a ser vista situándose en el centro de las miradas de todo el mundo.

Eme DJ visita nuestro podcast Pecados y Serpientes y nos deja su generosidad al desnudar la parte más íntima de la sacerdotisa. Nos deja pasar al fondo de su emoción en una conversación en la que hablamos de cómo se vive fuera de los márgenes de la normalidad.

Escucha aquí la conversación con Eme DJ en el podcast de “Pecados y Serpientes”

Por su parte, Peninsular es una de esas bandas que se hace en el camino. Habitantes habituales de los circuitos exteriores del indie madrileño, estarán en el cartel de la edición 22 del Zahara Indie, que se celebrará del 14 al 15 de octubre en Zahara de los Atunes (Cádiz).

Las influencias del folk setentero con regusto anglo del cuarteto inundaron la Zahara Sessions de la sala El Sol de Madrid.

Un festival que dura todo el año

El principal objetivo de la cita zahareña es contribuir al fortalecimiento del tejido social de Zahara de los Atunes. Para ello el foco se pone en la lucha contra la estacionalidad y la masificación turística que condiciona a un núcleo de población como Zahara. Desde la organización del festival, y gracias a la implicación y colaboración tanto de la Entidad Local Autónoma de Zahara de los Atunes encabezada por su alcalde Agustín Conejo y por la asociación de comerciantes de Zahara, se busca que la propuesta del Zahara Indie sea un complemento a los conocidos atractivos turísticos de la zona, que año tras año consolidan a Zahara de los Atunes como el destino de vacaciones elegido por miles de personas.

En este sentido, la organización del Zahara Indie, apuesta por la cultura como motor de desarrollo socioeconómico y al margen de los días grandes del festival, que se celebrará fuera de la temporada de máxima ocupación, programa a lo largo de todo el año diferentes citas bajo el nombre de Zahara Sessions, que se celebrarán tanto en Zahara de los Atunes como en diferentes ciudades de toda España.

 El festival de todo un pueblo

Desde el principio, la organización del Zahara Indie ha trabajado por abrir el festival a toda la sociedad de Zahara de los Atunes. La buena acogida que la iniciativa ha tenido en la localidad ha hecho que el Zahara Indie ya no sea una propuesta al uso impulsada por un promotor particular, sino que por el contrario es una iniciativa apoyada por un pueblo entero que se prepara para aportar toda la calidad de sus servicios a la hora de atender a las personas asistentes que se prevé llegarán a Zahara de los Atunes el segundo fin de semana de octubre. En la actualidad Zahara cuenta con unas seis mil quinientas plazas de alojamiento que serán más que suficientes para acoger a las cuatro mil quinientas personas que permitirá el aforo del recinto del festival.

 Un entorno que marca la diferencia

Desde la organización se hace énfasis en el hecho de que la estrella del festival es Zahara de los Atunes. Este punto se asienta en la belleza sin igual del entorno natural en el que se encuentra la localidad zahareña, algo que sin duda sitúa a la propuesta del Zahara Indie en una posición privilegiada con respecto a otros festivales. A esto se une la amplia experiencia y los niveles de calidad de la oferta turística de la localidad.