Los diez partidos firmantes piden acabar con la "imposición legal del castellano" y ampliar su utilización al Congreso, tribunales y televisión pública.
La iniciativa parlamentaria para su debate en el Pleno del Congreso también exige que se garantice el deber de conocer la lengua propia de los funcionarios que presten servicio en dichos territorios.
La organización por la defensa de la lengua catalana ha denunciado este miércoles que las declaraciones del Ministro de Cultura buscaban "fragmentar la lengua".
La localidad de Alguer, ubicada en el litoral noroeste de Cerdeña, sufrió en el siglo XIV una sustitución lingüística cuyos efectos perviven hasta hoy.
Anna Erra ha defendido en el pleno del Parlament que el objetivo de la campaña 'No me cambies la lengua' es "poner fin a la costumbre" de" hablar en castellano con cualquier persona que, por su aspecto físico o su nombre, no parezca catalana".
www.infolibre.es ISSN 2445-1592