Rosell sostiene que en España no hay rebaja de salarios

El presidente de la CEOE, Juan Rosell, sostuvo este jueves que en España no hay rebaja salarial y avanzó que los sueldos crecerán este año el doble que la inflación. Lo hizo en una entrevista en Gestiona Radio, Rosell donde explicó que los salarios se incrementarán en 2014 el 0,6 %. "Si a esto se le llama rebaja salarial, no sé a qué se le llamará incremento", bromeó.

Rosell se refería así a las negociaciones iniciadas este jueves entre patronal y sindicatos para renovar el Acuerdo de Negociación Colectiva así como al informe difundido el miércoles por la OCDE, que señalaba que las rebajas salariales que se han impuesto en los países europeos más afectados por la crisis están mostrando sus límites en la mejora de la competitividad e incluso son contraproducentes porque agravan el riesgo de pobreza. Rosell desautorizó a la OCDE y le recomendó que lea las estadísticas tanto del IRPF como del impuesto de sociedades, "que dicen absolutamente lo contrario". Y agregó que las empresas españolas que tienen beneficios no llegan al 40 %.

Insistió en la necesidad flexibilizar el mercado de trabajo y consideró que otra de las tareas pendientes del Ejecutivo es seguir avanzando en las reformas. "Todos los gobiernos europeos se están quedando cortos. Podrían hacer mucho más de lo que hacen", dijo.

A su juicio, no hay que contentarse con crecer casi un punto y medio y dejar de hacer cambios que ayuden a hacer una Europa más competitiva. Las reformas pendientes, según Rosell, pasan por tener menos leyes más "duraderas y entendibles".

La OCDE cree que bajar salarios sería “contraproducente” y reclama políticas que impulsen el crecimiento

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Cataluña

El presidente de la patronal insistió, en relación a la consulta soberanista de Cataluña, que hay que cumplir las leyes: "Es muy importante no sólo tenerlas sino también hacerlas efectivas".

Lamentó que se afronte este asunto con "algarabía como si fuera una fiesta" cuando realmente están en juego "cosas muy serias" y agregó que los empresarios españoles ven el debate soberanista catalán "con intranquilidad pero también serenos".