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Banca y armas

Activistas denuncian que el Banco Santander financia a empresas de armas españolas con 235 millones

Activistas denuncian que el Banco Santander financia con 235 millones a empresas de armas

Ibon Uría

La campaña Banco Santander sin armas, el Centro Delàs de estudios por la Paz y la ONG Setem denunciaron este viernes que el Banco Santander ha financiado con hasta 235 millones de euros a cinco de las principales empresas españolas de armas. Además, y de acuerdo con un informe publicado por el citado Centro Delàs, la entidad de Ana Patricia Botín ha financiado con otros 1.675 millones, en esta caso de dólares, proyectos relacionados con armamaneto nuclear.

De acuerdo con la información de estas organizaciones, el Banco Santander ha concedido créditos por valor de 186,5 millones de euros entre 2011 y 2015 a cuatro firmas españolas de material bélico. Además, fue el intermediario elegido por Indra para una emisión de bonos y pagarés que en 2013 ascendió a 31,2 millones de euros. Y es tenedor de acciones y bonos de la propia Indra por importe de otros 17,4 millones.

Las sociedades españolas dedicadas a la fabricación de armamento financiadas por Santander son Navantia, Oesia, Sener y Maxam. De acuerdo las informaciones del Centro Delàs, esta última empresa es "uno de los principales fabricantes y exportadores de explosivos y municiones de todo el mundo". Además, sus explosivos podrían haberse empleado en la guerra en Siria, según la organización.

Jordi Calvo, coordinador e investigador del Centro Delàs, afirma que "es probable que el Banco Santander haya financiado la producción de armamento de Maxam que ha acabado en algunos de los conflictos armados actuales, bien sea en Siria o República Centroafricana". "Por eso es importante exigirle la cancelación inmediata de sus inversiones en destinos tan controvertidos", añade.

En lo que respecta a las otras cuatro firmas, Navantia fabrica buques de guerra, Sener está especializada en sistemas de misiles y en sistemas de inteligencia aplicados a éstos, Indra desarrolla tecnologías para el ámbito náutico militar y la aviación militar, y Oesia se dedica a tecnologías militares como sensores de búsqueda y seguimiento por infrarrojos, necesarios para la búsqueda y detección automática de blancos.

Empresas internacionales

Banco Santander también ha financiado a empresas de armas a nivel internacional. Sólo en los últimos cuatro años (2011-2015), de acuerdo con citado informe, la entidad financiera de los Botín ha concedido préstamos por 1.477 millones de euros, ha intermediado en emisiones de bonos y pagarés por valor de 241 millones, tiene 17 millones en acciones y bonos y está vinculada a 43 millones en exportaciones de armas italianas.

La cifra total, apuntan los activistas, alcanza los 1.780 millones de euros. Restados los 235 millones de operaciones con firmas españolas, las de ámbito internacional superan los 1.500 millones. Por último, y según el Centro Delàs, "Banco Santander ha concedido préstamos por 1.441 millones de dólares a industrias militares nucleares como Airbus, Boeing, Finmeccanica, Fluor, General Dynamics, Honeywell International, Safran y Thales".

En la Junta de accionistas

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Por su parte, activistas de la campaña Banco Santander sin Armas han intervenido este viernes en la Junta general de accionistas de Banco Santander para denunciar y hacer públicos los datos del informe y exigir a la entidad financiera que abandone estas prácticas. Los activistas tomaron la palabra tras cederles sus acciones decenas de pequeños inversores para que pudieran representales en la mencionada junta.

"Miembros del consejo de administración, señoras y señores accionistas, deben ustedes saber que con estas inversiones el Banco Santander contribuye decididamente al negocio de las armas y de la guerra, y a prolongar guerras, violencia y sufrimiento. Sra. Botín, le instamos a abandonar cualquier financiación a empresas que fabriquen y exporten armas. Sólo así podrán estar seguros de que sus beneficios no proceden de ninguna guerra", le dijo a la presidenta de la entidad la activista Audrey Esnault cuando le fue concedido el turno de palabra, señala la campaña en un comunicado.

A preguntas de infoLibre, el Banco Santander no se pronunció este viernes sobre los hechos que denuncian los activistas. 

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