Envidia literaria
Almudena Grandes regresa a los 'Episodios' de Galdós, "fundamentales para comprender este país"
En un primer momento Almudena Grandes (Madrid, 1960) duda: “Yo no podría contestar honestamente a esta pregunta”. Este agosto diferentes escritores y escritoras contarán en esta sección de Verano libre cuál es el libro ajeno del que les habría gustado ser autores. “Soy muy reacia a las listas de favoritos porque siempre se me quedan cortas…”, continúa. Pero después de dejar claro que la elección no le es nada fácil, Grandes se decanta por Episodios nacionales, de Benito Pérez Galdós: “Por homenaje, por amor y por lealtad podría decirte muchos otros libros, pero voy a decirte los Episodios nacionales”.
Y no es de extrañar, pues la autora ya ha expresado muchas veces su admiración hacia la figura de Galdós y se encuentra, además, enfrascada en un modelo que toma del novelista del siglo XIX: la escritura de la serie Episodios de una guerra interminable, un proyecto en el que intenta narrar la historia de España entre la Guerra Civil y los años sesenta a través de seis novelas —cuatro de ellas ya publicadas— que comenzó su andadura con Inés y la alegría. “Yo no sé cuántos escritores hay en el mundo que puedan presumir de haber inventado en el último tercio del siglo XIX un formato narrativo que se pueda usar en el primer tercio del siglo XXI”, señala la autora, en referencia a Galdós, que escribió seis series de un conjunto de 46 novelas sobre la historia del siglo XIX.
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Sin embargo, la primera obra de Galdós que la escritora recuerda haber leído no fue ninguna de los Episodios nacionales, sino la novela Tormento, por la cual una joven Almudena Grandes de 15 años decidió seguir la estela del autor en otras de sus letras hasta desembocar en la serie que, años después, inspiraría la suya. “Yo creo de verdad que los Episodios nacionales son fundamentales para comprender este país, que si la gente en España los leyera más habría fenómenos de la vida contemporánea que se entenderían mucho mejor”, dice.
Almudena Grandes vuelve a dudar cuando se le plantea el dilema de volver a elegir. Esta vez para que lo haga entre algunas de las novelas que conforman los episodios de Galdós y que ella ya ha leído, como mínimo, dos veces: “Algunos me los he leído varias veces. Otros no, otros solo dos veces”. De entre todas estas obras, la autora ganadora del Premio Nacional de Narrativa en 2017 precisamentecon uno de los títulos de esta serie, Los pacientes del doctor García, elige cuatro ante el desafío de la selección –aunque le “gustan todos”—: El 19 de marzo y el 2 de mayo, La corte de Carlos IV, Zumalacárregui y Cánovas. “En toda la última serie [de la que Cánovas es el último título], Galdós hace comparecer a la historia y va contando por qué, en su opinión, este país no tiene remedio. Es absolutamente pertinente ahora mismo”.
“Galdós ha influido en mí como lectora, en mí como escritora, me ha enseñado cosas que son fundamentales para mi oficio. Por decir solo dos: a construir las novelas como casas [en las que la estructura es el elemento más importante] y en segundo lugar me ha enseñado algo fundamental a mí y a todos, que es a contar la historia desde abajo”, desde la perspectiva de la gente de a pie. Una fórmula que la autora utiliza ahora, como buena alumna, en sus propias novelas.