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Electoralismo ‘mariano’

Mario Martín Lucas

En este especialísimo año 2015, cargado de citas electorales, se dará, por primera vez, un ripio más, con la coexistencia de dos distintas tablas fiscales a aplicar a todos los ciudadanos españoles en su IRPF en un mismo periodo de doce meses, consecuencia de la decisión de adelantar, con efecto de uno de julio de 2015, la rebaja fiscal ya prevista, y presupuestada, hace meses. Naturalmente, desde las portavocías del poder se ha descartado cualquier tinte electoralista de esta medida por parte del Gobierno del PP y del señor Rajoy, como tampoco tiene nada que ver con sus intereses partidistas, el hecho de adelantar la tramitación de la Ley de Presupuestos de 2016, para dar tiempo a su aprobación por la mayoría absoluta popular en esta legislatura, cuyo mandato está a escasos meses de expirar, lo que supondría un adelanto de trabajo sí el resultado de las próximas elecciones generales no modificara el color político del actual gobierno, pero que comprometería gravemente la acción política, y presupuestaria, de una posible mayoría política distinta a la actual, con la apertura de otro nuevo proceso de modificación de presupuestos que, al menos, ocuparía cuatro meses desde su enunciación, tras su toma de posesión. Para comprender la situación vale con enunciar que en los tres últimos cambios gubernamentales sucedidos en nuestra democracia, hubo prórrogas de los presupuestos de los años precedentes.

Pero más allá de nuestras fronteras se está produciendo otro punto de mucho interés para el, no nuevo, candidato del PP a las elecciones generales españolas, se trata de Grecia y del referéndum convocado para este domingo por su primer ministro, Alexis Tsipras, ya que, tanto, el oxi (no) que defiende éste, cómo el vai () por el que suspiran sus acreedores internacionales, le servirán al señor Rajoy para extrapolar el riesgo de “populismo” que suponen “algunas candidaturas” similares a Syriza en Grecia, en evidente asociación de ideas con “Podemos” en España.

El señor Rajoy tiene claro ya el único punto que le moviliza de cara a los próximas meses: conseguir su reelección aunque sea por un puñado de votos sobre el candidato que quede en segunda posición, y en los próximos meses asistiremos a toda suerte de artificios y prodigios orientados a ello desde el poder.

¡Bienvenidos al “electoralismo mariano”!

Mario Martín Lucas es socio de infoLibre

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