¿A quién se debe Pedro Sánchez?

La cuota mayor de responsabilidad en el éxito o fracaso del proceso de investidura en curso que permita la designación del candidato a presidente del futuro gobierno, se está haciendo recaer sobre Pedro Sánchez, con el agravante añadido, de que ante sus posibles pactos, está recibiendo presiones desde todos los frentes de poder con capacidad de condicionar sus decisiones.

Es lamentable el espectáculo de declaraciones de algunas “viejas glorias” del PSOE y de dirigentes en activo –algunos en el Comité Federal del partido- dispuestos a promocionar con todo tipo de argumentos democráticos y con su inhibición, la reelección de Mariano Rajoy actual presidente del PP como futuro presidente del Gobierno.

Un partido, el PSOE, con una cuota nada despreciable de responsabilidad en el desprestigio de la socialdemocracia y en la degradación de la política que venimos sufriendo, con una oferta de “cambio” y regeneración política de la que ha hecho banderín de enganche electoral en las dos campañas precedentes, no puede recuperar la credibilidad perdida y causante de momento de su imparable despeño electoral, si contribuye por acción (no lo creo) o por omisión (me resisto a creerlo) a que un partido el PP –auténtica fosa séptica de corrupción- con Rajoy, de nuevo presidente... vuelva a acceder al gobierno.

El dilema es ¿a quién corresponde legitimar las decisiones de Sánchez?, ¿a la ejecutiva? ¿al Comité Federal del Partido?, ¿a sus bases bien sean militantes o simpatizantes? ¿O a los electores?

Un constitucionalista como Francesc de Carreras, se preguntaba, en su columna de El País,quiénes son las bases, llegando a la conclusión de que este concepto ha cambiado, y que las bases, no son ya sólo los militantes de carnet ni los simpatizantes, sino que incluye en el mismo también a los potenciales electores.

Argumenta también y añade el columnista tras enumerar sus cualidades, que un líder como “mandan los cánones” –la frase y entrecomillado son míos y no de Carreras- debe tener claro que no se puede agradar en exclusiva a los militantes, ¿incluye Carreras dentro del concepto al Comité Federal y a los barones? si eso supone ningunear a los electores. Circunstancia que de ocurrir, puede conducir a la debacle electoral del partido.

Exactamente lo que le estaba ¿le está? ocurriendo al PSOE. Un partido en caída electoral por su dejación ideológica, ignorante de sus bases y claudicante ante la censura de su elitista y jacobino Comité Federal.

No sé cuál era la intencionalidad de Francesc de Carreras, miembro fundador de Ciutadans con su volátil y voluble presidente Rivera a la cabeza. Pero si nos ceñimos literalmente a lo expresado en su columna de opinión, yo opino –valga la redundancia- que quizás de forma inconsciente, le ha echado una mano a un Sánchez, apoyado por las “bases”, pero asediado por la “élite de militantes” constituida por muchos ex dirigentes, actuales y viejos barones y por su Comité Federal, para que permita acceder a Rajoy a la formación de gobierno.

Eso sí, que quede claro, con el apoyo del partido “apoya lo que sea” -del que es cofundador el columnista- tras su intento fracasado de lo contrario con el PSOE –una estrategia para excluir a Podemos y promocionar su soñado “tripartito inviable”, con tal de gozar de protagonismo y tocar poder político. Por supuesto... con su exigencia ahora, de la abstención patriótica de Sánchez para hacer presidente a Rajoy.

Y un dato demoscópico que reafirma los argumentos de Carreras, si consideramos fiable la reciente encuesta de los únicos sociólogos que “acertaron” en sus pronósticos la noche del 26J, Juan José Domínguez y Carlos de Torres –ignoradas mediáticamente por todos los gurús de la demoscopia que se estrellaron no sé si de forma intencionada y pactada estrepitosamente– respecto a las expectativas de voto si hubiera terceras elecciones estas Navidades, y publicada en eleconomista.es (el 29 de agosto de 2016)

La resistencia de Sánchez a ceder ante la presión de Rajoy, Rivera y su Comité Federal para investir al primero como presidente del gobierno en contra de lo insinuado por este último, le está dando –si hacemos caso al sondeo- sus frutos a Sánchez, ya que pisaría los talones en intención de voto a Rajoy.

Por lo que animo a Sánchez a que como argumenta el señor Carreras en su columna de opinión, siga ejerciendo su liderazgo contra viento y marea, desoyendo los cantos de sirena de Rajoy y de Rivera y la coacción de la élite militante del Comité Federal del PSOE.

¡Y si tienen que cambiar los estatutos del partido... que los cambien!

PD:  El señor Francesc Carrera bien haría en dar un toque de atención al presidente de su partido, el señor Albert Rivera. La incongruencia y la volatilidad de su discurso solo contribuyen a su descrédito. No se puede ejercer de “líder” de la regeneración política, y al mismo tiempo, salvar la cara cuando no apoyar explícitamente a los líderes responsables aventajados de su degeneración.

Amador Ramos Martos es socio de infoLibre