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Podemos da por hecha la abstención del PSOE e intenta evitar que le acusen de sacar tajada de la crisis

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Podemos quiere evitar aparecer como la formación que se aprovecha de la crisis del PSOE. Y, por ello, sus dirigentes apuestan por no ahondar en la profunda herida de los socialistas en las próximas semanas, si bien muestran diferencias con respecto a la relación que debe mantener el partido morado con el PSOE a largo plazo: mientras los sectores más cercanos al líder del partido, Pablo Iglesias, afirman que el cisma abierto en los socialistas es la prueba de que éstos no querían una "relación de igual a igual" con Podemos, los partidarios de su número dos, Íñigo Errejón, abogan por esperar antes de hacer un análisis que permita formar "una mayoría nueva" en torno a Unidos Podemos.

La explosión interna que sufrió el PSOE la semana pasada, que se inició con la dimisión de 17 miembros de su ejecutiva y que culminó con la dimisión de su secretario general, Pedro Sánchez, tras una reunión subida de tono del Comité Federal socialista, generó reacciones de todos los partidos, si bien Unidos Podemos fue una de las formaciones que se pronunció con mayor rapidez y profundidad al respecto. Pocos minutos después de que los críticos certificaran su victoria frente a Sánchez, Iglesias afirmaba en Twitter que se habían impuesto "los partidarios de dar el Gobierno al PP", mientras Errejón planteaba, en la misma línea, su "preocupación por el posible repliegue conservador".

No fueron los únicos. El líder de En Comú Podem, Xavi Domènech, o el coordinador federal de IU, Alberto Garzón, también se pronunciaron en esa red social –y, en el caso de Garzón, también a través de un artículo– con argumentos similares: la crisis del PSOE es "el fin de una generación de dirigentes" y no un cisma puntual, que muestra, en palabras del líder de IU, "la falta de un proyecto político coherente" de la socialdemocracia a nivel europeo.

Las palabras de estos y otros dirigentes de Unidos Podemos no han sentado bien en el PSOE, que se han quejado en privado pero también en público de ellas. Uno de los más claros ha sido el alcalde de Vigo y presidente de la FEMP, Abel Caballero, que criticó este lunes que, a su juicio, "estamos aquí por culpa de Podemos" y pidió al partido morado "que asuma sus responsabilidades, que son muchas y gravísimas".

La relación con el PSOE, un debate futuro

No obstante, los dirigentes de Podemos consultados por este diario afirman que tendrán un debate profundo sobre cómo debe ser a partir de ahora su relación con el PSOE, pero plantean que no será inmediato. La jefa de gabinete de Pablo Iglesias, Irene Montero, señala que esa discusión será "de largo aliento", mientras que el responsable de Discurso de Podemos, Jorge Moruno –uno de los dirigentes más próximos a Errejón– sostiene que es necesario "esperar" unas semanas antes de definir una estrategia con respecto al PSOE.

"Entiendo que ahora hay que tener respeto a los votantes y la militancia del PSOE, porque hay una generación para la que [la crisis socialista] tiene una fuerte carga emocional", señala en este sentido Moruno, que afirma que no sería apropiado "salir corriendo" a intentar pescar en río revuelto, porque intentar situar a Podemos como una alternativa a los desencantados con la crisis del PSOE tan poco tiempo después de su estallido podría generar "el efecto contrario" entre ellos. 

Montero, por su parte, explica que "es evidente que se hablará del PSOE en el próximo Consejo Ciudadano", el máximo órgano entre congresos de Podemos, que se reunirá el próximo sábado. Pero, no obstante, la dirigente afirma que el de la relación que debe mantener el partido morado con los socialistas es un "debate de largo aliento que no sólo se mantendrá" en esta reunión, y plantea que, a corto plazo, "la situación del PSOE provoca que nosotros no tengamos mucho que decir en relación a cómo debemos relacionarnos con ellos". "Vemos bastante claro que gobernará el PP", por lo que Podemos ya no tiene urgencia en solventar su debate interno sobre si ser más o menos flexibles a la hora de apoyar desde fuera un Gobierno en solitario de los socialistas o exigirles gobernar en coalición, sostiene Montero.

Las lecturas de la crisis

No obstante, las diferencias entre los partidarios de Iglesias y los de Errejón también se dejan ver en sus posicionamientos sobre el modo en el que Podemos debe afrontar en el futuro las consecuencias de la crisis del PSOE. "A quienes defendíamos que había que mantener una relación más de igual a igual con el PSOE, esta crisis nos da la razón", argumenta Montero, que señala que "a Sánchez, en definitiva, lo han derribado los del régimen por no atreverse a gobernar con nosotros".

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"Todos coincidimos en partir del análisis de que lo ocurrido en el PSOE refuerza la tesis de que los partidos tradicionales están en crisis", señala igualmente la dirigente, que no obstante afirma que, a su juicio, ahora es "evidente" que Iglesias tenía razón al avisar a Sánchez de que "se cuidase de la naranja mecánica" y de los que tenían "las manos manchadas de cal viva". "Visto lo visto, es bastante evidente que esa posición tenía sentido, y que quienes pensaban que era mejor abstenerse ante el pacto de PSOE y Ciudadanos se equivocaban", plantea Montero.

Por su parte, Moruno defiende la necesidad de esperar a que se calmen las aguas en el PSOE antes de decidir cuál debe ser la estrategia de Podemos en relación con los socialistas. "Tenemos que ser inteligentes y hacer una lectura audaz para abrir la mano a quienes quieren una mayoría nueva", señala el responsable de Discurso del partido morado, que se muestra partidario de esperar a que se aclaren las posiciones dentro de la "amalgama" que es la corriente crítica del PSOE que ha descabalgado a Sánchez.

Moruno, sin embargo, se muestra de acuerdo con Montero en que la crisis del PSOE es un síntoma de los problemas que experimenta "el régimen de 1978", precisamente porque los socialistas son el partido que ha sido "garante" del mismo. "El problema del PSOE no es de aparatos o de nombres, sino que procede de sus profundas contradicciones", afirma el dirigente.

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