El debate de investidura

Iglesias a Rajoy: “Igual con Twitter no se maneja bien, pero con los SMS se maneja usted de maravilla”

Pablo Iglesias, antes de pronunciar su discurso en la sesión de investidura.

Dardo del líder de Podemos, Pablo Iglesias, al candidato del PP a la Presidencia del Gobierno, Mariano Rajoy. Durante su réplica en el discurso de investidura, Iglesias afirmó jocosamente que Rajoy "con los SMS se maneja de maravilla", en respuesta al candidato, que previamente había acusado al líder de Podemos de hilvanar argumentos simples más propios "de Twitter" y había reconocido que no dominaba esa red social.

La pulla de Iglesias hacía referencia a los mensajes de texto que envió en 2013 Rajoy al extesorero del PP, Luis Bárcenas, uno de los principales acusados en el caso que lleva su nombre y también imputado en el caso Gürtel. Pero no fue la única referencia a la corrupción en la réplica de Iglesias, que pidió a la bancada del PP que "se calle" cuando se trate ese tema a causa de los casos que afectan al partido.

Y es que, casi al final de su intervención, Iglesias afirmó que "la gente humilde defiende las instituciones frente a los antisistema que se sientan aquí", porque "hay más delincuentes potenciales en esta Cámara que allá fuera", una frase que generó una fuerte polémica en el hemiciclo y que ocasionó gritos e improperios contra el líder de Podemos. No obstante, la mayor parte de su discurso estuvo centrada en tratar de argumentar que la abstención del PSOE para hacer presidente a Rajoy demuestra que a los socialistas no les diferencia nada de los conservadores.

Iglesias compareció en segundo lugar, tras el discurso que hilvanó el portavoz del Grupo Parlamentario Socialista, Antonio Hernando. Y buena parte de su discurso estuvo dirigido contra el PSOE, un partido para el que la investidura es, según Iglesias, un "trámite vergonzoso" que ilustra el inicio de una "triple alianza" con el PP y Ciudadanos. "El orden reina en Madrid, ha costado pero lo han conseguido", denunció el líder de Podemos, que criticó que "lo que no consiguieron en las urnas, lo van a conseguir con el abstencionazo"abstencionazo.

Iglesias abundó en el argumento que utilizó en la comparecencia tras su reunión con el rey: la abstención del PSOE supone la ruptura del "reparto simbólico de posiciones entre dos formaciones que, como decía el señor Rajoy, podían estar de acuerdo en sus posiciones sobre la economía o la relación con Europa, pero representaban culturalmente dos mundos". "Eso hoy ha terminado", aseguró el líder de Podemos.

Y es que esa "triple alianza" tiene detrás "nada menos que 15 millones de ciudadanos", pero "da la impresión de que se deja fuera tres cosas: a las naciones sin estado, a los menores de 45 años y a las grandes ciudades", señaló Iglesias, en referencia a los buenos resultados de su partido en Cataluña, Euskadi o Galicia, entre los jóvenes y también en las poblaciones más grandes. "Hay un enorme contraste entre el pasado que representan ustedes y el futuro", planteó.

El PSOE está "más cerca del PP" que de Podemos

"La situación de bloqueo político tuvo que ver con un problema del PSOE, pero va mucho más allá de eso, porque su crisis es la crisis del sistema político español", abundó en este sentido Iglesias, que afirmó que los socialistas "han sido el partido de la modernidad", el que estaba "asociado a las ideas de progreso". Pero hoy, afirmó el líder de Podemos, existen en el PSOE "dos bandos: los que decían 'pongámonos de acuerdo con el PP' y los que querían elecciones y despertarse en 2013". Pero la abstención "demuestra es que están más cerca del PP que de nosotros" y que existe "un contraste entre ayer y hoy", criticó Iglesias.

Un contraste, sostuvo , que determina el fin del sistema político nacido de la Transición. "Es histórico que nosotros no vayamos a pasar por el aro y vayamos a ser oposición de verdad", señaló el líder de Podemos, que insistió en relación al PSOE en que "es muy difícil ser oposición después de entregar el gobierno al PP". A juicio del dirigente, hay otros tres elementos que muestran el inicio de un nuevo ciclo político: el hecho de que PP y PSOE sean débiles en País Vasco y Cataluña, la decisión del PSC de mantener su no a Rajoy y el nuevo sistema de partidos que, según Iglesias, ha conseguido neutralizar los efectos de un sistema electoral "diseñado para dificultar la llegada de la izquierda al Gobierno".

El factor fundamental que provocó este cambio de sistema, sostuvo Iglesias, fue "el 15-M". "Algunos no entendieron que se iniciaba una nueva transición donde el miedo dejaba de ser un operador político", afirmó Iglesias, que la comparó con la transición de finales de los 70 y principios de los 80 y aseguró que, a diferencia de entonces, "los jóvenes españoles no tienen miedo, y la mejor prueba" de ello es la entrada de Podemos al Congreso.

"No se despiste de la dirección de la historia", advirtió Iglesias a Rajoy en su turno de contrarréplica. Y es que el candidato conservador "va a ser presidente porque ha tenido que romper algo fundamental: el turnismo", aseguró el líder de Podemos, que insistió en que "para salvar a su partido y a su Gobierno, ustedes se han cargado una de las bases de funcionamiento del sistema político español". "¿Y se da usted golpes de pecho?", se preguntó Iglesias, que pidió a Rajoy "prudencia" porque, se mostró convencido, Podemos alcanzará el Gobierno en el futuro.

Donald Trump y Al Capone

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Iglesias copó casi todo el tiempo destinado a la intervención del grupo parlamentario de Unidos Podemos. No obstante, tras él intervino el portavoz de En Comú Podem, Xavier Domènech, que aseguró que su coalición va a ser "el principal muro de contención" de las políticas del PP en Cataluña, y aseguró que Rajoy "constituirá un gobierno del pasado y con el apoyo de los resignados que no construyeron una alternativa", en referencia al PSOE.

Por su parte, el coordinador federal de IU, Alberto Garzón, aseguró que el Gobierno al que accederá Rajoy estará apoyado en un "fraude", una "farsa" provocada por el "motín oligárquico" en el PSOE, que según Garzón ha traicionado a sus electores. En este sentido, el líder de IU criticó los argumentos de los socialistas, que plantean que es necesario un Gobierno con la máxima presteza: "Con las excusas que ha puesto para investir a Rajoy, el PSOE podría investir al señor Donald Trump o al señor Al Capone", aseguró.

En la misma línea intervino la portavoz de En Marea, Alexandra Fernández, que tachó al PP y al PSOE de "partido único". "Se demostró que para dar un golpe palaciego resulta más fácil organizar la retirada forzosa de un dirigente político que introducir a un señor con bigote y tricornio en el Congreso", criticó Fernández en referencia al golpe de Estado del 23-F. Y es que, para la portavoz de En Marea, el relevo de Sánchez fue la última de las "tres jugadas del partido único": las dos anteriores, a su juicio, fueron la abdicación del rey y la reforma del artículo 135 de la Constitución.

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