La situación en isla griega de Kos se complica. Incapaces de hacer frente a la llegada masiva de inmigrantes. Estos se agolpan junto a un estadio en busca de un techo y alimentos. El agobio provoca escenas como esta: un hombre en cólera forcejea para entrar al recinto. Cae al suelo y continúa su particular estado de ira. No es el único, mujeres a punto de desmayarse. El escenario es dramático. Incluso varios niños como este, levantado por su padre, sufren la falta de medios: "No puedo creer que estemos en Europa. Esto es el tercer mundo. No hay baños, no hay agua. La gente lleva esperando más de 10 días. ¿Qué puedo decir? Si esto es Europa, regresaremos a nuestros países". En lo que va de año 124.000 inmigrantes han llegado a Grecia, un país inmerso en una profunda crisis económica. Justo hoy, la Unión Europea destina 2.400 millones en ayudas para afrontar la crisis migratoria. Pero el país heleno no es el mayor beneficiario, sino el tercero, con un presupuesto de 474 millones de euros.

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