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El futuro del PSOE

Las primarias en el PSC: la fuerza electoral de Parlon frente al liderazgo orgánico de Iceta

Núria Parlon y Miquel Iceta, en una foto de archivo.

El primer secretario del Partit dels Socialistes de Catalunya (PSC), Miquel Iceta, y la pujante alcaldesa de Santa Coloma de Gramenet (117.000 habitantes) y actual número dos del partido, Núria Parlon, rivalizarán el 15 de octubre en las urnas por el liderazgo del partido.

Ambos equipos esperan un resultado muy equilibrado, lo que puede amenazar con resquebrajar de nuevo a una organización que lleva dos años –desde la dimisión de Pere Navarro en 2014– luchando por estabilizarse. No obstante, ambos aspirantes están realizando una campaña de "guante blanco" y se han mostrado favorables a la integración sea cual sea la decisión de la militancia. Ambas candidaturas obtuvieron el mismo número de avales: 3.717. 

El partido hermano del PSOE llega a estas primarias tras dos años en los que la sangría electoral no ha cesado –principalmente por la irrupción de Ada Colau y sus comuns y el auge de Ciudadanos– y con las persistentes dificultades para tener una sola voz en una cuestión clave, la del derecho a decidir. De hecho, en el único debate celebrado hasta la fecha ambos candidatos discreparon sobre cómo plantear la propuesta de reforma constitucional. 

Iceta –que en 2013 soliviantó a varias federaciones tanto del PSC como del PSOE al proponer la creación de una ley para celebrar un referéndum pactado en el caso de que fracasara la reforma constitucional, la llamada vía canadiense– defendió en ese debate la reforma federal que los socialistas pactaron en la declaración de Granada. Parlon, sin embargo, dijo que "Granada está bien pero es insuficiente" e insistió en que el PSC tiene que hacer una propuesta que desarrolle esa declaración y pactarla con el PSOE. No obstante, en otras ocasiones durante las últimas semanas la candidata ha recordado que aunque en el pasado defendió la vía canadiense ahora esa no es su propuesta. 

A pesar de estas discrepancias, un histórico dirigente del PSC asegura a infoLibre que existen únicamente "diferencias de matiz" entre ambos aspirantes y asegura que "en lo esencial" están de acuerdo. Esta fuente lamenta que no fraguaran los intentos de integración que habrían evitado estas primarias y subraya que, a su juicio, "Iceta tiene la fuerza del liderazgo del partido y Parlon la del apoyo electoral". No en vano, la ahora candidata obtuvo la mayoría absoluta en Santa Coloma de Gramenet en las últimas municipales. 

Esta idea sintetiza la voluntad de algunos sectores del partido, que habrían preferido un pacto para mantener a Iceta como primer secretario con la condición de que Parlon fuera la próxima candidata al Parlament. Conviene recordar que en las autonómicas celebradas en Cataluña en septiembre del año pasado el PSC sólo logró ser primera fuerza en tres de los 97 municipios del antiguo cinturón rojo, el tradicional granero de votos de los socialistas: Santa Coloma de Gramenet, donde gobierna Parlon; Cornellà de Llobregat y Badia del Vallès. 

Propuestas de integración 

En el equipo de Iceta trabajaron hasta el último momento para intentar que Parlon no diera el paso ahora con el objetivo –aseguran– de evitar la imagen de división que proyecta cualquier proceso de primarias. La oferta, según señala un dirigente afín al actual primer secretario, fue un "liderazgo plural" en la organización, que Iceta fuera el candidato a las próximas catalanas –de fecha incierta debido a las tensiones entre Junts pel Sí y la CUP– y que ella tomara el testigo después.

Parlon, que en 2014 no quiso asumir el liderazgo del partido tras la dimisión de Pere Navarro, declinó ahora la propuesta de apartarse. "Entonces no aceptó porque no quería ser una líder tutelada, pero ahora sí está con fuerza y con ilusión, conoce la organización y el territorio", dice un miembro de su equipo. En el entorno de la alcaldesa entienden que dar voz a la militancia no se tiene que ver como un factor de erosión y señalan que este proceso de primarias ha contribuido a "revitalizar" a un PSC "instalado en una situación de confort". 

"Hay que tener en cuenta, además, que ahora tocaba hacer un congreso ordinario que, según nuestras normas internas, va precedido de una consulta sobre el primer secretario. Nosotros queremos que haya cambios en la organización, creemos que tiene que ser más próxima, más horizontal... y creemos también que es importante que las bases se pronuncien", dice un miembro del equipo de Parlon.  

En cualquier caso, ambos candidatos se han ofrecido a trabajar por la integración sea cual sea el resultado. De hecho, los dos han propuesto una misma fórmula de bicefalia: el puesto de primer secretario para el ganador y la presidencia del partido –que pasaría a tener funciones ejecutivas y dejaría de ser un cargo honorífico– para el perdedor. Hay que tener en cuenta, además, que Parlon no es diputada en el Parlament, por lo que en caso de resultar vencedora, Iceta mantendría la portavocía del grupo. 

La clave estatal 

La clave estatal también estará presente en esta campaña. Ambos dirigentes se han mostrado defensores de que el PSOE mantenga el no a Mariano Rajoyno, si bien Parlon ha sido más beligerante en sus declaraciones. En enero de 2016, en una entrevista en elcritic.cat, dijo que se daría de baja en el PSC en el caso que los socialistas llegaran a un acuerdo de Gobierno con el PP. La alcaldesa también se ha mostrado favorable a que los diputados del PSC rompan la disciplina de voto en el caso de que las bases catalanas apostaran por el no a Rajoy y el PSOE decidiera virar a la abstención. Iceta no se ha mostrado por el momento partidario de romper esa disciplina. 

Los dirigentes consultados coinciden en situar a Parlon en un sector "a priori, más izquierdista", más cercano a las bases del partido y a los jóvenes. Su objetivo es hacer cambios orgánicos y abrir el partido al territorio y a la ciudadanía. Iceta, por su trayectoria, es una persona más vinculada al aparato y a la vieja guardia, si bien incluso en el equipo de su oponente no dudan en poner de relieve sus "indiscutibles valores" y en resaltar que es un político "con pasado, presente y futuro en el PSC". El actual primer secretario es más partidario de reformar, que de renovar. 

Por ejemplo, Parlon arremetió contra el fallido acuerdo de investidura que el PSOE y Ciudadanos firmaron en febrero. La alcaldesa calificó ese pacto de "arriesgado" porque, en su opinión, había supuesto "renuncias excesivas" que diluían el programa socialista y, en el caso de Cataluña, dejaban al PSC en una posición "débil". Iceta, aunque sí lo defendió, insistió en todo momento en que había que sumar a otras fuerzas. De hecho, él fue uno de los primeros dirigentes que abogó a los pocos días de las elecciones por pactar con Podemos y Ciudadanos con el argumento de que a los tres les unía la voluntad de expulsar del Gobierno a Mariano Rajoy. 

En la batalla que ha partido al PSOE en dos a nivel estatal ambos se han situado en el sector de Pedro Sánchez. A Iceta se le ha considerado uno de los principales valedores del ex secretario general y Parlon formó parte de su comité de expertos. No obstante, la alcaldesa mantiene una buena relación personal con el diputado Eduardo Madina, al que respaldó en las primarias en las que se enfrentó a Sánchez y perdió en 2014. Pero a Madina y a Susana Díaz les ha unido en los últimos tiempos su oposición a Sánchez.

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Miembros de la campaña del todavía primer secretario ven "cierta vinculación" entre Parlon y la presidenta de la Junta de Andalucía, en principio más contraria a cualquier mejora del autogobierno catalán. Aseguran que la líder del PSOE andaluz estaría reforzando a la alcaldesa con el objetivo de mermar así los apoyos de Iceta, muy vinculado a Sánchez.

Las citadas fuentes justifican esta vinculación con dos hechos: el impulso a la candidatura de Parlon por parte de las casas regionales andaluzas –donde tradicionalmente ha habido voto socialista– y las Juventudes Socialistas, donde Díaz también tiene arraigo; y el acto que protagonizó el pasado 22 de julio junto a las alcaldesas más importantes del PSC y al que invitó a Susana Díaz. En ese evento intervino también Ximo Puig, presidente de la Generalitat valenciana, y a última hora se invitó a Iceta, al que no le gustó demasiado la iniciativa. 

En el equipo de Parlon no ocultan su malestar con estas insinuaciones y aseguran que se trata de una "muy mala interpretación" de los hechos. Reiteran que la candidata, en 2014, hizo campaña por Madina (entonces alineado en el sector opuesto a Díaz) y que, después, mantuvo su lealtad a Pedro Sánchez entrando a formar parte incluso de su comité de expertos. Recuerdan, además, que la alcaldesa también participó en la última Festa de la Rosa en la Pineda de Gavà (Barcelona), en la que el PSC mostró su respaldo sin fisuras al ya ex secretario general. Ese fue el acto en el que un apasionado Iceta instó a Sánchez a mantenerse "firme" y a evitar cuatro años más del PP. 

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